Cap0 "Laberinto de Luz"

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Suspiro por suspiro, el guardián dió lentos pasos mientras combatía su cansancio y el dolor en sus pies por el suelo rocoso. La luz de los cristales en las paredes impactaron sus ojos, dándole el deseo de desplomarse en el suelo y descansar hasta que todo esto acabe de una forma u otra.

En poco tiempo, la luz de los cristales fueron desapareciendo poco a poco del entorno lleno de rocas y madera. La oscuridad le hizo recordar las noches, esas noches donde todos dormían con completa paz y tranquilidad. Finalmente lo hizo, calló al suelo vencido por el cansancio, arrinconado.

-- mh...?

El guardián enfocó su vista en lo que sería una hoja de papel, arrugada y humeda por el pasar de los años. Tres tubbies, aparentemente amigos. Uno de ellos de color marrón, al lado de un segundo de un color naranja, y el tercero de un color turquesa, ambos sonriendo y celebrando su amistad.

El guardián lo entendió, no es hora de rendirse. Con sus pocas fuerzas se levantó una ves más, emprendió su caminata entre la luz y las sombras, sobre los cristales y las rocas.

-- Po... t-tu muerte, no sera en vano.

Caminando por un camino de cuatro pasillos, semejantes a cada uno de los puntos cardinales, (Siendo en el "sur", desde la perspectiva del guardian, por donde vino.) el tubby guardián detectó un sonido desde el "oeste", algo así como una respiración. Giró su cabeza con miedo, y valientemente dió un paso delante.

Digamos que eso pudo haber sido un grave error.

Una criatura marrón se aventó desde las sombras directo hacia el guardián. El tubby blanco dió un salto hacia un lado evitando el ataque de la criatura. El equilibrio fué un problema para el guardián. La criatura se estampó a si mismo en una pared rocosa, causando un temblor en la cueva y un gran aturdimiento en su cabeza. A pesar de tener el equilibrio en su contra, el guardián intento escaparse por el "norte", siendo el unico lugar con escape de la bestia. Con sus fuerzas intentó correr de un lado a otro con esperanza de salir de ese humedo y rocoso lugar.

Fue cuando el guardián se detuvo para descansar, que notó lo que pareciera ser otra hoja de papel, tambien arrugada y rota. El tomó la hoja intentando entender lo escrito en ella.

-idí escribir un diario para contar mis aventuras con los mejores amig-

-- ¿Un "diario"? ¿Que fué lo que sucedió aquí? ¿Quien escribió esto?

Con un suspiro, el guardián dejó caer la hoja de papel al suelo, para seguido seguír caminando buscando una salida. Al poco tiempo, el guardián noto algo un tanto inusual, otro tunel, pero este llevaba hacia arriba, como escaleras a un segundo piso. Aún así, la caminata hacia arriba duró un largo tiempo.

-- Pareciera que... la temperatura cambió de la nada... extraño.

El guardián siguió caminando, encontrando mas hojas de papel, que desde cierto ángulo parecían formar parte de un gran rompecabezas; palabra por palabra, dibujo por dibujo, color por color.

No hay mucho por lo cual escribir aquí, solo rocas, cristales, y hojas. Asi que permiteme adelantarme un poco.
El guardián, abatido por el cansancio, redujo su velocidad. En cuestión de segundos, volvió a su velocidad anterior tras ver hilillos de luz diferentes a la luz que emiten los cristales, y un poco de nieve. ¿Será la salida de este laberinto?

Si, y no.

-- La luz proviene del exterior, pero aún hay una pared aquí -- Dijo tratando se pensar en algo -- Si tan solo pudiera romper esta pared, (...) un momento, ¡romper!

El guardián aparentemente tuvo un riesgoso plan; caminó por el laberinto buscando aquella criatura, sin alejarse mucho de la luz del exterior. Debido a no obtener señal de la bestia, intento alejarse, intentando recordar el camino de vuelta. (Aún que el cansancio ponga esa tarea en dificultad "experto") Lamentablemente, el guardián acabó en un túnel sin salida, una parte por las rocas, y otra por aquella criatura marrón.

SlendyTubbies III - The Alternative StartingWhere stories live. Discover now