Expulsemos Las Flores. [TodoBakuTodo] [One-shot]

Las flores siempre florecen en primavera

Lo más difícil de un amor no correspondido es aceptarlo; lo más difícil de un desamor es sobrevivirlo.

– George Pellicer

La enfermedad de hanahaki por mucho tiempo la había creído un simple rumor, un mito más del montón; morir por una persona que no corresponde tus sentimientos suena ridículo, ¿no es así? Eso creía Todoroki Shōto, nunca había creído en aquellas historias ridículas, cuentos que era sacados de una fantasía.
Pero ahora el chico de cabellos rojos y blancos se encontraba sacando de su boca pequeños pétalos de un color rosado manchados con sangre.

[...]

Desde que el bicolor conoció al chico de cabellos rubios había empezado a desarollar sentimientos hacia el, cuando estaba con Katsuki su corazón era invadido por una gran calidez, se sentía cómodo y protegido a su lado, al encontrarse con el de ojos rubís se sentía con la capacidad de hacer cualquier cosa; cuando el rubio le decía algún cumplido sus mejillas se teñian de un color carmesí, muchas cosas pasaban, cosas que nunca antes había experimentado con alguna otra persona, la calidez y el cariño que había desarrollado por Bakugō era más fuerte que el de un simple amigo, se había enamorado del chico sin haberse dado cuenta de ello; sin embargo no todo en esta vida es perfecto, no todos los sentimientos son correspondidos y ser rechazado duele hasta la muerte y eso era lo que estaba por descubrir Shōto.

Bakugō y Todoroki habían formando un vínculo más fuerte gracias a las clases para obtener sus licencias provisionales, habían llegado a la confianza, confianza que demostró el rubio al contarle a Shōto sobre su amor hacía cierta persona.

Lo había llamado hacía la azotea, el bicolor no se negó en lo absoluto al ir con él; al llegar a esta ambos tomaron asiendo en el suelo de la azotea.

—¿Para que me has llamado hasta aquí? —Indagó con curiosidad el heterocromico.

—Es un tanto vergonzoso contarte, pero necesito que alguien lo sepas, así que promete que guardarás el maldito secreto. —Un pequeño rubor invadía las mejillas del chico.

—Te prometo que no se lo diré a nadie.

Bakugō dudaba en decírselos a Todoroki, pero después de todo era una persona que se había ganado su confianza, era en el que más creía que guardaría su secreto.

—Me gusta desde hace tiempo una persona.

Al escuchar eso el corazón del bicolor empezó a sentir una pequeña presión sobre su pecho, pero con curiosidad y a la vez con miedo pregunto.

—¿Quién es esa persona?

Suspiró profundamente antes de hablar

—Me gusta Deku. —Dijo en un susurró.