El Genio y yo

One-shot

Bueno no sé cómo empezar, la verdad es que no soy una chica cualquiera, tan solo tengo 17 años y tengo un secreto en la cual nadie debe enterarse.

Todo comenzó si no mal recuerdo en septiembre del año pasado, cuando fui a comprar una nueva lámpara, ya que la mía se había echado a perder y trate de conseguir una igual, busque y busque por toda la ciudad y solo la encontré en una pequeña tienda sucia y vieja la cual que yo no sabia de su existencia; me dio tanto miedo que solo compre la lámpara y Salí corriendo de allí, cuando llegue a mi casa, saque la lámpara y note que estaba algo sucia.

Fui por algo para limpiarlo y al tallarlo tantito salio de ella un genio; que por cierto muy joven y guapo, la cual al aparecer frente a mi no me lo podía creer, él me dijo

-¡hola! Soy el genio de esta lámpara y solo puedo concederte tres deseos, piénsalo bien

Yo impresionada y dudando le dije- ¿es broma o que? yo que sepa los genios son gordos y viejos y tu no pareces serlo

El enojado me contesto – ¡Oye! ¡No te creas todo lo que dicen en las películas de que todos los genios son gordos y viejos! ¿Que no me ves? Yo tan solo tengo 18 años y soy delgado.... O ¿acaso me vez gordo y viejo?

-No.

- Y bueno tu eres mi ama así que señorita ¿Me podría decir cuál es su primer deseo?

-Mi primer deseo. Bueno la verdad es que... ¿Qué podría pedir?

Me Puse a pensar ¡Si no me hace falta nada! tengo todo lo que uno podría desear. ¡Soy rica! con unos padres maravillosos que me quieren mi vida es perfecta. Pero lo único que no tengo son amigos de verdad, los que tengo solo son mis amigos por conveniencia, así que...

-mi primer deseo es saber quienes de mis amigos es mi verdadero amigo.- me atreví a decir, que tan mal puede salir, tengo muchos amigos por lo menos debe haber dos que si son amigos de verdad, como por ejemplo mi amiga Kate, ella siempre está allí para mí. Al menos eso fue lo que pensé.

-entonces la palabra mágica.

-deseo saber quienes son mis verdaderos amigos.

Y en tan solo un abrir y cerrar de ojos, me mostró una lista en donde iban a parecer mis verdaderos amigos. Aunque fue muy doloroso ver que la lista estaba completamente vacía me puse muy feliz, el genio fue sincero conmigo y no me mentido para no hacerme daño.

-genio ¡gracias! por mostrarme la realidad.- él se me acerco y me dio un cálido abrazo; mis lágrimas se desbordaron de mis ojos y empecé a llorar en silencio.

Ese día llore y llore toda la noche entre sus calidos brazos hasta quedarme dormida, al día siguiente por la mañana desperté y me di cuenta que me había quedado dormida sobre su pecho, estaba tan avergonzada que no quería ni verle la cara, hasta que se me ocurre ver el reloj; ya iban a dar las 8 de la mañana ya era realmente tarde para ir a la escuela y como segundo deseo le dije

-genio deseo llegar a tiempo a la escuela

En un chasqueo de dedos me hizo aparecer en la escuela con el uniforme de la escuela como si me hubiera despertado tarde.

-toma esto es un silbato, tócalo si necesitas algo.

- si gracias genio, si no fuera por ti me hubieran suspendido.

Tocaron para el descanso y mis amigas me llamaron diciendo- ¡Aranza, vamos a almorzar!

-No gracias. Hoy la verdad no tengo ganas, pero vallan ustedes no se preocupen.