capítulo 2

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Poche

Maldita alarma no sono justo cuando más la necesitaba, hoy mi primer día de trabajo cuando por fin encontré uno voy super tarde.

Así empieza mi día,desde que regrese a Colombia  todo me ha salido mal . Empezado por no encontrar un trabajo y cuando por fin lo encontré mi maldita alarma no sono,
Sólo espero que no me despidan.

Hice mis necesidades super rápido más de lo que imaginaba, tome mi bolsa y salí de mi pequeño apartamento.
Mi uber por suerte no tardo mucho en cuestión de minutos ya me encontraba afuera del gran edifico.

Al entrar me encontré con una  secretaria para gusto muy payasa pero no le tome importancia, me apresure a llegar a la oficina de mi jefa.

Al estar justo enfrente de su puerta me empecé a poner muy nerviosa, y si es de esas jefas gruñonas, viejas, amargadas.?  pensaba sin siquiera tocar su puerta
- te vas a quedar sólo mirando la puerta.?  
  Al voltear a ver de quien se trataba me di cuenta que era la secretaria payasa.
-porque si es así date por despedida
Me volvió a decir ahora una risita de supeoridad. Sólo me limite a rodear y mis ojos y sin pensarlo abri la puerta.

Mierda. Murmure al darme cuenta que no había tocado. Lo primero que hice fue pedirle disculpa pero por llegar tarde.

-su primer día ya está dando excusas, y yo que pensé que era responsable con sus horas de trabajo pero ya vez todos en algún momento nos equivocamos.

Me dijo con un tono frío y una seriedad que para ser verdad me imtimidaba un poco o mucho talvez.

-En verdad lo siento-volvi a repetir .

Ella no contestó sólo asintio con su cabeza ya que tenía su mirada fija en  mi, yo también me quedé observandola sin duda alguna no era como la había imaginado hace unos minutos, sólo lo amargada.

Después de unos segundo me pidió que tomará lugar. Al estar más cerca de ella pude notar que tenía unos ojos muy hermosos, algunos rasgos que la hacian ver hermosa. -pero que estoy pensando donde queda mi heterosexualidad.? -   pensé. 

-bien señorita Garzón soy Daniela Calle su nueva jefa
Me dijo extendiendo su mano sin dudarlo estreche mi mano con la de ella, al sentir su tacto con el mío sentí una corriente muy extraña pero bonita.

-un gusto señora calle. conteste amable.

-Bien empezó con lo que realmente importa. Sólo me limite a asentir. En esa parte será su escritorio llevara está agenda que contiene todo lo relacionado a la empresa, las juntas, nombre de socios que se  deberá aprender, organizar documentos que como verá están muy desordenados. Entendió

- si muy bien, no le fallare gracias por está oportunidad que me está dandoComenté muy emocionada

Eso espero señorita y que no se vuelva a repetir lo de hoy. Ahora valla a su escritorio a trabajar
Me dijo un poco sería acaso nunca sonreía? Me pregunté.
Ah y una última cosa no vuelva a sin pedir permiso eh .
Sólo asenti y me senté en mib
escritorio.

Al ver todo el trabajo sin empezar ya me había dado sueño jaja.

Pero no podía fallar así que me dispuse a trabajar.  Este sería un día agotador.

Siempre Serás Mía. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora