2. El deber

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Apenas el sol salió, Blaze ya se encontraba despierta en la disposición de ir en busca de Sonic. La última noche Vainilla le había dicho que si bien no podía decirle dónde podría encontrar con exactitud a Sonic, sí sabía que Tails podría ayudarle en ese aspecto; además, le dijo que el dicho zorro se encontraba normalmente en Emerald Town, el cual se encontraba en dirección al oeste de Central City, ciudad que se encontraba en otro continente, pero, que podría ir hasta ahí usando el aeropuerto que estaba en la ciudad de Spagonia, la cual estaba al norte, bastante más lejos de Water Palace; era un largo recorrido en pocas palabras.

Blaze solamente esperó a que Vainilla, y Cream se despertasen para poder despedirse debidamente, y de ahí, retirarse. Le gustó mucho ver de nuevo a una amiga tan buena como Cream de nuevo.

No pasó realmente mucho tiempo para que la princesa llegase de Night Carnival a Water Palace, y de ahí a Spagonia, era un recorrido no muy largo. Vanilla le había prestado un poco de dinero para que pudiese ir hasta el otro continente; que raro, ¿no?, alguien prestándole dinero a una princesa imperial.

La princesa llegó algo cansada hasta el aeropuerto, había sido demasiado recorrido; ella estaba acostumbrada a correr muy rápido, y mucho, pero, no tanto. Así que una vez llegando al aeropuerto, se sentó en una de las sillas que se encontraban en la sala de esperar; pasaron unos minutos, y cuando ya había recuperado lo suficiente el aliento, se levantó un poco cansada, pero, ya no tanto como antes, y se dirigió a la recepción de los boletos de avión a Spagonia.

Buenos días, disculpe, ¿a qué hora sale el primer vuelo a Spagonia? —Pregunta Blaze a la recepcionista.—

El último vuelo acaba de salir hace unos minutos, el siguiente vuelo será para las cuatro y cuarto. —Responde la recepcionista.—

Supongo que debí haber ido directo a pagar mi boleto, y descansar después en el avión. —Piensa Blaze.— Entiendo, ¿puede darme un boleto para ese vuelo? —Dice a la recepcionista Blaze.—

Por supuesto. —Ella comienza a hacer el proceso, y le cobra el dinero de a Blaze.—

Blaze una vez con su boleto en mano, se dirige a sentar nuevamente en la sala de espera, a que salga el vuelo. Mientras ella esperaba, sin darse cuenta, ella se encontraba siendo vigilada. Pasó el tiempo hasta que logró ver que una mirada en ella tenía puesta; la mirada era de Rouge The Bat, a ella la había conocido durante la última vez que vino al cosmos de Sonic, junto también a Silver The Hedgehog, Shadow The Hedgehog, Espio The Chameleon, Vector The Cocodrile, y Charmy The Bee, aunque ya conocía de por sí gente de ahí; al ver la mirada tan pesada en ella, se preguntaba qué era lo que tanto le miraba. Rouge al verla directamente decidió levantarse, e ir hacia donde estaba ella.

Ey, tú eres Blaze, ¿no es así? —Pregunta Rouge.—

Sí, y tú eres Rouge The Bat. —Responde Blaze.—

Bien, parece que sí me recuerdas. En fin, ¿no se supone que tú eras de otra dimensión?, ¿qué haces aquí? —Pregunta Rouge.—

No vine porque quisiera, creo que las Esmeraldas Del Sol me trajeron hasta aquí por algo, aunque, aún no sé el porqué. —Responde Blaze.—

Oh, ya veo. ¿Esa gema que tienes en la frente es una? —Pregunta Rouge con intriga sobre la gema.—

No, esa es otra gema. —Responde Blaze.—

Oh, ya veo. —Responde Rouge.—

¿Qué tanto hacías mirándome? —Pregunta Blaze a Rouge.—

¿Mirarte? No, te miraba a ti, mi mirada estaba en atención completa de tu pequeña amiga. —Responde Rouge.—

¿Amiga? —Pregunta Blaze.—

Tu gema, es muy linda. —Responde Blaze.—

¿No debería desagradarte eso? Digo, eres una murciégalo. —Pregunta Blaze.—

Pues sí, ¿y tú no deberías no tener tu cola doblada? —Responde Rouge en forma de pregunta.—

Jm. Creo que entendí el punto. —Dice Blaze a Rouge.—

En mi defensa puedo decir que me sería un delito no amar las joyas, puede sonar raro viniendo de alguien como yo, pero, ¿qué puedo decir?, así nací. —Responde Rouge a la pregunta de antes de Blaze.— En fin, ¿adónde es que te diriges? —Pregunta Rouge a Blaze.—

A Spagonia. —Responde Blaze.—

Vaya, eso está en otro continente. Supongo que ya conseguiste un pasaporte. —Afirma Rouge.—

¿Pasaporte? —Pregunta Blaze a Rouge sin saber que en primer lugar ocupaba uno.—

¿Qué? No me digas que no tienes uno. —Dice a Blaze Rouge.—

Pues no, apenas llegué ayer. Ni siquiera sé que necesitaba uno. —Responde Blaze.—

Bueno, no sé cómo funcionen las cosas en tu dimensión, pero, aquí si no quieres ser arrestada por entrar a un país ajeno, necesitas un pasaporte. —Responde Rouge.—

¿Y dónde consigo uno? —Pregunta Blaze.—

Tienes que hacer un trámite con un abogado, y esas cosas. No es que puedas comprarlo simplemente. —Responde Rouge.—

Eso suena a mucho tiempo, ¿no hay una forma más fácil? —Pregunta Blaze.—

No, bueno, tal vez. —Responde Rouge.—

¿Qué quieres decir? —Pregunta Blaze.—

Soy agente de la G.U.N., si vienes conmigo, no habrá ni porqué enseñes documentos. —Responde Rouge.—

...Comprendo... —Responde Blaze.—

Bueno, querida, estás de suerte hoy, porque creo que estoy de humor para volar en avión. —Le sonríe Rouge a Blaze.—

Rouge pidió su propio boleto, y espero con Blaze hasta poder abordar el avión. Todo salió en efecto como ella había dicho. El vuelo las dejó aproximadamente hasta las siete de la tarde, a la luz del crepúsculo. Al bajar del avión, Rouge le dijo a Blaze que lo mejor sería que lo buscase mañana, si es que claro, no tenía mucha prisa, lo cual ella aceptó, y dejó que esta la llevase a un hotel para hospedarse hasta mañana. Ambas compartirían la noche ese día, pero, antes, Rouge salió, parece que quería visitar un poco la ciudad de noche; Blaze por otro lado, si bien fue invitada por Rouge, prefirió quedarse en la habitación sola; se veía que ella prefería estar sola.

«Necesito encontrar a Sonic para advertirle de esto, y a Tails para que me ayude a volver. No puedo estar afuera de mi dimensión más de dos meses, ese fue el trato con el rey. Necesito volver, mis padres confían en mi de que cuide del reino, y eso es lo que haré. El deber que se me ha interpuesto, me llama.»; es todo lo que la princesa solar piensa durante la noche hasta caer rendida por el sueño.

Blaze sabía que estaba muy cerca de Emerald Town, pero, sabía que le sería difícil ver a Tails, o Sonic en la noche por las calles, así que decidió dormir hasta el día siguiente, y salir a primera hora; y fue justo así el día siguiente.

Sonaze: Flámiko (Concluida)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora