TODO LO QUE QUERIA (BORUSARA)

Capitulo Único

“El terrible accidente que se cobro la vida de 15 personas hace dos semanas…”

-Boruto- llamo su padre interrumpiendolo, haciendo que él apague el televisor- baja un momento por favor- a diferencia de otras veces estaba serio, no tenia animo de hablar en ese momento, se paró y bajo las escaleras camino a la sala con su padre detrás suyo, paro en seco al ver los padres de ella parados en frente suyo, volteó la vista a su padre al sentir su mano en el hombro-Siéntate-

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"Boruto.

No tengo idea de porque hago esto, pero es bueno desahogarse y supongo que esta es mi manera de hacerlo.

Ayer tuve un sueño, fue extraño, me recordó a los sueños que tenia cuando era una niña, cuando mamá venia a arroparme y papá la esperaba en la puerta. No fue una pesadilla, pero se sentía como una. Tenia todo lo que quería, absolutamente todo.
No como piensas, no era una pesadilla pero, estaba tan aterrada por el final que parecía serlo.

Al despertar como hace ya ocho meses estaba sola, aún vivo en el cuarto que rentamos juntos, me negué a dejarlo siempre recuerdo cuando estabas aquí, cuando al levantarme te veía, ahora… ahora veo la ventana y como el  sol comienza a salir. Siempre repitiendo lo que pasamos juntos.

Quisiera saber si tú también lo recuerdas.

Tú y yo, tú discutiendo con tus padres y yo con los míos, tú pasando por mi a la universidad en tu auto con una maleta con algunas prendas pidiéndome que suba y que salgamos de ahí, yo con la bolsa de la universidad llena de nada mas que apuntes aceptando al saber que tus padres te sacarían del país, ambos en el auto saliendo de la ciudad, quedándonos a dormir unos días en el auto, aún recuerdo eso con gracia, cuando vendimos el auto y conseguimos algo de dinero y subimos a ese tren para alejarnos aún mas de todo y todos, “No dejare que nos separen” eso me dijiste mientras tenias tu cabeza sobre mis piernas, te quedaste dormido, ambos lo hicimos.

La ciudad a la que llegamos era hermosa y estaba a casi un día de Konoha, estaba casi segura de que no nos encontrarían, con el dinero  ambos conseguimos una habitación era pequeña pero acogedora, suficiente para ambos, era perfecta, aunque comenzamos con un colchón viejo y una manta no tenia frio, cuando pasamos la primera noche ahí sentía que juntos podríamos contra lo que sea, “mientras este aquí nadie podrá lastimarte” me dijiste al besarme la cabeza, me sentí a salvo.
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Te mostraste tan feliz cuando conseguimos empleo en el mismo lugar, una cafetería, al salir fuimos a comprar lo necesario para ambientar la habitación, todo parecía ir bien, los días pasaron rápido me alegraba estar contigo, pero sabia que en el fondo ambos pagamos las consecuencias de nuestras acciones.
Aquella noche, cuando cumplimos dos meses de irnos, como ninguna otra extrañe a mi familia, a mi hermano, a mamá , a papá, me abrazaste y me dijiste que todo estaría bien, que ellos estaban bien, que cuando todo se solucionara ambos volveríamos, que los volveríamos a ver, te creí y así me quede dormida, y mas tarde ese mismo día te escuche al igual que yo llorando tratando de controlar el ruido de los sollozos que emitías, era egoísta al pensar que yo era la única que sufría, tú también lo hacías, tú también tenias una familia que dejaste atrás. Te llame y volteaste mientras limpiabas tus mejillas, te abrace, no dijimos palabra alguna ambos solo nos lamentamos juntos, lo siento, lamento haber sido tan egoísta.

A la semana siguiente después del trabajo  dijiste que me tenias una sorpresa y me llevaste al parque de diversiones que encontraste subimos a todos los juegos, mi favorito fue la montaña rusa, al verte gritar supe que descargabas la presión que sentías, hice lo mismo y ambos nos desahogamos en ahí, desde esa vez siempre que podíamos pasábamos por ahí, aunque sin subir a juego alguno. Todo iba bien, o eso creí , hasta que aquella tarde de la nada comenzaste golpear aquel muchacho, te despidieron, al volver a casa no dijiste mucho, solo que ese tipo había dicho algo que tenia que ver conmigo, me sentí culpable de nuevo, tú no solías ser así, regresamos a casa y prometiste que buscarías otro empleo yo solo asentí y me pediste que no me molestara y no pude hacerlo.