021

905 87 8
                                    

Ahora me sentía mal. No podía dar un paso más sin querer romper en llanto. Quería girar y correr hacia mi casa y abrazarlo, simplemente quería sentirlo cerca y contra mi cuerpo, quería sentir su cálido contra mi rostro. No podía retractarme ahora, ya estaba frente a la cafetería, no podía simplemente dar la vuelta e irme. Debería enfrentarme a lo que en estos momentos elegí.

— ¡Alexa! — él levanto su mano, estaba sentado en una de las mesas en el interior de la cafetería.

Me acerque con una sonrisa, hice un mohín con mi mano derecha en forma de saludo. Tomé asiento justo frente a él, rápidamente una mesera se acercó para tomar nuestra orden. Pedí un americano sin mucha azúcar.

— A pasado un tiempo. —fue él quién comenzó una conversación.

— Hyunjin... Ese día, yo...

— Tranquila, no te culpo realmente... Entiendo que estés enferma, pequeña. —apoyo sus codos en la mesa. — Escuché que estás saliendo con Min. Felicidades.

— Gracias... Supongo. — jugué con la servilleta.

— No te veo tan contenta en estos momentos, ¿Discutieron? — asentí un poco triste.— Dime... ¿Es por mí?

— Claro que no... Él se enoja por cualquier cosa, no es mi culpa que sea un bastardo.

— Oye, oye... Esas palabras no te quedan. —reí un poco divertida.— Te ves mejor cuando no hay insultos o malas palabras.

— Vale, pero conste que no siempre las digo... Solo cuando realmente me molestó con algo o alguien. — la mesera regreso con ambas órdenes y pastel de chocolate.— ¿Y esto?

— Es un especial. Invita la casa a todas las parejas... — respondió la mesera con una sonrisa.

— Ella y yo no...

— Muchas gracias, señorita. —sonreí. Ella se retiró. — Oye, casi me quitan mi pastel. —le reproche.

— Eres una boba. — él ríe. — Alexa... Te invite porque quería hablar de algo. No debo decir nada para que comprendas...

— Hyunjin, entiendo... — deje mi café a un lado.— Aparentas ser frío, pero por dentro eres muy apasionado. Eres muy sincero con tus amigos. Cuando me siento frustrada, triste o enojada, siempre apareces para darme valor. Para mí, eres como un bellísimo ángel. —sonreí con suavidad.

— Entonces, ¿Sigues eligiendo a Yoongi? — su sonrisa no se borró.

— Si, lo amo con todas mis fuerzas... —mordí mi inferior.

— Eso es más que suficiente... Es lo que quería escuchar.

— ¿No estás molesto?

— ¿Porque lo estaría? Estoy feliz, mientras tú lo seas. Si él lástima tus sentimientos ven a mí y dímelo, le daré un castigo. — sonríe en grande. Asentí con felicidad. — Ahora come, glotona.

Yoongi

Me estaba comiendo las uñas, mientras caminaba de un lado a otro en la sala de estar. Elías estaba comiendo de una manzana, sentado sobre el sofá estilo indio. Parecía estar recalculando lo que pasó hace más de veinte minutos. Alexa se había ido y me dejó con las palabras en la boca, tenía un coraje que podría romper una pared por la molestía.

— Siento que está resentida. —dijo.

— ¿Qué? ¿Por qué está mediocre estaría resentida? —respondí, completamente desconsertado.

— Oye, esa mediocre es mi melliza. —resprocho, de tal astilla está la astillita dicen. — No lo sé, ella estaba sentada sin hacer nada mientras nosotros estábamos jugando. La sentí algo molesta.

Crush - "Mi Triste Historia de amor" [Min Yoongi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora