UN HALE (STEREK)

OMG

Salgo de casa por fin para ir a la escuela después de dos días de falta, Scott ha estado llamándome para hablar conmigo, Lydia igual me ha llamado para ver como estoy, Malia estuvo observándome desde fuera d mi ventana pro cuando me acerque se marchó rápidamente, Liam, pues Liam es algo diferente apenas y me ha visto pero ha actuado como si nada, bajo del Jeep y me dirijo a el salón de clases, antes de poder llegar soy interceptado por un moreno tatuado quien me arrastra hasta los vestidores mientras se cubre la nariz, frunzo el ceño molesto al ver cómo me observa mientras cubre su nariz con un pañuelo, Scott me observa por uno segundos antes de retirarse el pañuelo de la nariz.

— No sé qué me pasa— dice viéndome— odio no poder estar cerca, odio tener estas reacciones al estar cerca de ti, hermano ¿Qué me está pasando— pregunta viéndome.

— No sé lo que me sucede a mí, Scott no tengo idea de lo que está sucediendo— respondo exasperado.

Después de hablar un rato con Scott y verlo algo incómodo decidí mejor mantener la distancia con la promesa de que los dos averiguaríamos lo que sucede, camino hasta mi asiento sintiéndome algo raro, el día de hoy me sito mucho más extraño que los otros días, mi estómago se revolvió solo al pasar por la cafetería, fue algo tan desagradable el olor que provenía de ese lugar que estuve a punto de vomitar, no sé si esto sea normal pero iré con Melissa, estos días apenas y probado bocado y todo lo que como termino vomitándolo.

— Pero si Stiles— levanto la mirada encontrándome con Jackson quien me sonríe de manera siniestra— es verdad lo de tu olor, será divertido ver como sales de esta— dice antes de ir a su lugar ¿Qué mierda le pasa a ese lagarto?

— Stiles, tu olor otra vez— giro y veo como Scott trata de mantenerse bajo control, paso la mirado por los demás y veo a todos en la misma situación excepción de Lydia quien solo me mira como en trance.

— STILES CORRE— cuando la pelirroja habla tomo mis cosas y salgo lo más rápido que puedo del aula.

Corro por los pasillo tan rápido como mis piernas me lo permiten, salgo de la escuela y corro al estacionamiento, busco mis llaves a medida que avanzó, antes de poder sacarlas de mi bolso, un fuerte sonido me hace levantar la mirada para ver como Isaac esta sobre el capo de mi auto obviamente fuera de control—mierda— maldigo antes de correr en otra dirección ¿Por qué me pasan estas cosa a mí? Miro hacia atrás y veo a la manada caminar en mi dirección, estos malditos perros están tratando de acorralarme como a una presa, me detengo al ver el bosque frente a mi, vamos Stiles es lógica no puedes entrar allí siendo seguido por lobos, cambio de dirección pero cuando intento correr Liam aprese frente a mí.

— Liam— hablo viendo al menor.

— Lo siento Stiles— cierro los ojos cuando se lanza sobre mi, espero el doloroso golpe pero este no llega en su lugar un fuerte golpe se escucha, abro los ojos y veo a Derek frente a mi mirando hacia uno de los autos donde Liam se está levantando.

— ¿Estás bien?— pregunta mirándome sobre su hombro.

— Si— respondo sin aliento.

— Quédate detrás de mí— dice encarando a los siete miembros de la manada, veo a Lydia a lo lejos.

— No podrás con todos— digo viendo sus intenciones.

— Stiles...cállate— ordena, los chicos avanzan al igual que Derek, rebusco en mi bolsa hasta que encuentro lo que busco, corro y empujo a Derek a un lado.

— Aléjate— digo antes de soplar el polvo en mis manos a los chicos quienes retroceden con molestia— ceniza de cerval— digo al moreno quien frunce el ceño— Corre— hablo cuando hago lo propio.

Antes de darme cuenta ya estoy en el auto del lobo quien conduce muy rápido por el pueblo, no pregunto a donde vamos pues veo que el camino es el que se dirige al loft, cierro los ojos por un momento pues como es ya costumbre a esta hora siempre tengo nauseas, por suerte no tengo nada que vomitar en mi estómago, quedo congelado al sentir como Derek toca mi frente y murmura algo sobre no tener fiebre, abro los ojos cuando el auto se detiene, Derek me observa por un rato antes de bajar, esto es raro ¿Qué fue esa mirada de perro apaleado? Salgo del auto sintiéndome mareado, camino siguiendo al moreno quien se detiene y me mira.

— No has comido— dice con seriedad.

— No es que no haya comido, es que ya lo vomite todo— respondo mientras aun camino.

— ¿No crees que deberías ir con Melissa?— pregunta siguiéndome.

— Lo pensé, pero si voy y es algo malo no creo que yo o mi padre podamos soportarlo— apenas y tenemos como vivir después de todo el dinero gastado por lo sucedido con ese zorro maligno.

— Tu padre es un hombre fuerte y tu aun que eres molesto igual lo eres, has superado muchas cosas Stiles— dice abriendo la puesta.

— Pues gra.. AAAAHH— grito al ver a Peter observarme con sus ojos azul eléctrico.

— ¿Qué haces aquí?— pregunta Derek.

— Oh querido sobrino— dice con una sonrisa misteriosa— no tienes idea en lo que te metiste— dice antes de pasar por nuestro lado— oh por cierto Stiles, aliméntate muy bien y come mucha carne, eso servirá — dice antes de salir.

— Eso fue raro— decimos Derek y yo al tiempo.

— Te vez pálido— vuelvo a mis sentidos cuando el moreno habla.

— ¿En serio? Mis amigos intentaron comerme ¿Por qué estaré así?— hablo con sarcasmo.

— ¿Stiles?— giro cuando me llama.

— ¿Qué?— pregunto molesto, frunzo el ceño cuando veo a Derek verme con sus ojos eléctricos— ¿Derek?— retrocedo por instinto.

— Hueles a mi— dice dando un paso hacia mi.

— Venimos en el mismo auto— respondo retrocediendo a medida que avanza.

— No, no de esa manera— dice acorralándome contra uno de los pilares— mi olor emana de ti— cierro los ojos al ver como se inclina sobre mi cuello y aspira— tu.desprendes.olor.a.mi— dice cortando las palabras.

— Derek— trato de alejarme pero el moreno usa una de sus manos para detenerme empujándome hacia el pilar.

— ¿Por qué hueles a mi Stiles?— pregunta viéndome directo a los ojos.

— No lo sé— respondo sin poder despegar mis ojos de los del moreno.

— Stiles— vuelve a llamarme.

— ¿Sí?— pregunto.

— Voy a besarte— dice acercándose.

— Espera Der....— antes de que puedo decir algo sus labios se unen con los míos y mi cuerpo es recorrido por una corriente eléctrica que me impulsa a responder el beso de la misma manera hambrienta que lo recibo del lobo quien me toma por la cintura, mi cuerpo se siente muy bien a comparación de cómo me he sentido estos días.

— ¿Por qué me besas?— pregunto cuando apenas nos separamos.

— Solo sé que quiero hacerlo— responde alejándose como si nada.

— ¿Qué mierda está pasando?— pregunto al ver como el moreno amargado se aleja.