Ojos de Atardecer

Amanecer

Era una mañana del año 2006 cuando un chico se disponía a subir por una calle de la diagonal sur a toda velocidad, el frio de aquella mañana habia creado en las faldas de los cerros de la ciudad de Antofagasta una densa neblina, el muchacho la atravesaba sin temor y a toda velocidad. Entre avenidas y aceras, la tierra de los pasajes se había convertido en barro y hacian lento
Si ascenso hacia su destino.

Debo llegar rapido o no vamos a alcanzar a irnos- se dijo a si mismo mientras subía aun más rápido la cuadra hasta una humilde casa cerca de allí.

En esa casa una chica de unos 13 años de piel morena, estatura media, figura esbelta y pelo corto hasta los hombros  cara delgada y cejas pobladas, ojos felinos pero claros de color miel avellana, dormía en un colchón solo con una polera grande y en calzones en compañía solo de una gata blanquecina y atrigrada que ronroneaba a su lado. Aunque se veia rastros de mas gente en el lugar, vivía sola pues sus hermanos estaban en otra parte y sus padres, perdidos en el vicio, la habían dejado botada, la unica persona que la iba a ver era su hermano de sangre quien había sido adoptado por otra familia y a quien había conocido hace un año atrás.
Aunque al principio la relación no hania sido la mejor poco a poco el muchacho se había ganado el cariño de ella y entonces fue que esa relación y ese cariño entre hermanos se dió.

Fraaan..!! Fraann!!- la llamó el chico a la puerta.

Ohh.. Pipe??.. Mierda!! Me quede dormida dame 3 minutos y me visto lo demás ya esta!!- se oyó la voz de la niña desde adentro.

Esta tu mochila lista?! Lamento el retraso, ya tengo todo listo para irnos- dijo el chico.

Si..si - dijo la chica saliendo de su casa y cerrando la puerta, con un abrigo y una mochila no muy grande.—pero primero vamos por algo de comer, me das 2 minutos y te saco algo. Bajaron entonces a toda velocidad y fueron a in kiosko cercano donde habia de todo. En un parpadeo la chica básicamente robó galletas, dulces, bebidas y cigarros.
Salió triunfante entre los gritos e insultos del dueño del local.

Muy bien- dijo el chico con una sonrisa y besándola en la mejilla- es hora de irnos a nuestra gran aventura. Juntos bajaron hasta la calle principal a abordar un transporte que los llevaría hasta el terminal de buses de la ciudad, en la micro el chico jugaba con sus manos y ella nerviosa miraba el cielo de la ciudad nublado y frio, el chico saco su billetera y vio sus pasajes, que eran de una agencia barata, pues siendo menores de edad debian ir lo mas escondidos posibles asi viendo sus pasajes a la ciudad de Santiago, se bajaron en el centro y  estaban listos.

Bien.. -dijo el chico con voz nerviosa- espero que estes lista, una vez arriba no hay vuelta atrás hermanita.

Estoy lista- dijo la niña- dije que iría contigo y te apañare hasta el final.

El muchacho sonrió, tomo su mano, se subió al bus y se sentó junto a ella.

Es verdad que nos van a recibir con los brazos abiertos?!- pregunto la niña con cierto temor en su voz.

Si- dijo el muchacho- la familia nos recibirá, pero este viaje es para que conozcas a alguien muy especial para mi, que te esta esperando alla en Santiago.

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Fue asi que llegaron la sub agencia y esperaron a que llegara el bis que los llevaría hasta allá. Los asientos que escogieron fueron los últimos pues, querían dormir cómodos y tranquilos.
Una vez arriba buscaron sus asientos y ella pidió el pasillo, el hacia la ventana, sus bolsos a los pies.

Como es ella?! Es verdad que parece una princesa?!- decía la muchacha que al lado de su hermano parecía ahora una pequeña niña con un brillo de ilusión en sus ojos.