¿De dónde nace el mal?

Capitulo I. El Origen

Alguna vez llegue a creer que había nacido para ser un ejemplo, para poder ser aquella persona a la que todos admirarán. Si retrocedo en tiempo mi nacimiento fue una obra de arte con todas las dificultades posibles, en definitiva, mi historia era la típica, digna de una heroína; sin embargo la vida es selectiva y a pesar de cumplir con todos los pasos para tener una vida honorable, me tomo de la espalda y así preparo algo muy diferente a lo que tenía destinado.
Mi infancia fue la de la típica chica excluida y marginada por casi toda la escuela, la niña que parecía adorable esa que irradiaba luz en cualquier habitación, esa a la que envidiaban las demás por tener una cara bonita, con sentimientos incomparables. La vida iba pasando y mis obstáculos siempre fueron más difíciles que los de otras personas. Si lo pusiéramos en un ejemplo sencillo podría ser así: yo era una esponja que cae en el lodo, tenía que convivir con ello, pero nunca absorberlo.
Como si fuera poco eso no sólo era mi decisión, todo esta perfectamente planificado y había algo que siempre te recordaba lo que tenías que hacer, se siente tan mal querer correr y que alguien te tire de la cadena que en este caso eran castigos, comportarse mal era un golpe, hablar mal era  un incremento a los trabajos de casa, perder los modales con las personas eran cinco golpes por la espalda, algo parecido a una tarifa de sufrimiento ¿qué pasaba cuando te portabas bien? Realmente nada porque era tu obligación.
Las personas que venimos ayudar y a ser luz en este mundo tomamos un curso intensivo de cosas realmente difíciles en las que todo es una prueba, no se te permite revelarte, siempre, siempre tienes que ser mejor que en la prueba anterior, ellos le llaman un buen aprendizaje, las personas normales una persona noble, las personas buenas nos dicen virtuosos, los adultos nos dicen maduros, mientras que los desdichados nos dicen prepotentes, verás; sin sonar ofensiva en este mundo hay niveles las personas malas a quienes la vida se les tuerce totalmente, las personas que necesitan aprender y por ende ser guiadas para ellas las vidas es como un videojuego en modo difícil aunque de vez en cuando obtienen una moneda la cual pueden intercambiar por una pista. Eso que te ayuda a ver que pieza debes mover o en donde te has equivocado, en realidad tú tienes el poder de utilizarla para eso o malgastarla, pero no te preocupes que si lo haces es ahí cuando entramos nosotros el típico anuncio de “ve el vídeo para obtener cinco monedas”.
Los años siguen pasando y el nivel de exigencia sube, los golpes paran, ahora siguen los bateos emocionales, las personas en realidad no entienden que sea tu necesidad estar a su lado sino que debes de estarlo, eres ese nosotros contamos con un escudo se rompe y protege sólo cuando no es necesario, tenemos que aguantar que nos rompan por muchas y variadas veces, que nos recuerden, nos odien, nos busquen y nos amen cuando ellos quieran, tu eres alguien que esta abierto las veinticuatro horas .
¿Alguna vez te has sentido agotado?, aquella tarde simplemente salí con el corazón destrozado, sabía que tenía prohibido pedir amor, pero porque precisamente tenía que ser yo quien debiera cargar con esa responsabilidad, sabía que ni siquiera tenía la libertad de molestarme si me hacían a un lado pues tenía que cuidar de ellos, aunque ahora podía sentir el poder que realmente tenía algo está surgiendo de mí, no era bueno pero tampoco se sentía mal, era ese placer culposo que te hacía sonreír, salí ignorando a todos, deje pasar mis responsabilidades, haciendo de lado mis preocupaciones y entonces hice que saliera el sol, los árboles comenzaron a bailar al ritmo que yo les indicaba, camine por varias horas, por varias calles; llegué lo más lejos que mis pies resistieron, había pasado tanto tiempo encerrada que por una vez decidí quebrantar mis propios límites, había tomado un poco pero no estaba tan mareada como para perder la noción de lo que ocurría entonces él se acercó, pude ver que él también era diferente, sus ojos brillaban, su cabello era corto aunque sobresalían algunos risos, usaba lentes redondos, su ropa era bastante relajada con una camisa azul y pantalones de mezclilla, zapatos negros parece que quería lucir un poco imponente, pero por más que se pusiera nada cubriría esa sonrisa grande, esa piel reluciente, no eran las condiciones pero no lo podía evitar, era malo pero quería hacerlo, no podía evitarlo lo vi y pensé que por primera vez que romper las reglas contigo no sería tan malo, incluso si recibía un castigo valía la pena intentarlo.
No pusiste mucha resistencia, aunque nadie se daba cuenta yo pude percibir que también estabas busca de algo que contar o simplemente algo que también rompiera tus barreras, no puedo dar más explicaciones de lo que paso cuando tomaste confianza, no sé cuántas personas se podrían alarmar, aunque creo que unos cuantos se lo han de imaginar, todo tu ser era lo que necesitaba esa noche para calmarme
Me fui y no te deje ni rastro de que estuviste conmigo, al siguiente día yo ya estaba bien, tomé de nuevo mi cargo, en la orilla del mundo esperando quien se acercaba, quien seria esa persona con la vida hecha un desastre a quien le daría mi corazón para que así curase el suyo, sé que por días preguntaste por mí, sentí tristeza pero no podía repetirlo, al menos no ahora, pasaron más días todo marchaba bien iba de camino por el parque distraída como la mayor parte de las ocasiones no lo había pedido, sé que tú tampoco puedo entonces decir que fue genuino, lo sé y por eso siempre te lo digo aunque no lo creas, la primera vez que te encontré fue coincidencia, la segunda fue capricho por su puesto no mío, fue suerte, fue recompensa, destinó; pudo ser todo eso y más, cariño no me molesta dar todo el corazón por ti, no me molesta ayudarte porque estaría eternamente ligada a tu mano hasta que estés bien, sé que no puede ser completamente bueno; tengo miedo de que algún día puedas darte cuenta de lo que realmente poseo, pues sé que para ti ha sido cuestión de vida, para mi es aquello por lo que había llorado y fue mi alivio.
La primera vez fue para despistar, era más una diversión, la segunda vez fue para quedarme, las siguientes noches fueron para entregarte todo de mí, te veo y portarme mal contigo me hace muy bien.

// He de aclarar que está Historia no es de mi autoría, es de una persona a la cual tengo mucho afecto, el pseudónimo con el que me pidió subiera este texto es  <<Melie, S. 🍃>>

Si tienen algún comentario sobre el texto, háganmelo saber y se lo haré llegar con gustó; con cariño

- Leamsi ❄️ //