Polos Iguales

Lo prometo

Me levanto de la cama con una resaca del diablo, no recuerdo ni como llegue, todavía traigo puesto el vestido rojo vino de anoche, todos me da vuelta, necesito café; apenas pongo un pie en el suelo empiezo a tambalear y lo último que alcanzo a ver es a Thiago acostado en el piso, inevitable el suelo me pide un abrazo, y como soy tan buena se los doy, en otras palabras me caí de cara, Thiago se levanta por el estruendo.

-Pero que mier –no termina de decir nada, cuando me ve tirada en el piso- despertaste borracha durmiente.

-¿Cómo llegue aquí? –pregunto mientras me levanto y tambaleando llego al espejo del baño- me veo del espanto, recuérdame no hacerle caso a Sasha con lo de salir a beber un domingo en la noche, apesto a alcohol.

-Por cierto –me vuelve hablar Thiago- son las 6:30.

Me dice y corro a la ducha, me doy la ducha más rápida posible, y que me asegure no oler a alcohol; cuando salgo, Thiago ya me tiene el uniforme listo con la ropa interior y todo, le doy un beso en el cachete y me empiezo a vestir, y él se empieza a bañar; cuando me alisto bajo y caliento café con tostadas para Thiago y para mí. Cuando sirvo todo en tazas y platos, mi papá baja.

-Buenos días Julieth –dice mi papá se toma mi taza de café- gracias –dice y se va al trabajo.

-Genial, no pregunto ¿a qué hora llegue? ¿Por qué Thiago está en mi habitación? No, nada, solo se toma mi café y se va –Thiago baja y toma una tostada.

-Tomate el mío, o podemos compartirlo, no importa, vamos o llegaremos tarde -me dice Thiago.

Empezamos a tomarnos el café y las tostadas, y corremos hasta que llegamos a la escuela, la próxima vez nos vamos en taxi o que Thiago traiga su auto; antes de entrar me chocó con unas de las personas menos agradables.

-Miller, más cuidado la próxima –me dice con altanería.

-Disculpa Gill –le contesto en su mismo tono, con una sonrisa hipócrita, la cual el devuelve.

Entramos a la escuela y vamos directamente a los salones, Gil no me cae mal, pero si él se estuviera incendiando, y yo tuviera agua, me la tomo, y para colmo está en el mismo salón que yo, junto a Thiago mi mejor amigo casi hermano ya antes mencionado y Taylor mi amigo, la otra parte de la banda quedo en otro salón, Sasha, la culpable de mi resaca y Lucas un gran amigo, claro en ese salón esta parte de la banda de Matteo Gill, Daniela y Hugo, caen mejor que Gill, en el salón que estoy yo esta Thomas y Gael, tengo entendido que Thomas es su mano derecha. Después de tortuosas horas dando clases, más mi resaca que no ayuda, por fin, llega el tan esperado y hermoso receso, enseguida Thiago, Taylor y yo vamos en busca de Sasha y Lucas.

-Te ves fantástica, Sasha cariño –dice Taylor-

-Cállate muerde almohadas –le responde Sasha sacándole el dedo del medio.

-Yo también te amo –le responde Taylor, pues él es bisexual, por eso Sasha lo llamo así.

-Anda de un humor de perros –dice Lucas.

-Y tú andas como princesa risueña –cabe destacar que Sasha se pone así en cada resaca, después o antes de eso, ella es un amor.

-Te pones de un humor del carajo cada vez que tienes resaca, pero te quieres casa con una botella de tequila –le dice Thiago tendiéndole una pastilla y una botella de agua.

-¿Por qué tú te ves listo para una sesión de fotos y yo como si fuera la loca de los gatos de los Simpson? –pregunta Sasha tomándose lo que Thiago le dio.

-Porque tú siempre te ves así, preciosa –le contesta Taylor, es su forma de decir te amo.

-Podrían dejar de demostrarse tanto amor –dice Lucas- quiero contarles algo.

-Cuenta el chisme –dicen Taylor y Sasha a la vez.

-Creo que tendré que regalarle rosas y chocolates este 14 de febrero .dice Lucas con una sonrisa de idiota enamorado.

-¡¿Qué mierda?! –Pregunto toda alterada, me miran extraño- lo lamento, mi filofóbia ataco.

-Pero tú no eres la de la relación –dice Taylor.

-Pero la sentí como mía .le respondo.

-No le hagas caso Lucas –le dice Thiago- ¿Quién es la desdichada? Digo, la afortunada.

-Muy gracioso –contesta Lucas- la conocen, pero no mucho, nos encontramos una noche en un club, y terminamos saliendo a comer, al cine, y a caminar.

-Entonces eran de ella los mensajes que hacían sonreír –digo- ¿Cuándo la vamos a conocer?

-Hoy en la salida, ahora mismo debe estar contándole a sus amigos, acordamos formalizarlo en la salida, con ustedes como testigos, en los estacionamientos –Lucas dice todo esto con una sonrisa en su rostro.

-Emergencia, estamos en un estado crítico, lo estamos perdiendo, se nos va –digo yo dramáticamente tocando su frente- lo perdimos.

Julieth, no es gracioso, quiero algo serio y real con ella –dice Lucas con una expresión seria.

-¿Qué tan real? –pregunta Thiago.

-Como el de Severus por Lily, como el de Tonks por Lupin, como el de Hermione por Ron, como el de Ginny por Harry.

-Mierda ¿sabes en que te estas metiendo?, eso es demasiado en idioma potterico, no te pases –dice Thiago, es un potterhead.

-Por eso mismo lo digo –dice Lucas.

-Está bien, te apoyamos ¿ciertos chicos? –pregunto yo.

-Por supuesto, hasta en lo último –dice Taylor.

-En las buenas y en las malas pandita –le dice Sasha despeinándolo.

-Espero y se lleven bien con sus amigos, es lo único que pido por el momento –dice Lucas.

-Lo prometo –dice Thiago poniendo su meñique.

-Lo prometo –dice Sasha imitándolo.

-Lo prometo –Taylor hace lo mismo y los cuatro me miran.

-Haría cualquier cosa por ustedes, lo prometo –también alzo mi meñique.

-Que sea una promesa –Lucas pone su meñique, tocamos nuestras puntas del meñique y nos besamos la mano.

Hola, no creo que publiquemos algo en un periodo de tiempo bastante largo, el motivo, la cuarentena, gracias a ello, no podemos salir, ni reunirnos, para poder escribir los otros capítulos, entonces, cuando acabe la cuarentena, trataremos de subir todos los capítulos posibles, besos (psicológicos) y pásenla  a salvo en esta cuarentena, atentamente, Bom bom, Burbuja y Bellota