La gran mentira ✔️

#6 -Soy Azul-

Capítulo #6 ••Soy Azul••

La noche de ayer había sido mágica, Alex y yo nos habíamos reconciliado y ahora estábamos mejor que nunca. Anoche nos la pasamos platicando, Alex me contó que los meses en la cárcel la paso muy mal y que el único que se había salvado esa noche había sido Cristiano.

También que ellos jamás supieron que fui yo a excepción de André que él había visto todo; Sama renunció a la universidad y se fue a México con su familia, me sentí tan culpable por el pero Alex me dijo que su decisión no había tenido que ver con lo de la cárcel. Pero eso no quitaba que yo era la responsable de todo.

Despertamos abrazos por el frío que hacía en la azotea, Alex no me quería soltar y ni yo a él.

—Alex suéltame, tengo que ir al baño. —Trate de escabullirme pero él me apretó más en sus brazos.

—Mmm, no me despiertes.

—Mi risitos de oro suéltame, que me haré pis aquí.

Alex hizo un sonido y termino soltandome, corrí y baje al apartamento, al entrar fui al mismo baño de la noche anterior.

No tarde mucho en el baño y al salir me encontré a André totalmente desnudo a un lado de la cama, rápidamente me di la vuelta para darle la espalda. ¡Dios que había hecho!.

—Discúlpame Azul, no sabía que estabas en el apartamento y mucho menos en mi habitación.

—No te preocupes, la culpa es mía, jamás debí de entrar a tu habitación sin permiso.

Espere a que se cambiara para darme la vuelta.

—Ya puedes salir y nuevamente disculpame.

—No hay problema.

Me di la vuelta y al verlo, André solo llevaba puesta una toalla, me apresuré a la puerta y salí.

—¡Azul!.

—¡Ahhh!. —Grite desesperada, casi me daba un infarto al verlo.

—¿Que te pasa cariño?.

—No pasó nada, es solo que tengo que ir a casa.

—Porqué no desayunamos antes de llevarte a casa.

—Okay.

—Vamos a la cocina entonces, y como te había dicho el único que cocina en esta casa es Sama pero él ya se fue así que te tendrás que confirmar conmigo.

—Tendré que hacerlo, ni modos.

Nos pusimos a cocinar y minutos después apareció André, la presencia de André por primera vez me hizo sentir muy incómodo, supongo que era por lo que había pasado en su habitación.

Desayuné en tiempo récord y Alex quedo a medias ya que lo obligué a irnos. En el camino la pasamos en silencio hasta que Alex decidió romper el hielo.

—Hoy hablaras con él y le dirás qué regresamos, ¿cierto?.

—¿Qué? —no entendía a lo que se refería.