~Two~

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Habia continuado llorando por mucho rato mas, Hasta que recobro la compostura, Limpando sus lagrimas con aquel pañuelo que siempre traia en el bolsillo.

El, Hacia un par de años habia mandado a construir aquel pequeño santuario torno a la tumba de su marido... Que ese momento, Sus paredes estaban forradas de florecitas silvestres y enredaderas, Por pedido de el ruso... Todo tenia un toque tan intimo y personal,Que estaba bastante seguro, que a su pequeño latino le hubiese gustado. Habian muchos tipos de flores, Todas blancas.

El ruso mantenia los ojos cerrados por completo, Apoyando su hombro en la lapida de el latino, tarareando suavemente por lo bajito, Tratando de ahogar sus sollozos, Dejar de llorar.

Las horas pasaron y el ruso se quedo dormido, Acurrucado en aquella incomoda poscision, Hasta que, El sol asomo en el horizonte y se empezo a escuchar el ajetreo tipico de aquel lugar... Las personas circulando, Atendiendo las diferentes plantas de el lugar.

Se sento en el suelo y se estiro con levedad, Haciendo sonar su espalda... Estaba adolorido de los pies a la cabeza.Se puso de pie, Tomando su guitarra y su ushanka de el suelo, Saliendo asi se aquella capilla, Caminando encorvado en direccion hacia la casa.

Aunque, No se espero que su pequeña niña, Viniese corriendo hacia el en cuanto tuvo a la vista la casa, La alzo en brazos con cariño, Viendola con confusion.. Era extraño el verla sola, Sin su nana, O en su defecto, su hermana mayor.

-Renz, Hija mia ¿Que haces aqui? ¿Donde esta Esequibo?

Pregunto el ruso,mientras que le apartaba un mechon de cabello de el rostro con suavidad, Limpiandole igualmente la naricita, Mientras que continaba su camino, Hacia el interior de la casa.

-¡Manita no me peta atenchion! Dede que me depete eta con un teñor que yo no conoco.

Exclamo la niña, cruzandose de brazos en un berrinche de lo mas adorable, Viendo a su padre con un pequeño puchero.

¿Un señor?

-Seguro es uno de los jardineros mi niña...

-¡Do! ¡Es como tu! ¡Y como yo!¡Y como manita! Tiene colodes.

La menor llevo sus manos hasta las mejillas de su padre, apretandolas suavemente, para asi hacer lo mismo sobre las suyas, fijando sus grandes orbes color miel en el rostro de el ruso, parpadeando suavemente.

Eso.. Si desconcerto a el ruso un tanto,Despues de todo, No recordaba haber invitado a ningun conutry a que fuese, Ni mucho menos que le avisaran que fuese.

-¿Estas segura que no es ninguno de tus hermanos?

Cuando la pequeña ascintio de forma tan efusiva, el ruso dio un pequeño suspiro seguido de una risita, mientras que abria la puerta trasera de la cocina, Manteniendo a su pequeña entre brazos.

El lugar estaba vacio, Aunque la voz de Esequibo en la sala se escucho por todo el lugar, A lo que el ruso, Fue a dicho sitio, Manteniendo a la pequeña bien sujeta contra su pecho.

-¿Ecuador?

Llamo con suavidad, A lo que la femina dejo de hablar, Permaneciendo el lugar en total silencio.

Ambos se pusieron de pie, extrañando en su totalidad a el ruso, que en ese momento, bajo a la pequeña, Tomando unicamente su manito.

-¿Que esta pasando aqui?

Pregunto en su idioma natal.. Aunque, segundos despues esa duda fue aclarada,pero miles mas surgieron, Frente a el, Un tricolor de siete estrellas, Le sonreia grandemente, Mientras que la chica permanecia a su lado.

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⏰ Última actualización: May 23, 2020 ⏰

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