ᴜɴᴀ sᴇᴍᴀɴᴀ (ʙɪʟʟᴅɪᴘ) (ᴍᴘʀᴇɢ)

[3]

— Cariño, ¿Estás bien?. — pregunto Dipper entrando a la oficina de su esposo que estaba de espaldas con un traje negro con corbata amarilla resaltando su cabello rubio mirando el atardecer por la gran ventana, que al escuchar un agotado suspiro del Alfa el castaño se acercó a el dando un cálido abrazo por detrás

— ¿Los niños estarán bien?. — pregunto el rubio mirando de reojo a su pareja que solo sonrió cálidamente

— no te preocupes están en buenas manos, Mabel esta con ellos no les faltará consejos y menos protección de ella y de mis tíos. — dijo recargando su rostro en el hombro del mayor

— son mis cachorros, me preocupa que les pueda pasar algo tan solo son unos niños y no creo que tus tíos tengan todavía condición física para cuidar a nuestras crías. — habló inseguro era el más protector ya que hace siglos tuvo una familia con una bella mujer igual a Dipper que le concedió dos hermosos cachorros era el hombre más feliz pero un día al regresar de su dimensión fue donde los humanos habitaban pero unas llamas le llamo la atención la pequeña casa de madera estaba en llamas y estaba su preciada familia ahí desde ese día descubrió que no tendría oportunidad de tener una familia pero esos pensamientos se alejaron al volver amar ahora tenía a Dipper su gran amor pero tal obsesión y inseguridad lo convirtió inmortal a su esposo, pero al no ver sus hijos morir a una edad los convertirá también inmortales eran sus cachorros su luz oscura

— Ellos están bien Bill, confía en mí. — su Omega soltó feromonas tranquilizando al Alfa que solo soltó un gruñido de satisfacción volteando para encarar a su esposo que poso sus gruesas manos en la fina cintura del castaño que diferencia de él siempre trae su típica camisa de cuadros manga larga, por debajo una blusa roja, sus jeans azules y sus converse pero no puede faltar su vieja gorra de pino ya que la segunda vez que fue a Gravity Falls, Wendy le devolvió su gorra y se reencontró a su ahora esposo

— ya te dije que me encantas. — susurró Bill besando la marca de apareamiento que solo el de ojos chocolates suspiro respondiendo, "hmm", que solo el rubio soltó una sonrisa burlesca. — te amo mi Pinetree. — apretó el agarre del menor que solo soltó un pequeño gemido dulce

— Yo también te amo. — sonrió Dipper cerrando su pequeña distancia con un fugaz beso.

— ¡Makona apaga esa luz!. — gritó Hazel irritada mirando como su hermano volteaba la hoja del grueso libro ya que no tenía las más mínimas intensiones de obedecer a su hermana mayor. — Makona... . — mencionó su nombre con advertencia incluída

— Silencio que no me dejas concentrar. — dijo el rubio mirando el  libro

— Dije que... . — se callo de inmediato al ver la sombría mirada que le daba su hermano. — te odio. — murmuró saliendo de su cama agarrando su almohada junto con su cobertor para salir de la recámara bajo las escaleras para ir al sillón pero se encontró a Soos que solo le dedico una sonrisa

— Hola pequeña, ¿A dónde vas?. — pregunto agachándose a la estatura de la niña

— Mi hermano no me deja dormir. — dijo la pequeña Omega dando un estornudo el más tierno que ah oído el hombre

— oh pequeña si quieres puedes dormir conmigo y con mi esposa. — sugirió el beta que solo la castaña negó de inmediato ella nunca le ah gustado dormir con otras personas que no sean sus padres cuando dormía con ellos su papá lo ponía en medio de ellos para luego darle un casto beso en la marca de nacimiento de su frente que era un triángulo para luego ponerla en su pecho tranquilizandola y su padre se encarga todavía de que no tenga pesadillas

— No gracias Soos iré a dormir al sofa no te preocupes. — soltó una sonrisa despidiéndose del hombre que enseguida el beta le devolvió el saludo, al llegar su destino se acostó en el sofá prendiendo la televisión, pero al sentir alguien en su mente se puso alerta

¿Que tan tu primer día mi pequeña?

Al reconocer la voz de su padre se tranquilizó, ella y su hermano tenían un lazo muy fuerte con su padre que no importa la distancia podía comunicarse oh su padre podría aparecer en los sueños de sus hijos

Bien, bueno tuve un pequeño accidente en mi pierna...pero estoy bien no te preocupes padre

Al sentir la preocupación del rubio habló de inmediato que solo escucho un suspiro del contrario.

Espero que te diviertas mi pequeña princesa, cualquier cosa me avisas ¿Entendido?

Si padre, te amo

Yo más mi princesa, dulces sueños

Antes de dormir sonrió al escuchar la última palabra de su padre quedándose dormida.

♥ Continuará ♥