Locked up

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Maia y Baekhyun habían sido amigos desde prácticamente toda su vida ya que los padres de Maia se mudaron al edificio de Baekhyun cuando ambos tenían 3 años. Como los dos tenían la misma edad siempre jugaban juntos en el parque que había justo al lado de su edificio y acabaron haciéndose inseparables.

Habían ido al mismo colegio y al mismo instituto, siempre en la misma clase, pero ahora que están en la universidad y que cada uno estudia una carrera distinta, ya no se ven tanto.

Al principio todo seguía como siempre, los dos quedaban en el mismo parque para ir juntos a clase, ya que sus campus se encontraban cerca, y a la salida volvían juntos a casa. Pero debido a sus nuevos amigos y sus nuevos horarios, ambos se fueron distanciando hasta casi no verse nunca.

Poco a poco fueron pasando los meses hasta llegar a pasar un largo año en el que ninguno de los dos tuvo la ocasión de ver al otro, aunque ni siquiera se esforzaron por ello. Se saludaban si se veían en el edificio o los alrededores, pero nada más. Ya no quedaba rastro de aquellos chicos inseparables de hacía unos años.

- Maia, ¿podrías quedarte un momento? Necesito hablar contigo -le informó su profesor.

Tras acabar la clase ambos estuvieron charlando un largo rato sobre la asignatura y sobre un trabajo que ella quería hacer. El profesor la había llamado para concretar los detalles y terminar de realizar todo lo necesario antes de comenzar con él.

Al acabar de hablar con su profesor, Maia se dirigió a la salida para volver sola a casa, ya que se le había hecho un poco tarde y sus amigos ya se habían marchado. Por suerte se había llevado los cascos y podía ir escuchando música durante el camino de vuelta a su casa.

Poco tiempo después, se encontraba ya entrando por el portal de su edificio, ajena a lo que dentro de unos segundo iba a ocurrir. Una vez dentro se dispuso a picar el ascensor y, cuando este abrió sus puertas, ella se metió y picó el número de su piso.

Las puertas se encontraban cerrándose cuando, de repente, vió como una mano aparecía entre las puertas para que no se cerraran y así poder pasar. Para su sorpresa, la persona que acababa de aparecer ante ella era nada más y nada menos que Baekhyun. Ambos se quedaron mirándose el uno al otro sin saber muy bien qué decir.

- Hola -dijo Maia.

- Hola -respondió Baekhyun.

Una vez dicho esto, no salió una palabra de la boca de ninguno de los dos y ambos apartaron la mirada del otro.

El ascensor comenzó su trayecto hasta el piso en que ambos vivían, aunque esta vez les pareció que estaba tardando más de lo normal. A mitad de trayecto notaron como el ascensor empezaba a tambalearse un poco y, sin previo aviso, dejó de funcionar. Ambos se miraron el uno al otro con cara de pánico, no podían creerse lo que acababa de pasar.

- ¿Hola? -comenzó a gritar Baekhyun para que alguien le escuchase- ¿Hay alguien ahí?

Ambos siguieron intentando hacer ruido durante unos minutos, pero nadie les contestó. Parecía que iban a quedarse un buen rato esperando a que alguien se diese cuenta de que se habían quedado encerrados.

- Nada, es inútil, no hay nadie cerca que nos pueda escuchar- dijo Maia.

- ¿Y ahora qué hacemos?- preguntó él suspirando.

- A mí no me mires, sé lo mismo que tú- respondió, indicando con un gesto de sus manos que no sabía nada.

Intentaron pulsar el botón emergencia del ascensor para intentar que laguien les escuchara, pero fue en vano. Su última opción era pulsar el botón de la llamada de emergencia, así que lo hicieron y esperaron a ver si alguien contestaba en el otro lado de la línea.

Locked up [One Shot Baekhyun]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora