the end

486 78 24
                                    

Allí se encontraba Chan, durmiendo en el sofá.

Acababa de llegar, y al verlo sonrió levemente.

Se acercó a él, y vio como entre sus manos había una foto de los nueve juntos.

Sonrió más, señalando a cada uno de ellos, diciendo sus nombres en voz alta.

- Minho, Jisung, Changbin, Félix, Jeongin, Hyunjin, Seungmin, Chan y... yo. -

Se fijó mejor en la foto. Aquel lugar le sonaba de algo.

Su cabeza comenzó a doler, y soltó la foto, provocando que el cristal del marco se rompiera.

Chan se despertó, y Woojin se apartó del sofá, observando como el australiano tomaba la foto de entre los cristales rotos.

- Lo he destrozado... la única manera de volver a vernos todos juntos. -

Y el coreano sintió un escalofrío.

¿Todos juntos? No entendía, siempre habían estado todos juntos.

¿O no?

Al darse cuenta de que Chan estaba cerca de los cristales, corrió hacia él.

- ¡Chris, vas a cortar-! -

Intentó apartarlo, pero no podía. No podía tocarlo.

Acababa de atravesarlo.

Y en ese preciso momento, comenzó a juntar piezas, dándose cuenta de algo horrible.

...

- ¡Vamos a divertirnos, Woojin! -

- Chicos... puede ser peligroso... - Les reprochó el mayor a aquellos tres.

Minho, Changbin y Hyunjin tiraban de su brazo, intentándolo llevar a una tienda 24 horas.

- Vámonos a casa, son las tres de la mañana. -

- ¡Vamos, Woojin! ¿O eres un aburrido~? - Le dijo Chris.

Entonces Kim recordó algo, y se acercó a Hyunjin para decírselo.

- ¡Ah, cierto! ¡Debemos irnos! -

Los demás pararon de reír y le preguntaron a Hwang que pasaba, el cual les contó a los demás el plan de Woojin.

- ¡Adiós, chicos! - Gritó Christopher, despidiéndose de sus amigos.

Entraron a la tienda, y se escondieron detrás de unos estantes para que el dependiente no los viese, para comenzar a robar chuches y comerlas allí mismo.

- Oye, Chris. Quise que nos quedaramos solos para decirte algo. -

- Yo también debo decirte algo importante, Woojin. -

En ese momento, alguien entró a la tienda, y lo único que se escuchó fue un disparo.

Bang cerró sus ojos asustado, y Kim suspiró.

- Quédate aquí y llama a la policía, Chan. - Susurró.

- Woojin, no... -

El australiano tiró de su manga, y él le sonrió.

- Cálmate, Chris. Haz lo que te dije. -

El rizado asintió, y marcó el número de emergencias, mientras Woojin se levantaba lentamente.

Se quedó detrás del hombre, para luego intentar inmovilizarlo.

Estuvieron peleando un buen rato, hasta que el desconocido se soltó del agarre de Woojin, y disparó justamente 3 veces en el pecho, dando en el corazón del chico.

- ¡Woojin! - Gritó Chan.

Se escucharon sirenas a lo lejos, y el hombre salió corriendo.

Chris se acercó rápidamente a Woojin, quien tenía la mano en su pecho.

- Chan... - Susurró.

- N-no hables... Déjame-. -

Intentó tapar la herida presionándola un poco, pero al notar como Kim iba respirando cada vez más lento, apoyó su cabeza en el estómago del contrario.

- Woojin, no me dejes... yo te amo... -

El coreano sonrió, y miró al rubio.

- Chris, yo también te... - Y se quedó callado.

Aquellas habían sido sus últimas palabras.

...

Woojin comenzó a llorar de desesperación, mirando cada acción que hacía Chan.

- ¡Chan! - Gritó. - ¡CHAN! - Gritó más fuerte.

Chris volteó, pero al no ver nada, fue hasta su habitación para ir a su cama y dormir.

Woojin lo siguió y le miró. Nunca había dejado amarlo, en ningún sólo momento.

Pero debía dejarlo ir. Debía dejarlo ser feliz, aunque eso significara no volver a verlo nunca.

Se acercó, y dejó un leve beso en sus labios.

- Chris... yo también te amo. -

Y se fue de la casa, sabiendo que nunca más volvería.

.
.
.

Estoy literalmente llorando.

Espero les haya gustado esta historia, un poquito basada en algunas partes de la película "El Sexto Sentido" ❤

Invisible💙WoochanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora