Tenía una nueva misión, fácil, verdaderamente fácil.
Sacar a Iron Man de los Vengadores, me dijeron que lo matara, que le hiciera una oferta para unirse a HYDRA, lo que fuera para que no se interpusiera en los planes que tenemos para la aniquilación total del enemigo.
He estado siguiendo a Anthony Stark por un mes y creo que ya se dio cuenta de que alguien lo está siguiendo por lo que ya es momento de actuar.
Me encontraba afuera del club nocturno donde hace dos horas entró Stark, el plan era sencillo. Secuestro. Actuaría rápido y trataré de no lastimarlo mucho, no puedes maltratar mucho a tu futuro juguete. Menos aún cuando es muy exótico y erótico, no, eso podría dañarlo y lo quiero en perfectas condiciones.
Stark salió con Thor y mis agentes se encargaron de la primera fase, separarlos, ellos entretendrán al grandote mientras yo me pongo a jugar con Tony.
Una vez que estaban separados mis agentes se fueron y yo hice aparición.
"Linda noche para verte de nuevo, Tony" lo saludé amablemente como siempre lo hago, tengo una pequeña obsesión con este hombre, tiene todo lo que me gusta, ojos grandes, piel suave, la estatura ideal, es un genio, es coqueto, labios tentadores, cabello liso y castaño, simplemente hermoso y sería todo mío.
"Capitán" ah cierto, su voz, su hermosa y sensual voz.
Tony activó su armadura y comenzó a lanzarme ataques que, con algo de dificultad, evadí. Comencé una pelea cuerpo a cuerpo de la cual no salí ileso pero tampoco era un problema, bueno en mis guantes puse cloroformo para evitar mucho el combate, ya lo tenía planeado, Tony se tambaleó y le extendí mis brazos, como en oferta a que deseaba que cayera sobre mí pero no lo hizo y sólo retrocedió.
"¿Qué...?" Cuando vi que ya su conciencia se estaba yendo, me acerqué a él y antes de que cayera al piso lo agarré firmemente.
Lo llevé a una de mis muchas habitaciones que tengo en la base principal de HYDRA, por supuesto primero lo esposé a la cama, de ahí fui por un líquido, no lo va a matar, pero tampoco no le va a doler, ese líquido se encargaría de deshacer su armadura.
A los segundos Tony despertó por el ácido y se removía violentamente en la cama, le dije que no lo hiciera porque se haría daño pero me mando a la mierda.
Cuando todo pasó me coloqué encima de él y besé su pecho un par de veces, Tony no dejaba de moverse así que le apreté una de sus heridas, cuando exclamó de dolor me pareció una buena oportunidad y me deleité con sus labios en un beso profundo, tenía mucho tiempo queriendo besarlo.
"Tony cariño, tienes tres opciones" le dije cuando terminé de besarlo. "Te unes a HYDRA" me interrumpió con un 'primero muerto' eso hizo que lo mirara con cierto grado de enojo, pero seguí hablando "te mato" cuando iba a seguir hablando vi que Tony tenía una marca roja en el cuello, lo que me enfureció porque todo él me pertenece, por lo que bajé a su cuello y lo mordí en el mismo lugar sobreponiendo mi marca, también repartía besos para demostrarle que soy lo mejor que le haya podido pasar. "O te vuelves mío" terminé de decirle.
"Mátame, primero muerto a tener que verte la cara todos los días"
Eso me hizo enojar, así que lo castigaría, él debe saber comportarse como un buen juguete, le enseñaré a querer cumplir mis deseos y disfrutar complacerme así como yo disfrutaré hacerlo mío.
Me levanté y fui por un cuchillo, le dije que no moviera su brazo o le iría mal, cuando sostuve su brazo tomé bien el cuchillo y escribí 'Propiedad del Capitán Steve Rogers' cuando terminé besé la mano de Tony y admiré lo bello que se veía mi nombre sobre Tony.
"Quería darte a escoger pero ya no, eres mío y siempre lo has sabido"
"Eres un traidor, eso es lo único que sé" me dijo, pero Tony estaba cerrando fuertemente los ojos así me di cuenta que estaba reviviendo su trauma de su primer secuestro.
"Vamos Tony, yo sé que me sigues amando, y ahora podemos estar juntos, no consideres esto un secuestro, más bien una mudanza. Ahora vivirás conmigo"
"Púdrete" Tony volvió a removerse queriendo quitarme de su cuerpo.
"Te voy a disciplinar" dije y le quité lo que sobraba de su armadura de la parte baja, dejándolo así desnudo y listo para mí.
Tony en su afán de quitarme me golpeó con su rodilla en el estómago, tomé el cuchillo y se lo enterré en la pierna, él gritó, pero no me importó, saqué el cuchillo con violencia y lo amenazé con hacerle algo peor si no se comportaba, se puso tenso, pero yo me encargaría de eso.
De su pierna salía sangre y le dije que todo estaría bien, lamí su pierna y dejé un beso sobre la herida que obviamente seguía sangrando, pero de momento es lo de menos.
Volví a ponerme a la altura de los labios de mi Tony y volví a besarlo, esta vez él me correspondió, nuestras lenguas se acariciaban, nuestros labios chocaban y el sabor de Tony me dejó extasiado.
Luego de besarnos fui besándolo en el cuello, pecho, estómago, hasta llegar a su miembro, estaba semi erecto y mi boca pasó por su longitud, mi lengua saboreó la punta, mis dedos jugaban con sus testículos. Lo estaba disfrutando.
Me metí el pene de Tony a la boca y escuché jadeos y gemidos salir de la boca de mi juguete. Seguí lamiéndolo hasta que por fin lo metí completamente a mi boca, fui lento al inicio hasta que aumenté la velocidad del vaivén, Tony me llenó la boca con su esperma, mismo que usé para seguidamente lubricarlo un poco.
En alguna otra ocasión me hubiera esperado un poco, pero hoy no, Tony se ha portado mal y mi deber es castigarle.
Lo penetré sin prepararlo adecuadamente y la fuerza con la que me recibía fue asombrosa. Sentía las paredes de Tony apretarme deliciosamente por lo que comencé a moverme rápido, sin control.
Tomé el miembro de Tony con mi mano y lo masturbaba al ritmo de mis estocadas, al inicio escuché gritos, gritos que poco a poco se convirtieron en gemidos, gemidos que me animaban a partirlo.
"Abre más las piernas" le ordené y él cumplió abriéndose lo más que podía para mí a pesar de las cadenas. "Buen chico" lo premié dándole un beso que terminó por falta de aire, mordí su labio inferior con fuerza.
Estaba a punto de terminar cuando se me ocurrió una idea por lo que paré toda acción.
"Tony, dime dónde quieres que me venga" le dije y él se mordió su labio hasta que sangró, su rostro sonrojado era precioso, el sudor adornando su frente y sus jadeos eran excitantes. "No tenemos todo el día, decide"
"En mi boca" susurró y le dije que no lo había escuchado por lo que volvió a decir "quiero... Que termines en mi boca" le quité las cadenas de las manos y se acomodó entre mis piernas.
"Es todo tuyo, Tony" él se metió mi pene a su boca y me chapada con desesperación, me lamía alrededor y me tomaba lo más que podía.
Sus expresiones eran tan eróticas que cuando me miró a los ojos no pude más y terminé en su boca, él tragó y me lamió hasta quedar limpio.
Pocos segundos después Tony se desmayó, lo cual es normal luego de haber bañado el cuchillo con un afrodisíaco.
