En Grace Field House, la vida no podría ser mejor para los huérfanos. Aunque no tienen padres, junto con los otros niños y una "Mama" amable que los cuida, forman una gran familia feliz. Nunca se pasa por alto a ningún niño, especialmente porque todos son adoptados a la edad de 12 años. Sus vidas diarias incluyen pruebas rigurosas, pero luego se les permite jugar afuera.