Capitulo 22

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Me vestí con unos pantalones negros bien ajustados, unos tacones y un chaleco cortito.
Mi peinado de siempre, al cual amo. y lista, con un poco de maquillaje.
Bajé y me encontré con Justin vestido con; unas Adidas NEO geniales, una plallera que dejaba a la vista sus axilas, de color blanca y su infaltable gorro Chicago original.
"Que bien te vistes." Dije riendo.
"Siempre. ¿nos vamos al centro comercial? , desayunáremos allá." Dijo abriendo la puerta principal.
"Claro" Respondí saliendo por la puerta y caminando hacia el Porsche de Justin.
Subimos a su auto y partimos rumbo al centro comercial.
(...)
Llegamos y Justin aparcó en el estacionamiento subterráneo.
Los chicos -Justin, Abraham, Dylan, Ernesto, Matías.- habían quedado en juntarse en la gran pileta.
Caminamos a la gran pileta con Justin y ahí estaban los chicos.
"Hola." Dije sonriendo a todos los chicos. Acercándome A ellos y dejándoles un delicado beso en su mejilla a cada uno de ellos.
"Hola Ariana." Respondieron.
"Hola broos." Dijo Justin dándole un saludo de macho a los chicos.
Entramos al centro comercial y pasamos a muchas tiendas.
"Iré a buscar un café helado." Dije sonriendo.
Caminé a Starbucks y compre un café helado, salí y no estaban los chicos, caminé por muchas tiendas buscándolos y no estaban.
No le tomé importancia y recorrí muchas otras tiendas viendo ropa.
Llevo comprado seis cosas, compre cuatro cosas en la tienda Chanel y 2 en la Forever 21.
En el camino recibí artos piropos, de chicos de la edad de Justin.
Suspiré.
"Booh!" Dijo alguien atrás mío.
Salte del susto y me giré.
"Oh, Dylan." Dije ya más calmada, abrazándolo con las bolsas de compras.
"¿Qué haces aquí sola?, Te gritamos que estaríamos en la tienda Adidas." Dijo aún abrazandome.
Sentí una tos falsa, me despegué d Dylan y miré de donde provenía esa tos falsa. Justin.
"¿Dónde has estado?, Estoy a cargo tuyo, ¿lo olvidas?" Dijo seco y un tanto molesto.
"No lo olvido, lo siento." Dije firme.
"Mejor camina." Dijo molesto y avanzando hacia un Starbucks cercano.
Suspiré.
Agarré a Dylan del brazo y lo arrastre a Starbucks, entramos y me senté en una mesa junta con la de los chicos.
Me senté y miré hacia fuera.
Justin le pregunto a los chicos que querían pedir, menos a mi.
Me sentía sola, y ignorada.
Camine a la barra y me senté en un asiento alto.
Que bipolar este chico.
"¿Qué quieres, linda?" Pregunto un chico de 17 años bastante lindo, cabello castaño claro y sus ojos cafés oscuros, también bastante alto.
"Un café caliente y dos tostadas." Dije sonriendo.
"De inmediato." Dijo caminando hacia la cocina.
Saqué mi celular y comencé a revisar Facebook.
"Aquí tienes." Dijo aquel chico tan apuesto entregándome dos tostadas y un café caliente en una bandeja.
"Gracias" dije sonriendo.
"¿Me puedes dar tu número?" Dijo nervioso.
"Claro." Reí.
Me pasó su celular y anote mi número.
"¿Cómo te llamas?" Pregunto.
"Ariana." Respondí.
Lo escribió en su celular y lo guardo.
"¿Te parece que conversemos un rato?, Tengo libre unos 30 minutos." Dijo amable.
"Claro."
"Cuéntame, ¿hace cuanto llegaste a vivir aquí?" Dijo sonriendo.
""Hace una semana, ¿Cómo te llamas? Y, ¿dónde vives?" Dije riendo.
"Me llamo Matías Lynch." Dijo sonriendo.
"Lindo nombre." reí.
"Ariana, nos vamos." Mire hacia atrás y vi a Justin.
"Me quiero quedar, puedo irme sola." Dije volteando a tomar mi café en su vaso de plástico del Starbucks.
"No, no puedes, estoy a cargo tuyo." Dijo molesto.
"Llamaré a mi madre y le diré que me voy sola." Dije girando para que vea mi celular en mis manos.
"No lo harás, basta." Dijo quitándome mi celular de las manos.
"Entregámelo, no puedes obligarme."
Justin me tomó del brazo y me paro del asiento.
"Nos vemos Matías." Dije dándome vuelta en mis talones. Justin aún me tiene agarrado el brazo, incluso fuera del Starbucks.
Por sí preguntan, ya pagué, pagué en cuanto me entregaron mi comida. Por suerte alcancé a comer.
"Ya puedes soltarme, Justin." Dije desanimada.
Justin me soltó y ahora estamos caminando hacia en estacionamiento.
"Justin, no deberías haber hecho eso, la dejaste en vergüenza." Dijo Dylan firme.
"Me importa una mierda, no había nadie en el Starbucks, está a cargo mío, tiene que acatar las órdenes." Respondió molesto.
No que fuera perro. estúpido.
"No porque esta a cuidado tuyo tienes que tratarla así, imbécil." Dijo desafiante.
"No me vuelvas a lla..." Interrumpí a Justin.
"Basta, la cosa ya pasó, creo que me acostumbraré a esos tratos de Justin, y por favor Dylan ya no pelees más." Dije caminando lo más rápido que pude.
"Dylan, ¿me puedes llevar a casa?" Dije firme.
"Viniste conmigo." Dijo Justin.
"Lo sé!" Grité.
Llame a mi madre y le dije si podía ir a otro lado, me dijo que si.
"Llame a mi madre, me dejo irme con Dylan, ¿contento?"
No respondió y simplemente se subió a su auto y se fue.
Suspiré.
"Nunca pensé que trataría así a una mujer, Justin no las sabe valorar." Dijo Dylan negando con la cabeza.
"Yo menos." Dijo Ernesto y Abraham.
"Que les parece si vamos a mi casa y hacemos una fiesta?" Dijo Abraham.
"Claro." reí.
(...)
Ahora nos encontramos en la casa de Abraham en su fiesta. hay mucha gente.
"Justin dijo que venía en camino, ¿no te molesta Ariana?" Pregunto Abraham.
"Claro que no, sí lo ignoro todo estará bien." reí.
"¿Bailas?" Dijo Dylan amable.
"Claro." Dije sonriendo.
Comenzamos a bailar al ritmo de la música, era movida la canción.
Miré hacía la puerta principal, donde se veía un Justin muy guapo.
"¿Podemos hablar?" Dijo Justin apareciendo frente mío.
"Claro." Dije caminando hacia arriba, donde se dirigía Justin.
Entramos en una habitación, Justin se sentó en la cama, yo en cambio, me quede parada.
"Lo siento, te traté muy mal, soy idiota." Dijo mirando el suelo.
"Tranquilo, esta bien. Ahora será mejor que bajemos, vamos."
(...)
Ya han pasado 3 meses desde la fiesta de Abraham, Justin y yo lo hemos estado pensando bien y ya todo esta arreglado.
Nos hemos dado uno que otro beso..
Hoy Justin me invito al centro comercial a almorzar en el Starbucks.
Me maquillé un poco y Justin me dijo que me pusiera la misma ropa que la vez pasada, cuando nos peleamos en el centro comercial.
Tomamos rumbo al centro comercial.
(...)
Llegamos al centro comercial y nos dirigimos al Starbucks.
Entramos y nos sentamos en una mesa para dos, en una ventana.
"¿Qué pedirás?" Me preguntó Justin.
"No lo sé, ¿ensaladas?"
"Pediré lo mismo que tu." Dijo riendo.
Llegó el mesero y le pedimos ensaladas. Comimos y ahora ya estamos comiendo el postre.
"Ariana, hum, lo he pensado muy bien y..¿quieres ser mi novia?" Dijo nervioso.
Oh, Dios, mío me pidió ser su novia!!
"Justin.. Yo..
HELLO NSNSJSBDB YA CHAO c:

Enamorada Del Diablo-EDITANDO-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora