3.Eso dicen mis amigos.

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–Gracias señora Bolton, no tardare mucho en volver solo quiero ir a tomar un café.–dije saliendo por la puerta. 

–Pero no quieres tomar aqui un café? –dijo abriendo la puerta de nuevo, con ojos suplicantes.

–Claro, me encantaria, pero es que señora Bolton, solo tengo una semana para conocer esto antes de clase, y.. –dije esperando a que me interrumpiera pero no lo hizo. 

–Entonces deja que Michael te acompañe. –dijo adentrandose dentro de la casa para llamar a su hijo, pero la detube.

–No hace falta, señora Bolton, de verdad–insistí suplicante, por Dios esta señora no se cansa. 

Asintió y se adentro de nuevo a la casa. Oh my good, pensé. Esta mujer no se cansa, es persistente hasta mas no poder. Bueno en fin, a lo que yo iva. Me dirijo hacia.. ninguna parte? Mierda, necesito a Michael para ir al centro, osea a Cheshire. Doy media vuelta dirijiendome de nuevo hacia la puerta. Pero para cuando ya voy a tocar, Michael ya a abierto la puerta,y esta plantado con su sonrisa. 

–Como pensabas ir al Centro, Ella? –dijo llevando sus manos a sus caderas. 

–Pues.. –dije dudosa. 

–Vamos, yo te llevo, debo ir ha hacer unos recados.

Me limité a asentir y a seguirle a paso lijero. Abrio el coche y se precipito rapidamente dentro de el. Doy gracias que estubiera aparcado delante de casa, hacia un frio horrible, y yo seguia con la misma ropa con la que llegue, pero esta vez tenia una chaqueta del mismo color que mis botas. Cuando entre en el coche mis manos estaban heladas y yo no paraba de frotarlas entre si para que se dieran algo de calor, pero nada. Miro hacia un lado, y ahi esta Michael, mirandome con una sonrisa en la cara, mira sus manos y se quita los guantes que llevaba para prestarmelos. 

–Gracias –le digo sonriente– Mmm..esto.. hay alguna cafeteria que sea buena en Cheshire? –pregunto mientras deslizo los guantes por mis manos heladas. 

Asintió y rapidamente encendió el auto para dirijirnos hacia una cafetería en la ciudad. Durante el camino hubo silencio pero era un silencio comodo.

Ahora estoy parada enfrente de una cafetería, hace como unos cinco minutos que Michael me ha dejado aqui, me ha dicho que diga que soy pariente suya y que gracias a eso recivire como un tipo de descuento. Acepte sin problemas. Finalmente me decido a entrar, y así tomarme al fin un café, mi esperado y deseado café. La primera impresión que me llevo del local es tranquila, el ambiente es tranquilo, sereno, no hay agetreo, aunque hay mucha gente. Lo bueno es que en la barra no hay casi nadie, por eso decido colocarme ahi. El camarero que es bastante joven, de unos 16 años asi que me supongo que es un comercio familiar, o que simplemente no esta estudiando. 

–Que se le ofreze señorita? –me dice el chico con una sonrisa. 

–Pues gustaría un cafe solo con mucha sacarina porfavor. –le devolví la sonrisa. 

–De acuerdo. –dice este, cuando derrepente recuerdo lo que Mike me dijo.

–Chico, perdona –digo y se vuelve a acercar ami– vengo de parte de Mike, Mike Bolton. 

–Ah, el señor Bolton, pues seran 55 dolares.–dice tranquilo.

–Perdon? –digo asombrada– 55 dolares por un café? 

–No, es que Mike dijo que enviaria a alguien para pagar su cuenta.–dijo sonriente, extendiendo su mano–pero tranquila, veo que te ha engañado, no te cobraré el café que has pedido, y para otro dia también, invita la casa. –me giña un ojo

–Gracias –suspire alivia, extendiendole los 55 dolares que Mike me habia cargado ami, maldito, juro que aparte de pagarme los 55 dolares, me pagara esta broma. 

Espero tranquila, mirando hacia todos lados, en busca de alguien a quien conozer o al lugar donde sentarme pero nada. Vuelvo la vista al frente cuando el chico me ofrece mi pedido giñandome un ojo y brindandome un: "Aqui tienes preciosa". Asiento y finalmente le doy un sorbo a mi café. Esta calentito, y es gustoso, me brinda tranquilidad y comodidad. Suspiro alivida de poder relajarme al fin despues de tanto agetreo deshaciendo las maletas y acostumbrandome al extraño clima que hay en Inglaterra. Vuelvo la vista hacia un lado, pero ahora hay un chico a mi lado, pidiendo, y por como lo veo sentado, veo tambien a decidido quedarse sentado en la barra. Es de tez blanca, tiene el pelo rizado, un poco largo. No consigo verle los ojos, ni la cara ya que esta mirando hacia un lado, hacia donde esta el camarero, pero... Nose porque, pero ese pelo lo he visto en alguna otra parte.

Lo miro fijamente, sin miedo a que se de cuenta, pero de repente vuelve la vista hacia mi, y por acto reflejo vuelvo a mirar mi café. Ami no me da vergüenza que me vean mirandolos fijamente, pero si que me miren fijamente. 

Sé quién és, lo he reconocido, esos ojos verdes se reconocen facilmente.

–Y tu eres...? –dice el chico mirandome fijamente.

–Perdona, estas hablando conmigo? –digo queriendo parecer ignorante.

–Mmm.. –mira a su alrededor buscando no se a quien– sí, eres la unica persona que hay a mi lado. 

–Y tu eres Harry Styles no? –digo sonriente. 

–Eso dicen mis amigos –sonrió– pero..oye, te he echo una pregunta.–dice volviendo todo el cuerpo hacia mí.

–Y yo la he evitado. –le giño un ojo y le doy un sorbo a mi café.

–A si, que.. eres un tipo de directioner, o como?

–Ajá. –digo riendo– sobretodo directioner. –suerto una gran carcajada y el me mira extrañado, pero sonrie– solo me gusta vuestra musica. –asiento– y... Nial y Liam. 

El sonrie y niega con la cabeza, hace unos segundos que el camarero le ha servido el cafe y ahora esta dandole un sorbo. 

–Tienes un bolígrafo? –pregunta Harry extendiendo su mano. 

–Claro.–busco en mi bolso y le doy el bolígrafo poniendoselo en la mano, sintiendo el tacto de sus manos, y son suaves, muy suaves. Se acerca ami, cojiendo mi mano, sube la manga de mi camisa y inscribe un numero de teléfono.Cuando acava sonrio y miro con extrañada la inscripcion que acava de hacer en mi brazo– Y esto es..?

–Mi numero de movil, me has caido bien chica sin nombre, puedo llamarte Honey? –me devuelve mi bolí, y al acerlo, vuelvo a destaparlo dejando el tapon en mi boca e inscribiendo mi numero en su brazo– y esto es? –pregunta sonriendo. 

–Mi numero de teléfono, yo no pienso llamarte, si te llamo en dos dias, en esos dos dias puedes perder el interes por mi y cuando te llamo puedes pasar de mi, haciendo que yo me lleve una desilusion. –me detengo esperando a que lo entienda, y asi es, o eso creo ya que esta asintiendo– En cambio si tu me llamas, querrá decir que tienes interes en mí. –me detengo dandole el ultimo sorbo a mi café.– Y oye porque Honey?

–Por el color de tus ojos, son de ese color. –hace una pausa y saca dinero de su bolsillo para dejarlo en la barra, así pagando su café– Esta bien, te llamare mañana Honey. 

Le sonrei y echo esto,se fue de la cafetería dejandome con una sonrisa en la cara. 

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LA APUESTA.  #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora