Los cielos y la tierra construyen la separación de unos nacimientos,
Gritaban comodos la furia y la tranquilidad de cambiar la rutina,
Alex fue llamado el que creyó firmemente en sus sentimientos,
Sandra fue su nombre porque sentían que su verdad no se termina.
Alex nació y creció en la humildad del medio social de mayoría,
En grandes excesos educado con trabajo y agonizado en la poesía,
Educándose con el tiempo pero con estupideces de su relatoría,
Con la convicción de vivir un sueno que más tarde se unificaría.
Sandra sucumbió la fortaleza de su realidad para salir adelante,
Precaria y afortunada en la manifestación de sus pesares,
Buscando la manera de dar su toque a lo que era importante,
Con ganas de luchar para promover la lucha de sus pensares.
Vivian en un mundo en donde las brutas realidades se imponían,
Donde cada individuo y sus batallas eran brutalmente ignorados,
Mientras en el crecimiento de sus ideas apoyaban la plena rebeldía,
Alex y sus bromas humildes y Sandra con sus pesares olvidados.
El destino de alguna manera trataría un encuentro y conexiones,
Un día en su escuela Alex termina la docencia y vuelve a su hogar,
En el camino va leyendo el libro que siempre es de buen gustar,
Repetía el mismo rumbo a diario para con esfuerzo tener honores.
Del mismo modo Sandra confiada y sencilla quería hacerse notar,
En su escuela con clase revisaba sus errores propios en los demás,
Su esencia recaía en que podía crecer y dar de sí misma mas y mas,
Por así decirlo Sandra alcanzaba lo que prometía sin de ella dudar.
Sus escuelas estaban cercanas ambos se irían pronto a encontrar,
Dado caso que el momento lo exigía mientras ambos caminaban,
Mientras Alex leía su libro y Sandra pensando algo que acabo de pasar,
Sandra se cae en la calle y la sangre en sus rodillas ensagretadas.
Soplan vientos alisios y el libro de Alex sale volando con altura,
El libro cae en la cabeza de Sandra y ella empieza a desmayarse,
El tonto y humilde joven al ver lo que paso grita con locura,
No había nada ni nadie y el actuó por su propia cuenta al preocuparse.
Trato de con lagrimas animar a aquella jovencita a volver animarse,
Otra coincidencia el libro se llamaba "Los Ojos de mi princesa",
Alex ayuda y mira aquellos ojos que empiezan a levantarse,
La joven pregunta la identidad de quien la ayudo con sutileza.
Al caer los sucesos y Alex ayudar a Sandra con todas sus heridas,
Se harían muy amigos pero con pensares opuestos a lo viviente,
Alex con la mente estúpida de querer con humildad la vida,
Sandra con el sentir preciso de superarse en la realidad existente.
Alex creía en lo literario mientras se da cuenta de su inspiración,
Que aquella chica que pudo ayudar se fue convirtiendo en su musa,
Dudas siempre pudo tener pero en ellas no encontraba otra excusa,
El destino le dijo a Alex que nacería el amor en un solo corazón.
Sandra concentrada en conocer este joven que marco la diferencia,
Sumisa pero precisa pudo detectar sus pensares y deficiencias,
Al ver que aquel joven sentía la necesidad de cambiar la existencia,
Ella empezaba a relatarle a aquel desconocido sus experiencias.
Mientras ambos en una bonita conversación nacia la comprensión,
Almas ambulatorias que buscan ganarle la batalla a la realidad,
Coexistiendo en búsqueda de que cada uno cediera a su propiedad,
Mezclando sus vidas con un mismo pensar de ahí ha nacido Alexandra.
"Alexandra se podría definir como un tipo de conexión"
