DIVINO ENCUENTRO (PROXIMAMENTE)

Divino encuentro

—"Ser el Dios de la naturaleza puede parecer de las tareas mas sencillas del mundo, hasta los mortales, en sus libros, lo describen como un trabajo aburrido. Si supieran lo complicado que es lidiar con su estupidez no pensarían de esa manera. Creen que solo velo por el bienestar de las plantas, los ríos y los animales, y eso es cierto, pero es curioso como nunca se incluyen. Ellos son parte de mi territorio, viven ahí y por ende tengo que cuidar de ellos desde que a mi padre, Zeus, se le ocurrió la idea de crearlos y acomodarlos justo en mi demarcación, la peor de todas sus ideas."

Hélias, conocido en el mundo mortal como Artemis, señor y dueño de la Naturaleza. Es el dios más orgulloso, firme, impetuoso y egocéntrico del Olimpo, mucho más que la misma Afrodita.

Para él, los humanos son los seres más despreciables y desagradables, la peor creación de su padre, ¡Los odia!.

Los humanos llevan años destruyendo su más preciado tesoro, a pesar de que ha tratado de eliminarlos con desastres naturales, estos siempre logran sobrevivir y reproducirse. No logra descifrar que hace tan resistente a esta plaga, pero su furia hacia ellos no cesará hasta que todos desaparezcan.

Zeus, el supremo del Olimpo, nunca hace nada sin una intención, por algo es el que lleva las riendas. Cada paso que da lo ha pensando con antelación, por ello creo la humanidad.

Ver comportamientos egoístas y poco responsables por parte de su hijo lo llevó a tomar la decisión de que debía darle algo en lo cuál se viera su esfuerzo, y es que ponerlo a cuidar de sus jardines no era suficiente. Aunque sabe que Hélias ha hecho de todo para deshacerse de la responsabilidad de cuidar de los humanos él no se rinde, cada día pone más y más humanos bajo su cuidado.

Como todo buen monarca siempre tiene una carta que le garantiza su victoria, en este caso creo a una mujer, una tan hermosa que el agua le encantaba vislumbrar su reflejo, tan delicada que la brisa al tocar su piel sentía armonía, tan inteligente y gentil que los arboles se sentían por fin escuchados, creo una mujer que fuese una con la naturaleza, creo la figura perfecta para que esta fuese irresistible hasta para su orgulloso hijo.

Terra seria la salvación de la humanidad y la religión de Hélias.