“Quiérete, quiérete mucho. Llévate al cine, cómprate unas palomitas de caramelo y una soda y disfruta la película, o ve a al gimnasio y ejercítate y hazte más fuerte y más ágil y más rápida, ponte más hermosa de lo que ya estás; o ve al parque a tomarle fotos a los árboles y a las flores y a las ardillas. Y si hace frío quédate en casa y ve un capítulo de tu serie favorita mientras tomas chocolate caliente con galletas de mantequilla. Oye, aliméntate bien, come verduras, frutita, y sobretodo toma agua por favor. Si te sientes cansada o aburrida, relájate, ya sea leyendo tu libro favorito, en tu sillón favorito o escucha la música que te gusta a todo volumen con los ojos cerrados (mientras bailas como Matilda cuando puede mover las cosas con la mente) y ríete a carcajadas y cánsate hasta sudar y luego lánzate al sillón y enciende la tele para descubrir que no hay nada interesante y que mejor quieres irte a jugar al jardín con tu perro. Oye, escribe…escribe, escribe, escribe. Y luego duérmete todo el tiempo que quieras y despierta y ponte a ver una película romántica para que llores un rato, o ponte a ver tus fotos viejitas para que llores un rato más mientras descubres que has tenido una vida bien bonita. Por la noche sal a la terraza y observa un rato la luna y cuenta las estrellas mientras la ciudad se va quedando callada. Y haz todo lo que a mí no se me ocurre que puedes hacer pero que a ti sí porque estás más loca que yo. Pero sobretodo quiérete, quiérete mucho.”
