•^Despedida de soltera^•

2.3K 136 44
                                    

Sentía unas fuertes ganas de vomitar, se lo atribuyó a toda la ingesta de alcohol que había consumido esa noche y no a los nervios que tenía porqué en pocas horas iba a casarse. 

Voy a casarme pensó incrédula, realmente no esperaba que todo sucediera tan rápido. Quería mucho a su prometido, sin embargo hubiera deseado más tiempo como novios, no es que no le gustará es solo que… no se sentía preparada para una vida de matrimonio. Era irónico ya que toda su vida se hubiera tornado a este momento. A pesar de la enorme felicidad que sentía por contraer nupcias con el hombre que admiro desde que era una niña, en el fondo sabía que aún algo estaba sin concretar y quizás por eso aún no podía entregarse completamente a este gran momento.

No sabía bien si era el alcohol o el saber que está iba a ser su última oportunidad, pero una repentina valentía brotó desde su interior. Estaba decidida, está noche lo iría a buscar.

Ni se te ocurra salir en ese estado - le gritó a duras penas Tsunade, que se encontraba en un estado de ebriedad igual que ella, acostada sobre la alfombra en la otra punta del salón

Sintió la necesidad de hacerle caso, pero este no era el momento de hacer caso. Está noche iba a desobedecer todo lo necesario para cumplir con su objetivo. 

Su despedida de soltera había sido una locura. Ino y Sakura habían planeado una gran fiesta de chicas en el apartamento de Tsunade, todas sus conocidas habian asistido. Recibio regalos, comieron de a montón y bebieron una cantidad de alcohol que creyó que en cualquier momento su cuerpo se iba a desmoronar. 

Todas las muchachas se encontraban repartidas en el piso durmiendo, solo la rubia tetona se había percatado de su huida.

I-ire a descansar a casa - mintió pero la mujer ya se había dormido 

Suspiro aliviada y salió del lugar. 

Afuera la temperatura había descendido bastante pero en su estado casi no lo noto. Su cuerpo andaba solo, con total tranquilidad. Nunca se había sentido tan libre, no había vergüenza, temores, ni timidez. 

Lástima que apenas pueda coordinar mis pasos, pensó

El departamento del hombre al que iba a visitar no quedaba tan lejos del lugar. Las calles de Konoha estaban vacías para su suerte y nadie la vería. Si su padre se enterará, si su prometido se enterará. Estos pensamientos le helaron la sangre, pero ya se encontraba demasiado cerca y no era el momento de echarse para atrás. 

Subió unos escalones con dificultad, tuvo que agarrarse con fuerza de la barandilla para no caer. Parada frente a la puerta no pudo esconder la sonrisa de felicidad que le provocaba toda la situación. No estaba nerviosa, estaba decidida.

Tocó dos veces y espero. Pasaron solo unos minutos que se le hicieron eternos, quiso golpear aquella puerta de madera tan fuerte para que él saliera a su encuentro. 

Escucho unos ruidos dentro y sintió curiosidad, justo cuando iba a activar su Byakugan para espiar la puerta se abrió sobresaltandola.

Su corazón comenzó a golpear con fuerza contra su pecho, cómo si quiera salir de adentro. Miró embelesada aquel rostro adormilado que la miraba desconcertado. 

Hinata? - dijo sorprendido - sucede algo?

Buenas noches Hokage-sama

La miraba sin entender, podía notar como su chacra estaba algo inestable. Por un momento se preocupo pero cuando la muchacha de cabellera azul perdió el equilibrio y tuvo que tomarla en brazos para que no cayera pudo olfatear el intenso olor a alcohol que emanaba.

Estuviste bebiendo? - pregunto lo obvio

Está asintió y rodeo sus finos brazos en su cuello, abrazándolo como si de aquel abrazo dependiera su vida. Estaba atontado, la situación lo tenía confuso. Jamás se hubiera imaginado que Hinata Hyuga aparecería en su casa a las tres de la madrugada, completamente ebria y menos que estaría abrazándolo. Era algo que en la academia y en su larga experiencia como jounnin no había aprendido y por ende no sabía cómo actuar.

Historias Cortas. Kakahina♥️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora