¿Por que me enamore de ti?

Parte 4

—Mamá ¿Como que suegro, que está pasando aquí?

—Verás la madre de este hermoso y joven apuesto y yo somos amigas, desde que ustedes nacieron los creíamos y los juntamos para que en un futuro sean novios y se casen

—¿Estas diciendo que este tonto es mi novio? —dije enojada— mamá, enserio. Primero Nathan se va, luego otro niño y ahora está barbarie

—No hables así tienes que darme las gracias

—Suerte a Dios que Jackson no está aquí así completo, las gracias por arruinar mi vida mamá, te has puesto a pensar si quiero cuidar de 4 disculpa 5 niños porque el pequeño y 7 debo contar a Jackson

—Jovencita te dije que me respetemos odio que me hables así. Se te olvida que soy tu madre

—Y a ti se te olvida que no soy tu sumisa, sirvienta o cualquier otra cosa

—Ya está decidido jovencita y así será

—Ahora piensas meterte en mi vida, mi vida amorosa la resuelvo yo con quien se me pegué la gana, este tipo nisiquiera me gusta —Lo señale.

—Llámalo por su nombre, se llama Mark y así lo llamaras de ahora en adelante y esto lo decidiste tu cuando estabas enamorada de Mark

—Era una niña, nisiquiera recuerdo eso... No lo amo

—Pero podemos hacer el esfuerzo —dijo el.

—Cállate —grite.

—Jovencita

Mamá elevó su mano y la pego en mi mejilla rápidamente mi piel se volvió algo colorada, Mark me miro y con sus ojos como dos platos yo agarre mi mochila y salí de la tonta enfermería.

Camine rápidamente hasta que del enojo salí del colegio aún el portero viéndome ir y sin preguntarme porque salí. Sólo se que camine rápido hasta llegar a un lugar, un lugar que ni yo misma conozco.

Empecé a llorar, estaba devastada, mi vida se ha vuelto de lo más pésimo el tonto de Mark aparece ahora o mejor porque mejor nunca aparecio, no, no debió aparecer.

Seguí caminando hasta llegar a un restaurante, pedí algo de comer para callarme.

—Señorita aquí está su pedido, de paso informarle que necesitamos vacantes para que sirva en este restaurante si esta interesada puede hablar con nosotros

Que si interesada estaba más que ansiosa por alejarme un poco de casa, accedí y hable con el dueño del restaurante ajustamos las horas as s, después de clase vendría a trabajar.

Sólo pensaba en irme de casa y que mejor forma de hacerlo si no es trabajando.

Salí después de comer del restaurante y llegue a casa, no había nadie, entre a mi habitación y dormí unas cuantas horas.

—Greis —escuche a alguien del otro lado supuse que era papá y abrí

—Papá —dije, pero cuando abrí la puerta por completo me encuentro con Mark

Disgustada le cierro la puerta en la cara, el suspiro y volvió a tocar, lo ignore, escuché unas llaves que abrieron la puerta y así fue la puerta se abrió.

—¿Pero que mierda?, ¿Como rayos abriste?

—Tu madre me dio esta llave

—¿A que viniste?

—Nuestas madres están dispuesta a esto, sólo dibujamos ser novios y ya que te cuesta

—Mamá siempre toma mis decisiones de esta ea no se va a valer

—Yo quiero que salgamos

Mi corazón empezó a latir no bbr porque me guste, es que nadie nunca me había dicho eso, y hay estaban otra vez las lágrimas.

—¿Por que quieres eso?

—Porque aunque no me gustes desde pequeños siempre me has atraído realmente eres linda pero amo personalidad

—Ni siquiera me conoces

—Tu madre me contó todos y se que eres diferente, quien diría que soy rico digo odio vestir como rico, por eso ando así y es que, hoy quería sorprenderte para que digas que si y nuestras madres Carmen sus angustias

—No estoy de acuerdo

—Puedes yo si

—Eso no es algo que me incumbe, no me gustas y nunca me gustaras

Mark se acerco a mi dejando poca distancia

—Intentemoslo

Acto seguido mis labios y los de el se unieron al reaccionar rápido lo empujo y cae. Me subo arriba de el y empiezo a golpearlo

—Mi primer beso.... tu asqueroso. Tu me lo probaste

—Fue tu primero beso, vaya el mío también

—Acaso te pregunte —jale su cabello.

—Vestía salvaje sueltame

—¿Te atreves a insultarme?

—Así me gusta

No me fijé pero estaba en una posición poco comprometedora encima de el, rápidamente me bajé y me senté a su lado.

—¿Me amas? —le pregunté.

—Me atraes —dijo.

—Perfecto, no te atreves a Enamórate de mi

—Creo que lo estoy —río— amo tu forma de ser, eres tan linda

—Callate.

Lo agarre por el cabello hasta sacarlo de mi habitación, cerré la puerta, olvidandome de todo lo que estaba detrás de ella. Luego de esto con furia rompí el vidrio con mis manos, saliendo de ella una cascada de sangre