IDOL -Yoonmin

Capítulo: 20

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Narrador omnisciente:

Jimin observo a Yoongi sentado en su silla, se veía malditamente bien, con una sonrisa provocativa que lo invitaba a hacer de todo con el.

-Porque me estás haciendo esperar Jiminie?-
Yoongi le habló con su voz ronca y ese tono seductor que volvía a el pequeño loco.

Jimin con sus mejillas sonrojadas y los nervios recorriendo todo su cuerpo se acercó a el mayor sentadose con las piernas abiertas sobre los muslos de su Hyung.

El pelinegro soltó un leve gemido al sentir sus miembros rosarce por encima de la ropa, Yoongi puso sus manos sobre la espalda de este y comenzó a hacer leves caricias que bajaban hasta su trasero provocando que el pequeño se estremeciera.

-Estas muy lindo hoy Bebe-
Yoongi comenzó a dar leves besos en el cuello del chico.

-Aah... se siente..tan bien-
Jimin soltó leves gemidos mientras mueve sus caderas sobre el mayor.

- Porque te gusta mandarme esas fotos con toda la intensión de excitarme y cuando lo logras..actúas tan tierno?- Yoongi pasa su lengua por el cuello de Jimin lamiendo y dejando besos mojados sobre este.

Jimin soltó una leve risa tan tierno que pudo haber enamorado a cualquiera.

-No lo sé Hyung...me pone nervioso cuando me toca-
El menor acerco sus suaves y gruesos labios a los labios del contrario y depósito un suave beso

-Pero te gusta no? Te gusta que te toque y te diga cosas sucias no es así bebé?- Yoongi le dio más besos sobre los labios mientras acaricia su espalda metiendo sus manos bajo su camiseta. -Te gusta que te haga mío, que te haga sufrir- le dijo lo último soltandole una fuerte nalgada.

El pequeño soltó un fuerte gemido y asintió con la cabeza repetidas veces
-Me gusta mucho- susurro sobre sus labios volviendo a besar de una manera más apasionada, juntando sus lenguas generando sonidos de chasquidos obscenos.

Se separaron por falta de aire, Jimin comenzó dando besos en el cuello de su mánager, succionando levemente pero sin dejar marcas muy notorias, le ayudó a retirarse el cubrebocas y también se deshizo de las prendas superiores de ambos, el pelinegro siguió dando besos y caricias por el pecho de su Hyung, bajando cada vez dejando un camino de leves marcas rosadas que adornan muy bien la pálida piel del mayor.

Jimin bajo de sus piernas y se colocó de rodillas frente al mayor, desabrochando su pantalón y comenzado a masajear su entrepierna, Yoongi sonrió de lado y acaricio el cabello de el chico.
-Que tierno te ves así Jiminie-.
-Quiero chuparlo Daddy-
Jimin le dijo con un tono de voz muy tierno, la manera en que hablaba y que lo llamara de esa manera tan fetichista lo ponía demasiado.
Su pene palpitaba bajo su ropa interior, las ganas de penetrar al pequeño y quebrarlo por completo lo estaban matando.

-Hazlo ya bebe, no sabes cómo me encantas-
Jimin bajo los pantalones y la ropa interior de su mánager dejando afuera su gran y dura erección, sin pensarlo dos veces metió la punta en su boca, rodeandola con sus suaves y esponjosos labios, comenzó a succionar y a dar lámidas que provocaban gemidos roncos de parte de él mayor quien jalaba levemente el cabello de su chico. El menor continuó con su trabajo engullendo su pene haciéndolo chocar contra sus rojas mejillas mientras con sus pequeñas manos hacia movimientos de arriba abajo dándole más placer a Yoongi.
-Aah..lo haces muy bien Muñeco-
El mayor salto un gruñido sintiéndose cerca del clímax, la boca de su bebé era maravillosa, no solo tenía talento para cantar, también lo tenia para mamarla muy bien.

Jimin observo a su mánager de manera inocente mientras pasaba la punta de su lengua haciendo círculos en su glande, Yoongi estaba en el cielo, con la boca entreabierta soltando graves gemidos mientras observaba los ojos cristalinos y llenos de lujuria de su pequeño Jiminie.
-Quieres que Daddy te penetre?-
Jimin asintió con la cabeza sin dejar de masturbarlo.
-Pidelo muñeco-
-Quiero...quiero que me penetres-
Suplico Jimin
-Pidelo bien-
-Daddy..por favor Daddy, necesito que me metas tu gran polla-.
El pequeño agregó un puchero de sus labios a la súplica, y eso fue suficiente para el mayor.