Prologo

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Esto no era algo que Penélope habría pensado posible.

Su corazón latía con fuerza en su pecho.

Siyeon no podía alzar su rostro.

Su sudor le recorría la mejilla.

Esto debía ser mentira.

Ella no quería esto.

Ya había acabado.

Por fin feliz.

Por fin amada.

Entonces, ¿por qué?

¿Por qué estaba ella aquí...

... Mirando el cadáver de su madre pudrirse?

¿Por qué sus manos eran pequeñas y su pecho dolía tanto?

¿Por qué recordaba la sensación de ser degollada?

¿Por qué le aterraba esos ojos rojos que un día amo?

¿Por qué volvió al inicio de todo?

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Me gusta Calisto pero también los finales tragicos

MagentaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora