Tengo una foto tuya, por las noches la observo, también en días silenciosos y solo me provoca lluvia en el alma, esa sensación fría de soledad que dejaste, ahí sonriente e indolente sin saber el corazón que tocaste.
A veces te pienso, me preguntan por ti, como si yo fuera dueño de tu tiempo, de tus palabras, de tu sonrisa, de tu piel. A veces me detengo y te suspiro, cómo si fueras el aire que me falta, tapo mis ojos con estos parpados lacerados de sueños sin terminar y por un breve instante apareces.
Hay días tan lentos en los cuales te dibujo para tocar tu sombra, pero es fría, tal cómo tu olvido, solo anhelo que aparezcas ahí frente a mi, y con un abrazo me digas la falta que nos hacemos.
Hedrick Lima