葬花/Zàng Huā

Capítulo 11

Gracias a la ficha de pase que Lan XiChen le prestó antes de su partida hacia Lotus Pier, Jiang Cheng pudo entrar fácilmente en Cloud Recesses a gusto. No tenía que pasar por la puerta principal, pero prefería hacerlo, no era por Wei WuXian después de todo.

Los dos discípulos en guardia se inclinaron hacia él cuando pasó. Ya se habían acostumbrado a su presencia, y al ver la ficha GusuLan en su cintura, no se molestaron en pedir otras formalidades. Todos ya conocían la cara de Sandu Shengshou. Si no, entonces lo sabrían eventualmente. Fue bastante afortunado que la lluvia comenzara a caer cuando llegó. No quería quedar atrapado en la lluvia en absoluto.

Además del té de loto que le prometió a Lan XiChen, también trajo algunos de los postres especiales de YunMeng hechos de loto que quería que probara. Comenzó a caminar con libertad por el pasillo de madera, trató de no hacerlo demasiado rápido para evitar romper una de las ridículas reglas Lan. Cuando giró a la izquierda en la esquina, dos discípulos lo estaban esperando. Si recordaba correctamente, eran los asistentes personales de Lan QiRen. Los discípulos le informaron que Lan QiRen deseaba hablar con él. Una oleada de sentimientos inquietantes invadió lentamente su corazón, pero, por supuesto, Jiang Cheng no pudo negarse.

Siguiendo a los dos discípulos a una parte diferente de Cloud Recesses que ocuparon y residieron los ancianos Lan. Era una parte que normalmente estaba restringida para los miembros no Lan. Sin embargo, hoy se le concedió un permiso especial para entrar en el lugar privado de Lan QiRen.

Sentado en el medio de la sala junto a la mesa adyacente estaba su antiguo maestro, Lan QiRen. Solía tener miedo del hombre y su castigo, pero esa era una historia de hace décadas. Ahora él era un líder de secta, hablando con otro miembro de otro clan. Inclinó las manos y la cabeza, ejecutando la cortesía perfecta que se esperaba de él.

Lan QiRen asintió con satisfacción. Extendió su mano e invitó al líder de la secta de YunMengJiang a tomar asiento.

Un silencio incómodo llenó la habitación, diciéndole a Jiang Cheng que no era algo relacionado con los asuntos formales de la Secta, o de lo contrario Lan QiRen lo habría recibido en el salón principal.

—Debería haber dicho esto antes, pero la secta GusuLan está en deuda con usted por salvar la vida de ZeWu-Jun. No habría sobrevivido si no fuera por su ayuda.

El corazón de Jiang Cheng le dolió, si no fuera por él, Lan XiChen no tendría que sufrir tales heridas. Escuchar palabras de agradecimiento de Lan QiRen solo lo hizo maldecir por lo incompetente que era. No podría haber salido con vida si no fuera por Lan XiChen quien lo salvó.

—No, fue todo lo contrario. No habría sobrevivido si no fuera por ZeWu-Jun. Le debo mi vida —Jiang Cheng inclinó las manos, sintiendo una ola invisible de inmensa culpa que lo atravesó. Los pensamientos pesaron en su mente durante los últimos días y nunca cesaron. Puede pasar mucho tiempo antes de que ese sentimiento de culpa lo abandone, o puede que nunca desaparezca.

—Entonces, por favor permítame ser franco con el líder de la secta Jiang —Lan QiRen curvó los dedos mientras hablaba en un tono determinado, el que Jiang Cheng escuchaba con frecuencia cuando fue un estudiante en Cloud Recesses—. Los ancianos Lan y yo somos conscientes de su relación con ZeWu-Jun. Y por relación, me refiero al sentimiento que mi sobrino tiene por usted y usted por él.

Rígido en su lugar, Jiang Cheng de repente sintió la intensidad en la mirada de Lan QiRen y lo pesadas que salían las palabras de los labios del hombre mayor. Sabía que no podían ocultar su relación a los demás, pero no esperaba que se supiera tan rápido. No estaba listo para enfrentar esto con los ancianos Lan.