In other life [KookGi]

Can you be mine?

Jungkook estaba orgulloso, cada vez todos iban mejorando, aunque Jungkook ni siquiera quiso demostrar su parte en público, era verdad que había practicado con su versión más madura, pero aún no se encontraba convencido de lo final, no quería decepcionar a Yoongi, quería dedicarle lo mejor de lo mejor al chico de caballos rubios, quería que todo saliese a la perfección

Después de la practica, cada uno se dirigió a su respectiva a casa, al llegar a la suya, Jungkook vio a Jeongguk jugando con su consola, el río al ver lo infantil que era, le platicó como le había ido en el ensayo, como todo estaba yendo de manera correcta

-¿Y ya sabes como harás que Yoongi diga su parte?- pregunto el mayor como si nada, esa duda aún rondaba por la cabeza del menor, mientras hubo un silencio en la habitación el menor salto como si hubiera tenido una idea, y la tenía

-Mira, podría pedirla a Namjoon el número de Yoongi, luego pedirle ayuda con la tarea, y quizás pueda inventarme algo en ese instante-

-¿Ya tienes tanta confianza con él?-

-Tal vez... No me hagas dudar- decía dándole un almohadaso, el mayor río y asintió dejando que el chico continuará su plan tranquilamente

Decir que el pasar del tiempo es corto, sería la mentira más estúpida que podrías decirle a Jeon Jungkook, le había costado una semana organizar todos los preparativos, además de hacerse más cercano a Yoongi, este ya le tenía tanta confianza hasta el punto de sentarse a su lado en clase, de vez en cuando almorzar juntos. No piensen mal, Jungkook estaba feliz de aquello, el que no lo estaba tanto ers Jeongguk, quien quería volver a ver a su Yoongi, pero debía esperar, y lo sabía.

En este punto, Jungkook tenía todo para su confesión, la música, las partes, hasta la parte de Yoongi, que le había costado agregar al sonido. El mencionado había aceptado con gusto, puesto a que el tenía ese afán de ser músico y ayudar a su amigo tampoco le costaba.

Con todo en mente Jungkook había decidido orquestar todo en el patio de su casa, instaló todo, y una tarde decidió traer al chico sin dar sospecha alguna, todo había sido planificado por los dos Jeon, mientras que el mayor se encontraría en el cuarto del chico, verificando que todo saliera bien sin ser visto, y de vez en cuando escondiéndose de los demás miembros que aveces solian subir a su cuarto, Jeongguk se sentía como un ninja.

Eran las 7 de la noche exactamente, Jungkook tenía a Yoongi cubierto los ojos para ir al patio del menor, mientras que el chico con rasgos gatunos se encontraba emocionado, el tenía una mínima idea de lo que estaba por pasar, Min Yoongi no era tonto, más bien es mucho más parecido al rapero que conocemos, pero para eso debemos rebobinar un poco