ɪᴛ's ᴛʜᴇ sᴀᴍᴇ sʜɪᴛ.

23

Solo paso un año desde que Lee Felix se cambió de escuela, nadie sabía nada de él, por más mensajes que le dejaran jamás contestaba, y ahora en su casa vivía otra gente.

¿Como era la vida de todos ahora?

Kim Woojin estudiaba en una universidad muy prestigiosa, tenía a su hermosa novia Kim Hyuna, su vida era prácticamente excelente, aunque todavía se sentía culpable, si pudiera volver en el tiempo y cambiar las cosas, sin duda lo haría.

Bang Chan se dedicaba a la música, junto a Jisung y Changbin, tenía un trabajo estable, también había encontrado amor, su novia Lalisa Manoban y el llevaban cinco meses juntos, los mejores cinco meses de su vida. Trataba de no pensar en el pasado, le hacía realmente mal recordar todo lo sucedido.

Lee Minho había decidido que lo suyo eran los animales, por ahora se conformaba muy bien con veterinario, aunque todavía era aprendiz. Su relación con Changbin era preciosa, llevaban casi dos años juntos. El era uno de los únicos que había logrado contactar a Felix, por pedido del rubio el no podía decir nada, pero se sentía feliz de por lo menos poder hablarle de ves en cuando.

Seo Changbin hacia música, había ganado varios concursos e incluso casa talentos se interesaron en el, amaba de corazón lo que hacía tanto como amaba a su novio Minho. El fue uno de los que volvió a hablar con Hyunjin, estuvo ahí en sus malos momentos y ahora hasta podía decirse que eran mejores amigos.

Hwang Hyunjin estudiaba fotografía y hacia pequeños trabajos como fotógrafo, también trabajaba en un pequeña cafetería para recaudar más dinero, incluso si sus padres ya lo tenían el quería conseguirlo por su cuenta. Había sido realmente duro salir adelante después de que Felix se vaya, fue todo un año donde mayormente solo lloraba. Ahora también dolía, daría todo por volver a verlo, pero por más intentos que haga nunca podía encontrarlo. Cada día lo extrañaba, pero al menos ahora no quería morirse.

Han Jisung, como ya se mencionó, hacia música junto a Chris y Changbin, también pintaba, ese era su pasatiempo. Mantenía contacto con Felix todavía, aunque no se veían, lo extrañaba demasiado.

Kim Seungmin soñaba con ser abogado, y eso era lo que estudiaba, y también gracias a eso había conocido a Choi Yena, su actual novia.
Aunque siempre había intentado ocultar su dolor, en realidad lo ocurrido en secundaria marcó su vida, se hizo responsable de toda la culpa mientras intentaba hacer felices a sus amigos, fue un año muy duro para el, quizás lo fue así para todos.

Yang Jeongin estudiaba para ser policía y le iba muy bien, mantenía contacto con todos sus amigos y logró formar una relación más profunda con Felix, siempre estuvo ahí para sus amigos, en el fondo también le dolió muchísimo como ocurrió todo, pero mantenía una sonrisa aún así.

Y Felix?

Ahí estaba, caminando por las calles de la ciudad, se detuvo justo en frente de la escuela y la observo.

Tenía una mejor vida ahora?

Estudiaba, trabajaba y vivía con su hermana en un buen departamento, pero en realidad no sabía si era mejor.

Observo todo el lugar con euforia, mucha gente pasaba por ahí tal y como recordaba, gente que iba a cafeterías cerca u otro lugar.

Sus ojos se detuvieron en alguien, un chico alto de piel blanca, cabello oscuro, labios gruesos, una belleza extraordinaria. Aquel chico lo estaba mirando desde la otra vereda.

De un momento a otro ya estaban frente a frente con unos cuantos centímetros de distancia.

- Hola .. Felix.

No lo pensó mucho y lo abrazo, fue un abrazo cálido y lleno de sentimientos que al segundo fueron correspondidos todos.

- Te extrañé.

Dijo sin esperar respuesta del menor, sin saber que esas palabras hacían que en la fría tarde de invierno el corazón de Felix volviera a latir con la misma fuerza e intensidad, sin saber que las maripositas nunca se fueron realmente.

- Lo siento, lo siento mucho, ya no puedo estar lejos de ti. Hyunjin, te amo y no tenerte duele demasiado.

Se aferró con fuerza a los brazos del mayor, y este intento darle todo el amor que no pudo en un año, un maldito año.

- Felix, yo soy el que tengo que pedir perdón. Te amo, te sigo amando, maldita sea un año no cambio nada Felix.

Finalmente cortaron el abrazo y se miraron.

- Por favor perdóname. -Repitió el mayor.

- Todavía duele, Hyunjin.

- Déjame intentarlo de nuevo, sin ir demasiado rápido, sin intentar enloquecerte para que me ames, sin ningúna mentira, déjame enamorarte sinceramente. -Tomo las frías manos del menor- Solo una vez más.. -Dijo casi en un susurro.

- Prométeme que no habrá mentiras. -Respondió con la mirada baja.

Hyunjin sujeto con suavidad el mentón de Felix para que lo mirara.

- Te lo prometo.

Lentamente la distancia entre sus labios se hizo menor, y fue diferente, totalmente diferente a lo que era en secundaria, quizás porque esta vez era completamente sincero, pero no perdía el sentimiento de amor que estuvo allí las últimas veces.

Una pequeña sonrisa se formó en los labios de Felix y Hyunjin no pudo evitar reír.

- También extraño a los chicos. -Confesó Felix.

- Tenemos que juntarnos, somos un grupo, contigo incluido.

El rubio sonrió con inocencia y mucha felicidad. Se abrazaron de nuevo, luego se tomaron de las manos y caminaron.

Al final, después de todo, en realidad si pertenecía al grupo.

Este era un nuevo comienzo.

Está vez no habría mentiras.

Está vez no serían la misma mierda de hace unos años.

Quizás acercarse al chico rubio, de pecas y solitario de mala reputación si lo había cambiado todo.

Fin.