✨ 𝕰𝖘𝖙𝖗é𝖘 ✨ [KookTae- KookV] ²

Capítulo 10

— Me parecen divertidos, ¿Mayormente son así?

Preguntó el de cuerpo ancho, mientras iban al auto, las cosas habían surgido tan divertidas y raras, fueron únicas, el moreno entro primero al auto.

— Si, siempre suelen llevarse así de pesados

Respondió el moreno al ver que el de tez clara ingresará, el auto comenzó ascender, ambos estaban en un silencio agradable para el rubio, pero vaya, Jungkook sentía los nervios invadir le levemente pero intensamente.

La razón era extraña y tal vez lo más normal del mundo, pues tenía planeado salir con el moreno de compras, su hermana y mejor amigo le llamaban, "cita", pero él no lo creía así.

Pronto el rubio fue arrugando su rostro, se levantó del asiento al ver que iban en la dirección contraria a la casa del azabache.

— Jungkook —lo llamó golpeando levemente su pierna— ¿Te haz equivocado?

— ¿De qué hablas?

— Estamos yendo a la dirección contraria a tu casa, debiste doblar a la derecha y no a la izquierda

Jungkook sonrió al frenar de golpe, TaeHyung le miró extraño, este se volteó acercándose al moreno, quedando a centímetros.

— Kim TaeHyung —este le remojó sus labios con su lengua— ¿Quieres acompañarme a tener una tarde grata?

Ambos se miraron, luego su vistas fueron a los labios ajenos, estaban tan cerca, estaban en su mundo, podían verse solo ellos dos, por un lado se dejó de escuchar las llantas de los automóviles que pasaban por aquella carretera.

— ¿Puedo? —preguntó el azabache que soltó el volante y dirigió su mano a la cintura del ajeno— Lo he anhelado desde que vimos película

TaeHyung sabía que estaba mal, no debía hacer eso, no debía darle permiso, pero sus palabras quedaban atoradas, su negatividad no podía salir, sus movimientos decían lo contrario, movió la cabeza en señal de aceptación.

Jungkook cerró los ojos al igual que el moreno, cerrando el poco espacio que impedían la unión de dos amantes, sus labios rozaron. Entonces sonó un teléfono, alarmando a ambos.

El de tez blanca suspiro, volviendo a su lugar, sacando su maldito celular de su bolsillo, TaeHyung abrió los ojos viendo por la ventana, era salvado.

— ¿Qué pasa mark? —preguntó apretando el volante con cierta fuerza decir que estaba molesto era poco— Estaré ahí en unos minutos, lo conocerás —sonrió ladino— Por cierto, Jackson te espera en la dirección que te enviaré ahora, no llegues tarde

Colgó, buscando aquella dirección y enviándola a su amigo pelo rubio, dejó su teléfono, miró al rubio que miraba atentamente por la ventana.

— ¿Qué observas?

TaeHyung giró hacia el sonido, encontrando el rostro de su amante otra vez cerca, pero está vez, fue un claxon que los hizo separarse, haciendo que Jungkook comenzará a conducir.

TaeHyung volvió agradecer, no sabría cómo reaccionar, ni que decir, o que pensar al tener al azabache enfrente, tan cerca, tan tentador. Miró al dueño de sus pensamientos, tragedias y tentaciones, se veía tan maldito, tan hermoso, tan varonil mientras conducía, estaba mal tener esos últimos pensamientos, no debía, solo estaba para quince días, hoy hacían una semana, faltaban otros ocho días y esto acabaría, el volvería a su vida normal y tranquila, sin la intervención de algo emocional.