único

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Mark contaba con una lista mental de razones por las cuales no le gusta caminar solo a su casa desde el instituto a altas horas de la noche. En primer lugar, por la poco iluminación, la mayoría de las calles contaban con sus faroles rotos y las calles estrechas lo hacían sentir acorralado. Para él, esto significaba que si algo iba a atacarlo, no lo vería venir.

En segundo lugar, el ambiente era demasiado misterioso. Solía escuchar ruidos que parecían haber salido de una película de terror o suspenso, como animales callejeros corriendo en las sombras, o el silbido de los vientos fríos que resuenan en la noche. Mentalmente, el estudiante se estremeció mientras caminaba a toda velocidad, lamentando no usar su chaleco de poliéster debajo de la chaqueta del uniforme, ahora le habría venido bien un poco de calor extra.

Y en útlimo, pero no menos importante, porque se encontraba seguro de que alguien lo estaba siguiendo.

Lo notó unos momentos atrás desde su visión periférica, parecía tratarse de un elegante coche negro que se movía y se detenía en la calle detrás de él para igualar su ritmo. Por supuesto, podría tratarse de una pura coincidencia y tal vez él era un poco paranoico, pero más vale prevenir que lamentar y Mark decidió confiar en su instinto, así que, cambió su rumbo que debería haber sido derecho por aquella misma calle.

Eligió una ruta oculta. Al mismo paso que estuvo manteniendo, se dirigió hasta la siguiente esquina, desviando su camino por ella y corrió lo más rápido que pudo por el callejón y entre las casas. Él no era un atleta, sus piernas se sentían como fuego y podían parar, pero continuó.

No había tiempo para mirar y ver si el auto todavía estaba detrás suyo, con suerte el conductor se habría hartado e ido, aunque casi con anhelo pensaba que si aquella persona hubiera estado realmente interesada en él, podría haber acelerado y alcanzarlo. Ciertamente no podía dejar atrás un auto, pero no le importó y corrió.

La mayoría de las casas estaban visiblemente cerradas y en oscuras, lo que indicaba que los residentes estaban dormidos, por lo que incluso si él pedía ayuda, no había nadie para escucharlo. Pasó de casa en casa y, para su alivio, vio un apartamento dúplex con la luz del porche del lado derecho encendida.

Un Mark normal y sensato probablemente pensaría que era una locura golpear la puerta de un extraño al azar a estas horas de la noche, y cuando la puerta finalmente fue abierta, revelando a un hombre de aspecto somnoliento mirándolo, el pensamiento tomo real fuerza en él, debería verse como un loco allí.

El hombre bostezó ruidosamente, se frotó los ojos y luego lo miró de arriba abajo

- Chico, ¿Estás perdido o algo así? -Preguntó el residente de la vivienda.

- "Él es guapo" -Mark pensó inmediatamente.

El extraño estaba vestido con nada más que unos pantalones de pijama a cuadros que colgaban peligrosamente bajo en sus caderas; su cabello ondulado era negro azabeche, largo hasta por debajo de sus orejas y se encontraba ligeramente despeinado, pero lo que más llamó su atención fueron las múltiples perforaciones que tenía, pircings, incluidos sobre su ceja izquierda.

Mark decidió que no solo era guarpo, ese hombre era sexy.

- ¿Me estás escuchando? -Dijo el hombre con una ceja levantada, y el estudiante Lee trató de controlarse.

- Um... -buscó las palabras correctas.- Esto probablemente sea extraño para usted, pero... estaba volviendo de la escuela a mi casa y... ¿Siento que me siguen? -Él mismo preguntó sin estar realmente seguro- Un auto... Me siento un poco asustado, pensé en pedir ayuda, pero todas las otras casas tienen sus luces apagadas, así que, vi la suya... y entonces yo ¿Puedo quedarme aquí un rato?

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⏰ Última actualización: May 28, 2020 ⏰

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Te acompaño a casa [YuMark] ©markyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora