Who's next? ~[Exo]~

27

Cuando Chanyeol estaba por decir algo, me pare de golpe

-Ya están cambiando de turno- señale, la joven se estaba despidiendo dejando a una señora de edad avanzada en el mostrador.

-Si, tienes razón, vamos- me sujeto de la mano y me llevo dentro.

Una vez ahí me di cuenta que olía a café, y que parecía un motel, deje a Chanyeol en la barra mientras yo miraba alrededor averiguando exactamente que era este lugar. Este lugar tenía por nombre Café Club y eran habitaciones cerrados donde los jóvenes venían a pasar el rato en el karaoke o simplemente viendo una película.

-Wow! Eres muy guapo- escuche a la señora decirle a Chanyeol, a lo que yo ignore, me acerqué a un estante lleno de objetos viejos -Estas seguro que eres estudiante universitario, me parece haberte visto anteriormente, pero no me acuerdo a donde.

Tome uno de esos objetos y lo dejé caer haciendo un gran ruido llamando la atención de la señora

-Sumimasen, sumimasen- me disculpe en japonés, me acerqué a Chanyeol y le hable en japonés, este me imito.

-Ya veo, no eres coreano, lo siento mucho- la señora le dio la llave de la habitación y nos dirigimos hasta ahí.

-¿Que es este lugar?- le pregunte viéndolo sería - si me haces algo, te golpearé puedes ser el presidente de este país, pero si intentas algo- suspire- solo digo... no tendrás herederos.

Este solo río en silencio. Entramos a una de estas habitaciones y era espaciosa, con un futon en la cama, un televisor, note micrófonos en una mesa, había varias películas.

-los universitarios lo usan para salir con los amigos a divertirse sin gastar mucho dinero y leí que es barato, increíblemente lo es- dijo quitándose los zapatos en la entrada, me regresé e imite su acción. Yo me fui a sentar enfrente de la mesa mientras el encendía la televisión.

Se había vuelto un momento algo incómodo, nadie decía nada. Así que me atreví hacer preguntas.

-¿Cuánto mides?- este volteo a verme, yo la miraba sería, eran puras dudas.

-1.85 - contestó sonriendo -¿y tú?

-Okay, ya no más preguntas- me di la vuelta, lo escuche acercarse

-Vamos, es el juego de las preguntas, no?- me hice la dormida, este trataba que abriera los ojos, hasta me sujeto de los cachetes- tierna- murmuró

Abrí los ojos de golpe y le mordí la mano.

-¿Pediste comida? Tengo hambre- este se sobaba el dedo y me miraba serio- 1,54, eso mido.

Me dejé caer sobre el suelo, mientras suspiraba.

-¿No te da miedo? Digo, ¿Que te atrapen?- mire el televisor encendido y regrese la vista a él

-A este punto, no hay castigo que me vayan a dar que no me han dado ya- este asintió e imito mi acción, se acostó a mi lado, podía sentir su mirada y yo no me iba a dejar así que le hice una cara burlona sacando la lengua y poniendo mis ojos en blancos.

Sonríe al escuchar su risa, me había puesto feliz.

Escuchamos a alguien tocar la puerta, era la señora dependiente trayendo varios platos de comida, con varios acompañamientos y varias botellas de soju. Yo me sorprendí al ver la mesa antes vacía, ahora llena de comida.