La alse al estilo princesa y con mí jutsu de teletrasportacion aparecimos en su habitación, ya que avia puesto un sello ay, la recosté en su cama y entré al baño de ella para buscar algo para limpiar sus heridas y curarlas, cuando encontré un botequin de primeros auxilios, volví con ella amy me senté a su lado y toque su frente
Tobirama : estas volando de fiebre - dije y le corri un mechón de pelo de su cara
Enpese a curar la herida que tenía en su frente y cuando termine le puse una curita y luego la de su brazo y lo vende, luego limpie sus cortes que tenía por atravesar el vidrio cuando termine guarde todo y volví a sentarme al lado de ella y me le quede mirando
Tobirama : nunca tuve tanto miedo de perder a alguien, como el que tuve al sentir que te perdería - dije acariciando su rostro
Por un momento me quede mirando su hermoso rostro asta que me dio sueño tenía el cuerpo demasiado cansado la mire por un rato y me levanté de la silla y me acosté a su lado tenía ganas de abrazarla pero no lo aria me bastaba con tenerla a mi lado
8 HORAS DESPUÉS
me desperté con un rayo de sol que entraba en la habitación y abri mis ojos con dificulta, cuando los abrí me di cuenta de que toda la habitación de amira tenía ventanas volví a sarar mis ojos y me acomode asi un costado, sentis una respiración tranquila serca de mi rostro y abrí mis ojos y me encuentre con su hermoso rostro y sonreí y lo acaricie un poco y suspire
Tobirama : creo que algo está pasando con migo y tiene mucho que ver con tigo - dije sonriendo y ella se movió y se acomo dándome la espalda yo me levanté y salí de su habitación y fui a la mia y me bañe y cambié
Baje a hacer el desayuno ya que aprendí a usar todo lo que había en esa cocina y enpese a hacer el desayuno y al rato escuché pasos en la escalera y sonreí
Amira : hola - dijo y yo la mire y me encanto la ropa que tenía puesta y su pelo atado
Lo que se puso
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Tobirama : hola te encuentres bien - dije
Amira : si vos estás bien - dijo y yo sonreí y agarre una tasa con café y me acerque a ella
Tobirama : gracias a que me salvaste - dije y le entregué la tasa y ella lo agarró y volvi a hacer lo que hacía
Amira : muchas gracias - dijo sentándose en la silla
