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Extraño muchacho, ¿Cómo te llamas?

Oh claro, otro nuevo día, empezando con aquello que tanto odia, que tanto repudia.

-Por favor... Ya... No más...

Está sentado en una silla, sin poder zafarse de las garras de aquella mujer, no quiere esto, no quiere continuar más. Pero ella sigue...

Tales movimientos que lo repugnan, tales gestos de ella que le provocan náuseas.

-No~ ¡aah~!

Su profesora abusa de él, ella es la razón de sus pesadillas, de sus tormentos.

Se sienta sobre sus piernas y se frota sobre su miembro, luego le baja la cremallera y se saca su ropa. Siempre en el mismo lugar:

Su despacho.

Todo inició con algo simple, una mirada. Lo llamaba para que le ayude en algo y lo observaba, Damon se sentía incómodo, no le gustaba para nada. Aumentó un día, robó su primer beso.

Empiezan los toqueteos, y el infierno con la primera vez de él.

Todo empeoró, todo fue un caos, todo fue una mierda. Los "encuentros" son más seguidos, no puede hablar. Es su profesora, y para colmo, su tutora.

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Entra a su salón, ya es algo tarde. Motivo por el cual es ahora el centro de atención de todos.

No mejora nada, lo pone nervioso, todos lo miran, todos hablarán.

Explotó todo cuando un chico más bajo que él entró rápido, detrás suyo y con la respiración agitada. Cabe recalcar que él estaba igual o peor.

Esto tomó por sorpresa a todos en el curso, más aún para los amigos de ambos.

Damon se sentó en su pupitre, ignorando todo, como siempre. O es lo que hace creer, porque su cabeza ahora es un manojo de pensamientos negativos hacia su persona.

No puede sumirse en su mundo especial, ya que ya han empezado las clases.

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Aquel extraño compañero se acercó a él, nervioso por lo que hace horas atrás había visto sin querer. Se sintió algo extraño, ya que no acostumbra a ver "La profesora cogiendo con su alumno". Algo que es imposible superar.

Retira de su cuerpo todo rastro de nerviosismo, intentando mostrarse serio.

-¿Por qué estabas teniendo sexo con la profesora? Perdón por el atrevimiento... -ya lo soltó, falta la respuesta pero...- Oh...

Damon escapó.

Ahí se dio cuenta este joven de lo malo que es ir directamente al grano.

Le siguió, se siente un poco mal de lo poco -o nada- delicado que fue.

-¡Lo siento! ¡No fue mi intención ser tan directo!

Save me from my Fantasy WorldDonde viven las historias. Descúbrelo ahora