Adaptada.
En honor a estas hermosas fechas les dejo este oneshot navideño...No vuelvas a decirme que hacer ¿De acuerdo? —gruñe, asiento con la cabeza y me subo a la cama, asustada. Aun podía sentir su aliento alcohólico cerca de mi cara—. Y no me molestes.
La puerta de nuestra habitación se cierra de un portazo cuando el sale. Mis ojos rápidamente se llenan de lágrimas y salen como grandes cascadas. Todo lo que quise llorar frente a él, lo estaba llorando ahora mismo. Nunca lloraba frente a Jorge, el odiaba más que nada que una mujer le llorara en la cara.
Cuando mis sollozos se han calmado, empiezo a limpiar todo el desastre que se causó en la habitación cuando estábamos peleando. Recojo el porta retratos que Jorge estrello contra el piso con cuidado, para después continuar con los pequeños pedazos de vidrio. Minutos después, continúo acomodando la cama y las almohadas que fueron esparcidas por toda la habitación.
Cuando ya he terminado, coloco el portarretratos sobre el mueble que se encuentra enseguida de la cama. Lo observo, ahora no tiene vidrio que proteja la fotografía. Suelto un suspiro al observar la sonrisa de Jorge mientras sostiene en el aire a mi pequeña Violetta, cuando solo tenía 3 años y a un lado, estoy yo, riéndome al observar a las dos personas más importantes de mi vida.
Sin saber qué hacer, más que estar encerrada en mi habitación, porque mi esposo me ha dicho que no lo moleste, me saco la ropa, dejándome solo en unas bragas. Me acerco al closet de Jorge y tomo una de sus camisas, la cual termino poniéndomela. Cubre lo suficiente para usarla como pijama.
Jorge era jodidamente enorme a mi lado, sus hombros eran tan anchos, tenía unos brazos bien formados con sus bíceps y su abdomen estaba jodidamente duro acompañado de un gran eight-pack que me encantaba tocar cuando hacíamos el amor. Sus piernas eran demasiado musculosas y largas.
Él es una gran bomba sexual, que con tan solo mirarte podría atraparte. Así como lo hizo conmigo. Aun así, más bien fueron sus acciones, su forma de ser, lo que me hizo enamorarme de él.
~
—¡Ve y calla a tu maldita mocosa! —escucho un fuerte grito sacarme de mis sueños, abro los ojos de golpe topándome con la mirada furiosa de mi esposo—. Tengo minutos gritándote desde abajo, tuve que venir hasta acá porque al parecer mi jodida mujer es sorda.
—Lo siento.. yo.. estaba dormida y.. —el azota su puño en la cama, está tratando de controlarse para no hacer una estupidez. Así que sin más, me levanto lo más rápido posible.
Corro descalza hasta la habitación de mi bebe, cuando entro, me encuentro a Violetta moviendo la cuna de Ale, mientras ella llora fuertemente. Le doy una sonrisa de agradecimiento a mi niña y tomo a Alejandra en mis brazos, dándole palmaditas en la espalda.
—Creo que tiene hambre mami —dice Violetta, asiento dándole la razón. Tomo la mano de Violetta y empiezo a caminar con ella hacia la cocina, cuando terminamos de bajar las escaleras, veo a Jorge apagar la televisión, me da una mirada de rabia y me pasa por un lado, al parecer, ya va a nuestra habitación.
Hago que Violetta tome a su hermana en los brazos, mientras preparo su biberón. Cuando ya está listo, subimos de nuevo a la habitación de mi bebe. Mientras le doy el biberón a Alejandra, Violetta me mira ansiosa y sé que quiere preguntarme algo.
—¿Pasa algo mi amor? —ella me mira apenada y empieza a mover sus pies en el suelo.
—Ya va ser navidad —susurra, empieza a remover sus manos sobre sus muslos y hago una mueca, se a lo que se refiere.
Cuando Ale queda totalmente dormida, de nuevo la pongo en su cuna. Ya solo tomaba biberón 3 veces al día, lo cual era demasiado favorable en la casa, ya que no estaba llorando cada tres horas.
—Vamos a tu habitación —le digo a Violetta, ella asiente y toma mi mano. Cuando entramos en la habitación me siento en su cama, la cual está ya removida de donde estuvo acostada antes. Violetta sube a un lado mío —. ¿Estás bien?
—Si —musita, quedamos en silencio y ella me mira totalmente avergonzada—. Mañana es noche buena—dice tristemente. Le sonrió, tratando de reconfortarla.
—Lo sé Vilu, voy a tratar de convencer a papá de hacer una cena —ella asiente y envuelve sus pequeños brazos alrededor de mi cintura. Beso su frente y tomo su rostro entre mis manos, para encontrarme con sus ojos llenos de lágrimas—. Oh no, no llores Violetta, por favor. Ya hemos hablado de esto, si papá y yo peleamos..
—No me gusta que ustedes discutan —me interrumpe y empieza a soltar pequeñas gotas de lágrimas—. Papi se pone muy feo contigo.. conmigo.. con Ale..
Niego con la cabeza, sin saber que decirle ¿Cómo explicarle a una niña de 5 años los problemas que tengo con su papá?
—Aunque papi este molesto, él te quiere mucho ¿De acuerdo? —ella asiente, pero su boca se llena de pucheros—. Te amo mi niña. No llores, verás que todo estará bien mañana y voy a convencer a papi de que hagamos algo para festejar la noche buena y navidad.
—Sip —Ella se aleja un poco de mí y me da un besito en la mejilla—. ¿Crees que Santa Claus me traiga lo que le pedí?
Hago una mueca, pero aun así le doy una sonrisa. Algo tenía que hacer para al menos darle algo de todo lo que ella había pedido. Aunque aun así me era imposible, Jorge me tenía prohibidas las salidas de casa.. o simplemente ir a comprar cualquier cosa. Me tenía completamente privada del dinero.
—Claro que sí.. —le sonrió—. Pero aun así, si no te trae todo, no importa ¿Verdad? Con estar juntos basta.
—Le pedí a Santa que ya no quería que papi estuviera molesto todo el tiempo.. ¿Crees que él me lo cumpla? Mis amigas dicen que Santa cumple todo.
—Mmm —le sonrió tristemente—. Espero que sí. En fin, es hora de que te duermas.
Ella se queja, pero termina metiéndose entre las cobijas, le doy un beso en la frente y salgo de su habitación.
Cuando entro a la mía, diviso a Jorge ya acostado en nuestra cama matrimonial, su espalda desnuda esta descubierta.. y lo único que cubre nuestro gran edredón es de su cintura hacia abajo. Suspiro, pensando cuanto tiempo tenemos sin hacer el amor.
Me meto en la cama, tapándome completamente con el edredón. Siento la mano tibia de Justin tomar mi vientre y arrastrarme hasta su cuerpo.
Esta era la única parte que amaba del día. Que a pesar de que peleábamos, en la noche siempre terminaba pegándome a él, para a continuación dormir abrazados, como si de verdad fuéramos una pareja normal.

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All I Want This Christmas Is You *Adaptada *One shoot
RomanceFamilia y problemas. Pero todo lo que necesito esta navidad es a ti