Nos hace falta dolor.Hace falta que la tierra se llene de agua y nos sumerja con ella.
Gritos palpables de angustia,
Y un hambre que se muera de sed.Hace falta caminar con los pies descalzos,
Con la desnudez a flor de piel.
Criticar al poderoso e ignorar el circo.Nos hace falta querer y no poder,
Trepar cien veces para ganar una vez.Escupir la falsa tristeza, ganar lugar en el tren.
Hacer que el nido arda, y construirlo otra vez.Nos hace falta socavar el cielo,
Preguntarnos un "¿ Por qué?"Purgar el plástico,
Plantar nuestros pies.Empolvar las armas,
Dejarlas romper.Suplicar por agua,
Llorarle al Edén.Comprender sin corromper.
Nos hace falta un arrebato.
Prendernos fuego, decir; "¿qué tal si te cambio?"Y sentir el dolor de los troncos, del nativo sin su lonco.
Que el sol derrita mi casa, como la de los osos.
Que mi plato dependa del más caprichoso.Que la piel se desgarre, y haga abrigos para el frío.
Quejarse del poder del río.Sentir que todo falta.
Que el trabajo se pierda, que de ti todo dependa.Y ver que sin él o ella no soy nadie,
Que la noche no sea mansa y sí que muerda.Que sin el verde no respiro,
Que sin su aire yo no vivo.Y que la vida es una cadena.
Que sin sus alas, el otro no vuela.
Que muchos se quedan varados en la carrera.Y es que, ¿Quién le ha llamado carrera?,
Si somos todos del mismo grano,
Los mismos astros: la misma esfera.No hacen falta los rezos,
Ni un Dios que pida un alto,
Y es que hace rato que me la sudan los santos.Santa es la palabra,
Virgen la empatía.
Nos hacen falta canciones de valentía.
Ensordecer las aguas por donde va la avaricia.Nos hace falta poesía, movernos en alegría.
Sorprender a la ignorancia, matar la codiciaEnterrar el ego y sembrar nuevas dichas,
Y que crezcan como ébanos hasta el fin de los días.