Capítulo 2

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Siéntese a mi lado, señorita Kiers.

Zhang Lancaster se quedó mirándola con intensidad por unos segundos que ella sintió como minutos y a continuación recobró la actitud de hombre negocios erigiendo la espalda y entrelazando sus largos dedos. Pudo ver cómo su cuerpo perdía parte de la tensión adquirida delante del problema de traducción, por la cual cosa se refirió a ella con una voz profesional que se sintió como un pozo de agua bendita para ella.

—Entiendo que habla japonés, ¿no es así, señorita...?— ella se quedó muda al notar que ese dios pedía su nombre completo. No sabía de dónde había sacado la fuerza para traducir y ahora Zhang Lancaster pedía su nombre con actitud demoledora para su corazón que estaba sufriendo lo que no había sufrido nunca.

Mentalizándome de que no podía hacer el ridículo diciendo su nombre, inhaló profundamente e hizo cara a su pavor de hablarle mirándole a esos ojos marrones que ya la habían hipnotizado.

—Aelin Kiers, señor.— gracias a todo no le había salido el tartamudeo que creía que le iba a salir. Estaba guardando las formas de la mejor manera que sabía, y eso pareció contentar al señor Lancaster, que con un asentimiento leve de cabeza le dio la bienvenida a la reunión.

Zhang Lancaster se levantó de su silla con un gesto potente y se abrochó la chaqueta del traje de tres piezas y, con delicadeza pero con firmeza, ubicó una silla justo a su lado, en el cabecero de la larga mesa, y con los ojos clavados en ella, le hizo una propuesta que ella sabía que no podría negarse a aceptar.

—Siéntese a mi lado, señorita Kiers.

En seguida, toda la sangre dejó su rostro y dejó de circular por su corazón, pues sentía que se le había parado. ¿Sentarse justo al lado de ese imponente hombre en una mesa tan importante? Se sentía como sentarse al lado del mismísimo rey. Sabía que no podría negarse, así que todavía sin sangre en su cuerpo y con pasos débiles, se dirigió a la silla que estaba siendo aguantada por él y nunca en su vida habría esperado que Zhang Lancaster, el presidente de la mayor indústria del mercado, tuviera el detalle de colocarle la silla correctamente delante de la mesa como un caballero.

Una vez él se sentó en la silla situada a su izquierda, ella notó como sus codos podían rozarse, sintiendo la dureza de los músculos de su brazo con el suyo más delgado. ¡Qué bien se sentía! Desde esa perspectiva, podía ver la comparación de tamaños que eran sus cuerpos, su cabeza llegaba a la altura del hombro de ese dios y su pecho desde ese ángulo era infinito. De reojo vio como la japonesa comenzaba a sacar todas sus cosas y se mentalizó en dejar sus pensamientos pecadores sobre ese hombre en un cajón apartado de la mesa de los mayores.

La mujer, Yuki Yamashiro, en japonés, dijo que ella había tenido que viajar hasta aquí en vez de su padre, pues este se encontraba mal de salud. En cuanto la mujer dejó de hablar, Zhang Lancaster inclinó su gran cuerpo hacia Aelin y ella sintió una sensación tan incómoda en su pecho que se obligó a pasarse, en un movimiento instintivo, la mano por el esternón. Giró su cabeza hacia él y, con voz alta y un intento de clara para los demás trabajadores de la sala, tradujo literalmente sus palabras.

—La señorita Yamashiro expresa una disculpa por venir ella en vez de su padre, como estaba planeado, ya que su padre se encuentra en japón enfermo.

En toda la oración, ella fue consciente de que el olor de Zhang Lancaster había vuelto a invadir sus fosas nasales, cosa que la distrajo un poco y la invitó a enterrar su nariz en su cuello, para seguir oliendo a limpio y a menta. Cuando ella estaba con la mirada fija en algún punto cercano a él, oliendo su perfume, Zhang Lancaster se giró levemente.

—Por favor, dígale que deseamos la recuperación de su padre, pero es de vital importancia que sea con él con quien hable.

Esa frase la tomó totalmente por sorpresa tanto a ella, que abrió los ojos como platos, como al resto de personal, que empezaron a mover la cabeza incómodamente y a destensar sus corbatas disimuladamente como signo de nerviosismo. ¿Cómo le iba a decir que necesitaban a su padre cuando había hecho un viaje tan largo para nada?

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⏰ Última actualización: Apr 06, 2020 ⏰

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Arctic Lake (Lancaster I)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora