Pecado [TaeGi ]

01.

-¡TaeHyung, Taehyung! Despierta.

Aquellas palabras despertaron a el castaño quién directamente observó su reloj y salió corriendo a el baño, eran las 9:27 de la mañana, TaeHyung había perdido 2 horas, estaría seguro que su padre lo mataría.

TaeHyung corrió lo más rápido que pudo a la capilla de su padre (Un pequeño edificio que se encontraba entre la carretera y el bosque) quien estaba dando la recurrente misa de siempre o eso creía TaeHyung, pues él nunca estaba interesado en ese tipo de cosas; caminó discretamente hacia la sala de limpieza tomando ciertos utensilios comenzando a limpiar la parte trasera de dicha capilla; suspiro pesado terminando de exprimir por última vez el trapo con el cual limpiaba el polvo de los estantes, sin notarlo ya había atardecido, su padre seguro ya estaba en casa preparando la cena, era tan común que nunca cruzaran una sola palabra en la capilla, era más ya una costumbre ignorarse en su estancia ahí.
El joven de orbes cafés no tenia decidió volver a casa temprano pero sin embargo tenía planeado subir a lo más alto de dicha capilla para observar el atardecer.
comenzó a ser frío pues la noche ya había caído TaeHyung decidido a bajar noto una figura extraña caer desde el cielo, ¿estaba en llamas? ¿Que era esa cosa? Esa extraña figura despertó la curiosidad del joven quien decidido bajo, tomó la linterna de su celular y corrió hacía a el bosque, el miedo invadió a el joven cuando observó que parte del bosque comenzaba a incendiarse, pero era inevitable volver, había encontrado la extraña figura tirada en el piso, ¿era una persona? Este tenía alas, alas de un color negro profundo, algunas de sus plumas estaban en llamas, el joven castaño no dudó mucho y caminó hacia él colocándose en su frente observando como el albino lo observaba escasamente.

-¿Quién eres tú? Déjame ayudarte- Mencionó TaeHyung
-Deberías huir.- respondió el chico quien estaba a sus pies.

Era extraño, ¿por que TaeHyung no había huido cuando noto esa figura caer? Por que se sentía tan atraído a el chico quien no pasaba ni los cinco minutos de conocerse.
TaeHyung tomó a el más bajo entre sus brazo y comenzó a caminar hacia la parte donde el fuego aún no exigía territorio, dejó el chico en el piso quién parecía sufrir quemaduras demasiado dolorosas en su cuerpo a el igual que sus alas, un fuerte aire resopló en el lugar apagando las llamas y dejando un montón de plumas negras, el castaño no se había dado cuenta, las alas del más pálido habían desaparecido.

-¡Tus alas!- TaeHyung dijo con asombro, pero no recibió respuesta.

Min volteó su mirada a el más alto con ira, acercándose a él con gran amenaza.

-Será mejor que te alejes de mí, humano insignificante-

TaeHyung quedó impactado, no por las palabras del contrario, si no por la lujuria que había en sus miradas inconscientes, el deseo del pecado, el deseo de romper las reglas sin importar el por qué.

-Soy... TaeHyung-

Min guardo silencio y noto las pisadas de otras personas curiosas a observar qué sucedía, sin mencionar nada alzó sus alas dañadas por el fuego y huyó. TaeHyung terminó rodeado de gente vecina a el bosque quien comenzó a interrogarlo, el no tenía otra escapatoria que inventar alguna historia en donde se apresuraba a investigar qué era lo que sucedía.

Llego a casa confuso, observando a su padre quién le miraba algo furioso, TaeHyung no pudo producir ninguna palabra cuando su padre comenzó a hablar.

-Será mejor que no estés quedando con nadie- colocó la cena de TaeHyung en su lugar -Meterías a tu padre en problemas Tae.-

-Lo siento padre, no volverá a pasar- Se colocó en su silla y tomó el tenedor para dar un bocado a su comida cuando nuevamente su padre volvió a hablarle.

-hay una hermosa chica que quiere conocerte
-¿conocerme?
-Sí, conocerte.

La conversación acabó cuando TaeHyung observó a su padre algo decepcionado, dejando la cena a un lado para encaminarse a su habitación y observar la intensa noche que se dejaba observar por su ventana.

...

Los rayos del sol pegaron en la cara del joven quien directamente volvió a observar el reloj y soltó un suspiro de alivio levantándose y vistiendo las primeras fachas que encontraría en su closet, era nuevamente domingo, una semana entera había pasado desde que se había encontrado con el joven del bosque, nunca encontró una explicación a eso y abandonó sus pensamientos para salir de casa y caminar hacia la capilla de su padre.

Los pensamientos nuevamente lo invadieron, solo recordaba a el joven de cabellos blancos y piel demasiado pálida, parecía un muñeco de porcelana, aunque no pudo verlo bien directamente a los ojos recordaba lo profundos qué eran.

-¡Ten cuidado!- Pronunció una voz femenina quien segundos tarde caería a el piso
-Ah... ¡lo lamento!- respondió el más alto ayudando a levantarla y pidiendo disculpas sin dejar hablar a la más joven

TaeHyung salió corriendo a la capilla, era la primera vez que conversaba con una chica después de tantos años. Tomó con torpeza la cubeta con agua y camino a el patio trasero de la capilla para tirar el agua sucia cuando se acercó su padre.

-Procura llegar temprano-

El joven solo asintió y tiró el agua a el pasto cuando levantó la vista fue directamente a observar el frente mirando a su padre irse en el coche, dando un suspiro de alivio.

TaeHyung tomó la cubeta vacía y entró a la capilla dirigiéndose a el centro de esta donde estaban las bancas observando el horizonte, fue interrumpido de sus pensamientos cuando un gran estruendo se escuchó detrás suya, el joven no dudó en voltear exaltándose más a el observar aquella figura con alas que un par de días atrás había ayudado.

-Kim TaeHyung.-

Pronunció el joven pálido, quién fue acercándose a el castaño con gran tranquilidad, que asustaba a el joven que se encontraba en el piso de una cierta manera incomprendida...