Your Love

Inspirado en el video , espero les guste...

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Castiel estaba nuevamente corriendo para llegar al trabajo y su jefa lo iba a matar. La verdad es que Castiel no sabía por qué, pero sentía que su presencia la molestaba. Y con su reciente mudanza había tenido que pedir muchos permisos, lo que solo parecía molestarla aún más.

Suspirando le dio una última mirada al desastre en su cocina, antes de darse la vuelta y salir de su departamento. Había llamado a la persona encargada del mantenimiento del edificio para informar sobre el problema con las tuberías, pero hasta ahora no habían mandado al gasfitero o a cualquier otra persona que se encargara de solucionar el problema.

Sin prestar mucha atención a su entorno en su prisa, casi se choca contra alguien. Castiel se detuvo abruptamente y levanto la vista para ser atrapado por dos hermosas esmeraldas. El sonido del metal chocando lo saco de su ensoñación. Frente a él estaba un hombre vestido con jeans desgastados y un polo muy viejo, y por lo que se veía estaba arreglando algo. Oh, debe ser el de mantenimiento.

Castiel se aclaro la garganta antes de dirigiese al hermoso hombre -Buenos días-

-Buenos días- el extraño respondió con una sonrisa.

-Me mude hace poco al departamento 55 K-

-Oh, esta bien-

- ¿Cuándo podrías ir a mi apartamento? - pregunto Castiel, mirando su reloj.

- ¿Qué? - respondió el extraño desconcertado.

-Sí, llamé anteayer y me dijeron que enviarían a alguien para arreglar la tubería. Te agradecería si pudiera ser lo más pronto posible- Castiel soltó un suspiró de resignación mientras volvía a mirar su reloj. Naomi definitivamente lo iba a matar.

- ¿Eh? Ohh- El hombre sonrió y Castiel quedo asombrado por lo hermoso de su sonrisa -Pasaré esta tarde por tu departamento si te parece bien-

Castiel estaba agradecido -Estaría perfecto...-

-Dean-

-Estaría perfecto Dean. Soy Castiel y estoy retrasado, nos vemos luego- saludó Castiel.

El extraño, no, Dean sonrió juguetonamente -Definitivamente nos veremos luego Cas- dijo acompañado de un ola.

***

Castiel llegó a su departamento después de un día estresante en la oficina. Naomi lo había regañado por llegar diez minutos tarde. Si no le gustara tanto su trabajo, la habría mandado por un tubo. Pero la biblioteca era su lugar especial, le encantaban los libros y como podía ayudar a las personas a encontrar los libros que necesitaban.

Castiel miró el reloj, eran las cinco y media. No podía darse un ducha debido al problema que tenía... lo que lo hizo pensar en el hermoso hombre que vendría a ayudarlo. No habían quedado en una hora en especifico y Castiel esperó que el hombre no haya venido mientras él no estaba.

Con un suspiro empezó a aflojar su corbata cuando el timbre sonó. Esperando que fuera Dean, Castiel se miró en el espejo, no es que quisiera verse bien para el hombre... solo quería causar una buena impresión. Abrió la puerta y definitivamente era Dean, el hombre se veía aun mejor que en la mañana.

-Hola Cas ¿Qué tal? - saludó Dean.

Castiel parpadeo y volvió a la realidad, mientras se sonrojaba, esperaba que Dean no se hubiera dado cuenta de que lo estaba mirando -Bien y ¿tú? -

-Bien también, venía a...- Dean levantó su caja de herramientas.

-Oh si, lo siento, pasa por favor- Castiel se sonrojó aún más si es posible. Intentando tratar de actuar normal, guió a Dean hacia el baño sin mirarlo- No sé lo que está mal con mi terma, el agua no se calienta, aunque este encendida-