Las noches de abril caen repentinamente una tras otra, y es precisamente en esos días en los que yo puedo olvidar todas las reglas para vivir como una persona natural, olvidarme de mis sentidos, despojarme de mi físico y dejar a mi alma volar.
Usualmente dentro como todos mis compañeros que laborábamos había que acostumbrarse al ruido que producen las máquinas aún sin saber lo que producían; también se sabía que cuando la materia prima se acabase esas máquinas lo detectaban y media hora después dejaban de sonar haciendo que el silencio se opaque por las conversaciones que entablamos los amigos.
Una noche muy estrellada no menos bonita que las demás atrajo mi curiosidad a una hora muy famosa en mis pupilas: 5:00 am era un momento especial que ya lo había descubierto en los últimos 3 días y no era una coincidencia encontrarlo; hablo del espectáculo en el cielo ¡El amor por este descubrimiento era tan grande que necesitaba compartirlo! Así que antes de salir, el cuarto día, mientras todo estaba oscuro fui corriendo de mi puesto tumbando torpemente unas cajas y doblando la esquina tenía enfrente una escalera que presuroso la subí, a mi derecha una fila de mujeres del equipo de selección y filtro que pasé pidiendo permiso, al final subí por una especie de escalera de caracol y llamé a Roy desde la puerta.
- ¿Te acuerdas que te iba a presentar a la brillante Betel?
-Sí. Llevas toda la temporada hablando de esa chica que siempre la defines de brillante y hermosa ¿Qué tan cierto puede ser? ¿Inteligente y bonita? Quiero verla, debe ser una de control de calidad.
-Entonces no pierdas tiempo y vamos afuera- Lo sabía ¡vamos! (respondió)El producto pasaba por las fajas en manos de las mujeres y se llenaban pronto en las cajas, se embolsaban y... se atoraban en la máquina que los amarraba ¡porque no estaba carlos! Lo mismo en el departamento de ventas, nadie dirigía que producto no iba a pasar por estar descompuesto ¡porque no estaba Roy!
-Ahora dime ¿Acaso no es hermosa?
-Sí, claro ¿Dónde está? - me vio mirando el cielo asombrado.
- Arriba, es una de ese cuadrante - pregunté - ¿A dónde vas? Betelgeuse es una estrella ¿Qué no te gusta?
-Sí. Pero no es el momento, en 2 horas nos iremos - Lo seguí al camino de regreso.
-GASPAR OHLMED.
- ¿Gaspar qué?
-Es el nombre del cuadrante que forman las estrellas en el cielo, hoy: 19 de abril del 2020, se llama así según el investigador más admirable de este siglo Ever Ohlmed ¿sabes por qué?
-No.
-Se dice que Gaspar no dio una buena ofrenda al niño Jesús: Quarzo, porque él se dedicaba a su empresa de la venta de Quarzo ¡algo miserable! Excusándose que era para cumplir su sueño de viajar a las pirámides de Lima con lo que ganaba.
- ¿Y que con eso?
-Fue maldecido por dios; fue encontrado muerto en su cama con un pedazo de cuarzo en sus manos que brillaba solo los 19 de cada mes, fecha que se supone que nació Jesús y cuando se presentaba ese cuadrante en el cielo; otro día no brillaba. Ahora imagínate la causa de su muerte.
-Carlos, no tengo la menor idea ¿Qué tratas de decir?
-Murió de vejez, muerte natural - sorprendido dijo -¿No que murió joven en cama?
-Ever Ohlmed en su último libro "Rito SSICCHU" mencionó en su última investigación que Gaspar murió de SSICCHU, una palabra en aimara que significa "Maldición del sueño". Gaspar estuvo en su cama toda su vida atrapado en un sueño.
- Aimara, es uno de los idiomas de nuestra región. ¿Cómo es posible que ese extranjero lo conociera?
- ¡Fácil! Porque según sus cálculos, el siguiente lugar donde será visible el cuadrante Gaspar en el cielo, es - mirando a Roy - Es en nuestras tierras, hoy: 19 de abril. Lo mencionó como una guía para quien lo leyera.
- ¡Estás enfermo! Solo lo dices para asustarme.
-Lo mejor vine ahora. Resulta que todas las personas que ven el cuadrante portando un pedazo de Quarzo, serán maldecidas por el rito de Ssicchu.
-Ya me lo decía. Lastimosamente tú no tienes ningún pedazo de Quarzo, ya que en esta empresa te despedirían por usar cosas de valor.
-Yo no mi amigo - saqué un collar y se lo lancé - pero tu sí.Las 200 personas de nuestra zona nos encontraron peleando afuera, mientras la luz del sol se asomaba como si fuera uno de los obreros chismosos saliendo de planta, abriendo una de las puertas con ambas manos para ver como Roy rompía mi nariz, en verdad no me importaba, mi curiosidad estaba al 100% quería saber qué ocurriría con él, si la maldición se apoderaba de él. Así era, había estado investigando sobre este fenómeno y estaba muy entusiasmado por los resultados que orgullosamente había causado. Un poco raro de mi parte el estar pensando en esto, las suposiciones, mientras me ensangrentaba tanto con su puño como con los rayos de la mañana; como empezó esto en la oscuridad, sentía que habíamos estado peleando todo un día. Poco después volvió Roy para disculparse conmigo, desgraciadamente yo sabía cual era su intención así que no iba a dar mi brazo a torcer, es más iba a continuar alucinando con su futuro sufrimiento ¿las maldiciones eran reales? No, por nada le diría como evitar la maldición; por lo que como ya presentía me volvió a partir la nariz, Además solo suponía saber como librarme de ello y que no era algo seguro.
Cuando tenía 11 años ya podía gozar en mi historia de vida con un secuestro, un intento de suicidio, discriminación, pérdidas familiares y un accidente en el que se me rompió la cabeza. Para poder recomponer mi camino que no estaba llevándome a ningún lado, me dediqué mucho al estudio en el que destaqué con todos los honores, y satisfacerme de un buen banco de conocimientos generales. Me he declarado abiertamente ateo, aunque nadie en mi familia lo respete de la misma forma que yo a ellos, pero no voy a olvidar el día en el que ...
Era un alumno del cuarto grado de primaria que como todos nos encantaba jugar futbol a la hora de salida. Puedo recordar los nombres de mis ex compañeros con los que jugaba. Uno de esos días se nos obligó no quedarnos pasadas las horas de estudio porque todas las familias del barrio cumplirían un deber de quedarse en casa para ser censadas; sinceramente no me gustaba obedecer por eso con un grupo pequeño nos escondimos en la escuela para poder continuar con nuestro partido. Las horas no tenían ninguna culpa porque esa es su naturaleza, pero habían pasado llevándose a hurtadillas el sol y las nubes, fue muy tarde para cuando me di cuenta ¡ya anocheció! ¡wao! En ese momento recuerdo lo ingenuo que fui - dije entristecido "algo me dice que Jordy hace una hora que se fue a su casa y no me aviso. Aunque puede que siga escondido y creo que es mejor buscarlo" Me pasaba de salón en salón, mirando por las ventanas de atrás porque las puertas estaban aseguradas con llave, eso cualquiera lo sabía; Hasta los guardias se habían ido a su casa. Me fui al fondo del colegio para ir bajando y buscándolo, si no le encontraba me iría ¡Cuanta inocencia la mía, lo puedo recordar hasta con cólera y lágrimas! Bajé desgraciadamente con toda la paciencia del mundo mirando de izquierda a derecha por todas las ventanas de todos los salones, solo por mi mente pasaba "¿Qué rayos habrá en ese baño de al fondo que nadie he visto entrar y que siempre está atrancado? Quiero saberlo, quisiera saber" El salón de tercero estaba vacío pero cuando iba a ver a la izquierda me detuve y vi que en aula de quinto que queda cerca del primer patio cerca de la segunda salida que desde mi punto de vista solo se veía las ventanas porque las puertas están volteando, vi entre las varillas de metal que dentro del salón había un hombre que por su forma de vestir y sus herramientas además de sus movimientos era un albañil, de unos 40 años, recogiendo sus herramientas para hacer quien sabe que ¡por dios, las puertas estaban aseguradas con llave algo yo mismo verifique porque hace menos de 2 minutos que pasé por ahí! Vuelvo a decir ¡que inocente era! Me acerqué corriendo para poner mi cara contra la ventana y ver lo que hacía el señor asombrado de cómo había entrado "¿Qué hace?" le pregunté. No me respondió, al instante también se sorprendió al verme mientras estaba de pie con las manos en el suelo recogiendo una comba se apresuró 100 veces más a levantarla cuando me vio y en cuestión de segundos se acercó corriendo de lado y me arrojó su herramienta con esa fuerza que caracteriza a señores de su edad, corpulento y con panza, con barba blanca y rala, ojos y ojeras hundidas. Me quedé traumado y salí asustado volteando la esquina, mientras corría con mis pequeños pies dando la espalda a la puerta de ese salón me sorprendió oír que se abrieron de par de par y el viejo salió con presura ya había volteado yo mismo para rectificarlo, pero mis ojos no daban crédito a lo que veían, él estaba lanzándome cemento en polvo que me baño en segundos. Hui traumado trepando las paredes con una habilidad impropia de mí. No recuerdo como fue que llegué a casa y si es que disimulé que los vecinos me hayan visto en ese estado. Desperté en cama, todo estaba oscuro. Pronto sentía la presencia de más personas en la habitación, en la esquina estaba mamá y el pastor de la iglesia, Rogelio, quien sostenía un candelabro en el que se quemaba eucalipto y su humo se dispersaba por las 4 esquinas mientras repetían unas palabras en aimara. Nunca me explicaron que era esa especie de ritual.
Al parecer no había sucedido nada con la maldición de Gaspar en Roy, pero él nunca más me volvería a hablar - solté una risa - porque según me contaron no ha vuelto a planta hace 1 hora cuando se fue al almacén ¿Qué pasará con él?
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EL PRIMER SECRETO
Paranormal¿Hasta donde llega tu curiosidad fantástica? Es el primer capítulo de una novela que trata de unas anécdotas personales que poco a poco el protagonista comienza a caer sutilmente en paranoia por sus sueños y lo que supone que significan. Luego de pa...