Mi otra inspiración

U.A Primer dia

Llegaría el primer día de clases de la clase de soporte, aunque a cierta persona se le dificulto gracias a su nerviosismo que ya no mostraba como era de costumbre, solo lo mostraba cuando ocurrían ocaciones especiales como es el asistir a la UA. Inko llamaría a Izuku para que este vaya a desayunar, pero se percataría del estado en que estaba su hijo

-Izuku! que diablos es esa cara?? Y porque esas ojeras?? Acaso no dormiste?- Preguntaba un poco preocupada la madre al ver el estado en que estaba su hijo

-No pude dormir pensando en como seria la clase, que clase de desafíos tendremos, las mejoras que tendremos que hacer a los héroes...- Decía sin para Izuku sin darse cuenta de que estaba hablando solo porque la madre fue a preparar mas café para que pueda ir un poco mas despierto a la clase

-Cielos Izuku, como has cambiado- se reía la madre

-Como?- preguntaba curioso Izuku

-Digo, antes eras mas tímido, tenias un cuerpo un poco débil, e incluso aun me siento culpable de... tu don... -decía mirando hacia abajo- pero pude notar como te esforzabas y te trazabas nuevas metas para poder competir e ir también a la UA, el lugar al que mas querías asistir. Solo quiero que sepas que siempre estaré orgullosa de vos- termino diciendo Inko con una sonrisa que se parecía demasiado a la de Midoriya

-Mamá... gracias, prometo que no te defraudare- respondiendo Izuku a su madre para luego darle un abrazo para poder irse.

Su madre advierte a Izuku que todavía no se había terminado el desayuno- Se nota que no descanso mucho jajaja- decía en su cabeza Inko.
Después de unos minutos Inko pudo notar como una chica de pelo rosa estaba en la puerta de su casa

-Así que ya vino esa chica, y lo mejor de todo es que también parece que no ha dormido nada, es que acaso todos los que estudian la clase de soporte no duermen nada y van a todos lados con ojeras???- Decía en su cabeza con una gota en la cabeza

-Hijo, esta tu amiga la de pelo rosa esperando en la puerta, por cierto como se llama?-Preguntaba Inko

-Se llama Hatsume Mei mamá- respondía el peliverde- Bueno me voy!- mientras se estaba yendo escucha lo siguiente de su madre

-Okey hijo, aunque un día estaría bien que la invites a comer a casa, por lo que veo viene muy seguido a esperarte en la puerta para que después se vayan juntos! La gente podría confundirlos como una pajera jajaja hasta luego- terminaba diciendo la madre haciendo que Izuku se ponga rojo como un tomate

Al salir de su casa Midoriya nota como Hatsume estaba en la misma condición que el, con unas increíbles ojeras, pero la mas sorprendida fue Hatsume porque nunca había visto a Midoriya con ojeras y normalmente era Midoriya quien le decía a Hatsume que duerma para que su cuerpo descanse y no tenga esas ojeras.

-Vaya Midoriya, acaso tu también te quedaste sin dormir porque tenias que construir un bebe? Eso no esperaba de vos jajajaja- decía Hatsume con mucha felicidad

-Mas o menos, es verdad que no pude dormir porque estaba muy ansioso de que llegara este día y de paso aproveche para poder mejorar mi pulsera, que creo que la empezare a llevar a todos lados por si ocurre algo, así que podríamos decir que en parte fue por mi entusiasmo por empezar esto y por el otro por el invento- decía Midoriya mientras estaba con un café.

-Creo que quedaría mejor que les digas bebes- decía Mei

-Ya te dije que me avergüenza decirlo- decía con un poco de rubor en la cara

-Pero mientras estemos nosotros diles bebes! O sino tendré que usarte de nuevo para nuevos bebes que te están esperando- decía Mei con una cara que daba un poco de miedo