Capítulo Único.

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N/A: Definitivamente no es mi mejor one shot. Lo escribí hace un par de años y nunca lo publiqué pero acabo de encontrarlo entre mis borradores y la verdad me parecio gracioso. Espero que a ustedes también les cause simpatía.

N/A2: No intenten buscarle sentido a esto, no tiene una finalidad. Digamos que solo es un momento random y ya xD.

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Todo era risas y alegrías para Lucy y Natsu ese día, pues se la habían pasado mejor que nunca en sus vidas; realizaron una misión corta pero al final de cuentas emocionante, habían comido deliciosos manjares como recompensa y habían llegado agotados al gremio, pero con una satisfacción enorme.

—Bueno, fue divertido, no? Estoy más agotado que de costumbre...

—Demasiado... estoy muy cansada— Cogió una bocanada de aire para despues soltarlo. Sonrió de oreja a oreja. —Iré a mi casa a bañarme, nos vemos mañana. Ah, por cierto ¡Espero que te diviertas en tu " noche de 'machos' "

Lucy salió de Fairy Tail con las piernas adoloridas, parecía que no podía mantenerse de pie, se tambaleaban, estaba sumamente agotada.

Llegó a su hogar, entrando cautelosamente en él para que aquella vieja no saliera a cobrarle la renta a esas horas, ya que estaba anocheciento cada vez más. Subió las escaleras con cuidado y abrió la puerta de su habitación.

Al entrar notó que todo estaba a la perfección, no había necesidad de limpiar ese día, por lo que tenía la oportunidad de bañarse e inmediatamente echarse a la cama para poder recuperar sus energías perdidas.

Pero en serio, sentía que ese dolor corporal iba incrementandose a cada paso que daba.

Entro en su bañera una vez que se había despojado de sus ropajes. Un aroma a lavandas inundaba por completo aquel pequeño cuarto de aseo personal, en especial cuando Lucy pudó sentir la espuma del jabón con dichoso y fragante olor rozar con su cuerpo desnudo, que estaba un poco cálido debido al sudor que había estado saliendo de cada uno de sus poros durante todo el día.

Sus ojos pesaban pero en vez de comenzar a sentir tranquilidad, había una pequeña punzada en su cabeza, una especie de dolor extraño estaba comenzando a atacarla, y el agua le producía escalofríos.

Al salir de bañarse, se colocó su pijama común: unos shorts blancos con una blusa de tirantes, pero inmediatamente la intercambio por una de manga larga y pantalón, ya que era inexplicable el hecho de que había comenzado a sentir mucho frío.

—Tal vez tengo fiebre...— Soltó un pesado suspiro.

Salió del baño con un débil paso, pero se quedó absorta cuando llegó a su habitación para poder acostarse tranquilamente. Algo la sacó de quició con tan solo enfocar su vista y el dolor de cabeza se incrementó cuando sus oídos le permitieron escuchar aquellos repentinos saludos...

—Yo, Luce!

—¡Buenas Lucy-San! ¡Tiempo sin verte! ¿Verdad Rogue?

—Por supuesto, me da gusto verte de nuevo, Lucy.

—Te veo todos los días en el gremio así que no me interesa...

—Vamos Gajeel, trata de ser un poco más amable

—Silencio princeso

—Lucy, he tomado el helado que había en tu nevera

Noche de Machos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora