capitulo 1

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Tsunade

Al ver a Naruto salir de la sala note un aura triste así que después de ayudar a Kakashi y al estudiante, Lee. Me encamine hacia afuera del lugar médico.

Me puse en la punta del edificio y observé a todos lados tratando de encontrar a aquel chico, el cual logré ver a lo lejos entre los árboles.

Brinque de un edificio a otro hasta llegar al bosque y al hacerlo me acerque de forma silenciosa.

- hola

Naruto

Al escuchar aquello me asusté callendo de cabeza hacia el suelo

- vieja tonta!!

Ella se rió con gracia callendo de pie junto a mi

- discúlpame Naruto. Mi intención no era asustarte.

Fruncir mi rostro con algo de molestia después de levantarme.

- ¿Que necesita Tsunade... O debería decir Hokage?

Dije despreocupado colocando una de mis manos detrás de mi cabeza acompañado de una risa despreocupada y sonora.

- ¡Deja de fingir! - hablo ella con molestia haciéndome callar - no necesito examinarte para saber que tienes el corazón roto.

- ¿de que habla? - dije con una risa nerviosa.

- ví cómo viste a Sakura y Sasuke hace un rato.

- ó, ellos - dije con un leve suspiro - a usted no le debe de importa eso.

- claro que sí - exclamo a modo de regaño - eres alguien importante para mi.

Aquellas palabras me sorprieron y sonrojaron en gran medida

- de que diablos habla! - dije con molestia con la intención de alejárme del lugar pero una kunai me dejó atrapado a un árbol.

- oiga! Suéltame! - dije tratando de quitar el kunai del árbol la cuál estaba en atrapando mi suéter de la parte de mi espalda alta.

- no lo haré

- ¡¿Que?! - reclamé pero ella rio levemente - Deje de burlarse!

- no lo hago. Jamás me burlaría de ti otra vez.

Dijo esto ahora a un costado mío, justo en mi oreja derecha, lo cual me estremeció.

- ¡¿que hace?! - dije intranquilo ya que empezó a olfatear mi cuello - vieja Tsunade, para.

- hueles a qué serás un gran hombre - Esto me confundio en gran medida y ella se dió cuenta - y un gran Hokage - finalizó alejándose de mi cuello

- ¿Ya me vas a soltar? - dije tratando de no verla a los ojos

- no

- ¡¿Que?!

Antes de poder reclamar ella clavo la kunai más profundo en el árbol con ayuda de su chakra.

- ¡Sueltame vieja Tsunade!

- no hasta que me dejes de llamar así, pequeño testarudo.

Ella se retiró del lugar saltando entre las hojas con rapidez y la noche llegó más pronto de lo que esperada.

- vieja tonta - musite antes de caer dormido colgado aún en el árbol.

Ya veo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora