¿Por que me hiciste esto?

Parte 3♥

Pasaron Ellington y su padre. Me tocaba a mi, me ofrecí a quedarme la noche, ya que no tenia que hacer nada. Ellos se fueron y me repitieron unas cien veces que la cuidara y que cualquier cosa que llamara. Yo asentía, ya sabia todo eso, y sabia mucho mas. Llegue a la puerta de la habitación. Me costo horrores abrir esa puerta, pero lo hice.

-Hola _________! -dije al entrar.

-¿Y tu eres....? -me asuste, supuesta mente, no había perdido memoria.

-Rocky ¿No me recuerdas? -dije acercándome a ella.

-No, ¿Tu eres....? -me insistió.

-Un amigo de tu hermano,  de la familia -me senté en el típico sillón incomodo de los hospitales.

-Ahhhh. Claro... eres uno de los Lynch -sonrió- Están, Ross, Rydel, Riker, Ryland y vos... te juro que no me acordaba -se acomodo en la cama.

-Ahhh -baje la cabeza.

-¡Mentira bobo! -dijo golpeándome un hombro- ¿Como no me voy a acordar de vos? -sonreía.

-¡Hey! me asustaste tontina -nunca le había dicho así pero por alguna razón lo hice.

Rió- si de alguien no me olvido es de vos-

Agradecí al que me estuviera llamando porque no sabia que contestarle. Atendí, era mi mama gritando donde estaba, le explique y me dijo que mañana a primera hora debería irme a preparar las valijas para irme de la ciudad, del país, del continente... El Lunes, ya me tendría que ir a emprender una nueva vida con mis hermanos.

-_________ -dije tocando mi cabello- te tengo que decir algo-

-¿Que pasa Rocoso? -¿Rocoso? ¿Me dijo Rocoso? sonreí pero después volví a mi cara neutral- me voy- 

-¿QUE? -dijo sorprendida.-

-Me voy del continente... me voy de américa... -me tire sobre el sillón.

-¿Por que? ¿Que paso? -me decía cada dos segundos.

-Trabajo de mi padre... -le repetía.

Pero parecía que ninguno nos queríamos escuchar. Que no queríamos aceptar que nos separarían. Va, no nos separarían, porque no estábamos juntos, pero algo me decía que si. La quería besar... pero no podía, no podía -me repetía a mi mismo- ¿Que clase de hombre besa una mujer y al día siguiente se va? YO NO ERA DE ESA CLASE. Le tome la mano, parecía que nos diéramos fuerzas, porque ninguno se animaba a llorar ni a hablar. Cuando ella quedo dormida tome mi celular y le saque una foto a nuestras manos unidas, iba a extrañar eso...