Mentir, Engañar.

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El estadounidense estaba pintando un cuadro, le gustaba dibujar y pintar en un estilo acuarela, este vio al ruso pasar.

–¿a donde vas? –pregunto el rubio.

–voy a...–no tenía excusas buenas pero, no le hiba a decir que iría a la casa de China.– voy a una pequeña reunión con Ucrania.

El ruso no dijo nada más y solo se fue dejando solo al de cincuenta estrellas.

[•••]

–ya se hizo muy noche...– se dijo a si mismo el rubio

Este optó por llamar a Ucrania, quería saber si algo malo había pasado.
Sabía que Rusia no le contestaría a altas horas de la noche y tampoco queria molestarlo, le daba temor.

El ucraniano respondió.

–¿Америка? (América) ¿Que sucede?– respondía el ucraniano con tranquilidad mientras comía un pan con Nutella .

–¿Esta contigo Rusia?– pregunto

–No ¿por qué? –respondio intrigado

–es que me dijo que iría a una reunión contigo...

–¿Reunión? No, no tuvimos ninguna reunión, es más, no me habla desde hace un mes. –respondio

–oh...bueno, gracias igualmente por responder la llamada... –colgo

El estadounidense colgó, estaba mal, el ruso le mintió.

Unas horas más tarde el ruso llegó.

–¡Америка! ¡АМЕРИКА! (¡América! ¡AMÉRICA!) –grito el ruso pero el rubio no respondía.

El rubio era bueno en descubrir que sucedía y claro, se enteró que Rusia lo engañaba con China.

–no me hables mentiroso –dijo secamente– eres un mentiroso y me engañaste, eres un maldito... –de verdad que estaba muy enojado y detrás de esos lentes oscuros habían dos ojos apunto de desbordarse en lágrimas.

El estadounidense salió de la casa, no quería ver al ruso ya, no le importo y se fue al parque más cercano y ahí durmió, le importaba muy poco si le robaban...

[••••]

Al día siguiente fue ah casa del canadiense y el mexicano, y tocó la puerta a lo que el mexicano abrió.

–¿USA? ¿Que haces aquí? –pregunto confundido el de águila. –haber, pásate gringo, ahorita no está Canadá, fue a comprar.

El mexicano paso al estadounidense y le dio atole que había hecho y claro, el rubio lo acepto, de verdad tenía hambre, este le contó al mexicano lo que había pasado con Rusia.

–hay gringo...– fue lo único que dijo.

En ese momento llegó Canadá.

–¿Brother?...

–Canada... ¿Me puedo quedar con ustedes?...please...

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PTM me siento mal por el gringo YnY

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