I sekai no bōken

Capítulo 1: ¡Bienvenidos al otro mundo!

-...¿Dónde...dónde mierda estoy...?-Dijo un chico de pelo negro algo confundido.

-Oh, despertaste, mejor para mi, menos tiempo tendré que estar contigo.Seré claro, has muerto y estas en el purgatorio.-Añadió un chico de pelo blanco que parecía estar harto de su trabajo.

-¿Cómo que he muerto? Lo último que recuerdo es que estaba saliendo de mi casa. ¿Cómo carajo he muerto?-Preguntó el chico de pelo negro.

-Para ser sincero cuando me enteré de que había sucedido, no me pude aguantar las ganas de reir, te resbalaste por las escaleras del porche de tu casa y te diste un golpe en la cabeza que te dejó inconsciente, empujaste a un obrero que estaba arreglando la calle donde vivías, nada más caiste al suelo te dió una paliza por haberle empujado, en esta recibiste varios golpes en la cabeza y eso llevó a tu muerte.-Le respondió el chico de pelo blanco.

El chaval de pelo negro se quedó varios minutos en silencio pensando en la forma tan estúpida en la que había muerto.

-Bueno, al menos no tendré que aguantar a mi madre diciendo: "Dani, estudia y deja de ver dibujitos chinos, Dani no voy a comprarte un wifi, etc".-Dijo el chico de pelo negro que resultaba llamarse Dani.

-Venga, no me cuentes tu vida, quiero irme rápido que hoy hay kebab para cenar, puedes elegir tres opciones:

1.Puedes ir al cielo, aunque es muy aburrido, solo hay curas que miran raro a los niños menores de 18 años y hippies.

2.Puedes ir al infierno, es más divertido, el otro día me pasé por ahí y vi a Bin Laden tirandose a la lava desnudo, pero satanás puede ser muy capullo contigo, te torturará y esas cosas.

3.Puedes ir a un mundo que hay perdido en la galaxia, hay cosas raras, además todo está gobernado por una organización malvada.-Añadió el chico de pelo blanco

-¿No hay nada mejor?-Dijo Dani decepcionado.

-No, si no te gusta te mando donde me de la gana a mi.-Repondió el chico de pelo blanco.

-Vale, vale, elegiré el mundo raro ese.-Decidió Dani un poco a la ligera.

-Veo que eres un suicida, bueno eso no me incumbe a mí, te llevaré al sitio.-Dijo el chico de pelo blanco abriendo un portal hacia ese mundo.

-Vale, el portal se cerrará en unos segundos, ahí tienes la ciudad más tranquila de este planeta para que puedas empezar.-Añadió el chico de pelo blanco señalando al frente.

Dani tiró del brazo del chico y lo tiró al suelo.

-Tu te quedas sin kebab y te vienes conmigo.-Dijo Dani inmovilizando al chico de pelo blanco.

-¡Sueltame, si el portal se cierra no tendré forma de volver!-Añadió el chico de pelo blanco observando como se cerraba el portal. 

-¡¿Que coño has hecho?! Ahora no podre volver.-Dijo el de pelo blanco sacudiendo a Dani.

-Bueno, ahora tendrás que vivir aquí, eso te pasa por ser desagradable con las personas que mueren, pero si no tienes dónde ir, puedes venir conmigo.-Añadió Dani.

-Si no hay más remedio tendré que ir contigo, mi nombre es Jesús.-Anunció el chico de pelo blanco.

-Aunque dije mi nombre antes, me llamo Dani y...¿Qué es eso de ahí en frente que parece que viene hacia nosotros?.-Dijo Dani presentandose y a su vez mirando al frente.

-¿¡Es una cabra gigante!? Aunque tiene unos dientes muy largos...Da igual, corre por tu puta vida.-Gritó Jesús corriendo de la cabra.

Ambos corrieron durante 10 minutos gritando como locos hasta que un misterioso encapuchado apareció.

-¡Dark Explosion!-Gritó el encapuchado lanzando un hechizo que hizo que la cabra volara en pedazos.

-¿Estais bien?- Preguntó el chico.-Si, si, solo estamos muy cansados...-Dijo Dani exhausto mientras Jesús estaba tumbado en el suelo sudando como un cerdo.

-Bueno, yo me llamo Samuel, soy un archimago que abandonó el territorio oscuro para ayudar a los aldeanos de esta ciudad, lo que habéis visto es un súbdito de mi hermano, el general Pablo, que sigue en las filas de la maldita organización que nos gobierna.-Dijo el chico bajandose la capucha revelando su identidad y su cabeza sin pelo.

-Oh ya veo, muchas gracias por salvarnos, ¿Nos podrías guiar por la ciudad? este chico se está muriendo y necesita descansar.-Preguntó Dani un poco cansado.

-Y...Y un kebab...-Añadió Jesús que seguía tumbado en el suelo.

Dani y Samuel intentaron llevar a Jesús a cuestas hacia el hotel más cercano.

FIN DEL CAPÍTULO 1: ¡BIENVENIDOS AL OTRO MUNDO!