Destino

El inicio

-¿Cómo que te casas? ¿Con quién?... ¿Porque? -cuestionaba con algo de asombro el pelinegro-

-¿Porque? Por qué la amo, es dulce gentil, ¡ama la ciencia! Quiere saber más de nuestro mundo, ¡de otros mundos! Ella es única... y especial, hermano -bufo el aludido cruzado de brazos sobre el pecho- y quiero pedirte seas mi padrino, nada me haría más feliz que eso.

-¿Y si ella no es lo que esperabas? ¿Y si en realidad es solo una farsa para tener mayor conocimiento? ¿No lo has pensado? ¿Y si te está usando? Thor! Entra en razón, es muy pronto.

-Ella no es así, deberías conocerla. A mí me basto con verla a sus preciosos ojos y ver todo el amor que siente por mí, eso no se puede fingir. –un silencio los acompaño unos segundos y después aquellas palabras llegaron- La amo, es todo lo que se -dijo sin más y puso una mano sobre su hombro- en verdad quiero seas mi padrino de bodas.

-No quiero ir.

-Vamos, eres mi hermano el único que me conoce bien.

-Lo pensare -decía quitando la mano sobre él y sin importarle mucho se giró para volver a la biblioteca, dejando a su hermano mayor con incertidumbre.

Se adentró a esas maravillosas historias que le hacían echar a volar su imaginación en cada libro que leía... y de nuevo aparecía él~ con quien había imaginado un sin fin de finales donde vencían a cualquier guerrero... pero ahora estaba ella, aquella Midgardiana quien robaba lo que por derecho le pertenecía, su hermano.

-Algo tengo que hacer, él no puede ser de nadie. ¡Siempre hemos estado junto! ¡Siempre hemos sido solo nosotros dos! -golpeaba la gran mesa de roble donde tenía aquellas pilas de libros- ahhhhhhh -en un arranque de ira los tiraba poniéndose de pie bufando, aquello le molestaba en verdad y así salió de la biblioteca abriendo la puerta de par en par y caminar sin rumbo fijo topándose con Fandral.

-Supiste lo de Thor? -preguntaba caminando junto a Loki sin importa lo escuchara o no- No puedo creer que esté pensando en proponérselo.

-¿Como? -detuvo su caminar- ¿aún no le propone matrimonio? -escuchar aquello hizo que en automático una sonrisa escapara de sus labios-

-No, está hablando en este momento con tu madre. Parece planea hacer de esto algo en grande, espero haya suficiente vino para disfrutar de ¡la gran fiesta! -decía Fandral con emoción al tiempo en que se percataba se encontraba solo- Loki? -pero el dios de las travesura había emprendido el camino para averiguar de qué trataba aquello.

-En la alcoba principal de los reyes de Asgard se encontraban en el balcón madre e hijo, donde aquel rubio fortachón le planteaba la idea de sorprender a su entonces novia con una gran sorpresa.

-Cariño, solo sé tú mismo y abre tu corazón. Si ella es la indicada no le importara se lo propongas de una forma discreta o con algo más excéntrico -acariciaba su rostro con gentileza y una sonrisa en los labios- mi pequeño ha crecido tanto, en que momento aquel niño tan inquiero y rebelde creció?

-Madre~ -tomaba la mano que le acariciaba- siempre seré tu niño rebelde -ríe-

-Creí que al final decidirías casarte con alguien de Asgard jamás imagine pudieras entregar su corazón a alguien fuera de aquí.

-Te refieres a Lady Sif? Sabes que a ella jamás la podre ver con esos ojos. Es como una hermana para mí, crecimos y combatimos juntos. Jamás será -ríe-

A lo que la reina negaba con suavidad- ¿Cuándo te darás cuenta y abrirás los ojos, cabezón? -ríe dándole una palmadita en su hombro- vamos acompáñame al comedor, tu padre está por llegar.

-Claro -camino al comedor con quien tomaba su brazo mientras aquella pregunta rondaba su cabeza.

Los días pasaron y la fecha tan esperada por el Dios del trueno llego, todo estaba listo. Había solicitado permiso de Odín para llevar a la Midgardiana al palacio donde pediría su mano. El salón principal estaba cuidadosamente arreglado con manteles y la mejor platería del reino aquello sería un evento en grande.

-¿Puedes creerlo cariño? Nuestro pequeño sentara cabeza y tendremos nietos unos lindos y adorables nietos.

-Solo espero que así pueda madurar para tomar el trono y tener una fuerte guerrera que le acompañe hasta el fin -decía Odín mientras tomaba la mano de su amada y besaba suavemente el dorso, haciendo sonrojar a su amada esposa-

La hora tan deseada por Thor al fin había llegado, se encontraban ya en el palacio donde la joven Jane Foster caminaba maravillada por los pasillos del palacio, todo aquello parecía sacado de un cuento de hadas. Todo le llamaba la atención cual niño pequeño.

-Thor~ es hermoso todo esto, es tan irreal -decía acariciando con suavidad uno de sus fuertes brazos- tú me pareces tan... tan maravilloso, jamás había estado con alguien quien me hiciera sentir volar... y visitar otros mundos -sonríe amplio- dime no es un sueño!

-Jajaja Jane, no es un sueño estamos tu y yo aquí y ahora~ -tomaba su mentón para acercarse y unir sus labios en un suave beso-

-Thor~ que pena -sonreía en un sonrojo ante aquel toque- ¿me puedes decir dónde está el tocador? Quiero refrescarme un poco.

-Claro -sonríe acariciando suave sus cabellos indicándole la dirección- estaré en el comedor principal, te esperare ahí.

La joven asentía para alejarse viendo cada parte, las paredes, los altos techos que mostraban años de historias en los muros. Todo aquello llamaba su atención- Es tan hermoso~

-Y no será tuyo -decía el pelinegro recargado en una de las paredes para verle- tu no perteneces aquí niña.

-¿Disculpa? ¿Y tú quién eres?

-Soy Loki futuro rey de Asgard -decía con elegancia- bienvenida a mi reino.

-Reía la chica- tú nunca serás rey, Thor lo será.

-Sonreía con triunfo- veras que lo que digo es verdad con el paso del tiempo niña insolente -se había acercado lo suficiente para verla detenidamente- no eres digna de Thor, solo eres una niña que esta con él por obtener conocimiento y sacar provecho de sus sentimientos y no lo permitiré -decía mientras movía las manos con gracia para hechizarla y hacer que cayera en un sueño profundo tomándola entre los brazos para evitar cayera- demonios, debo recordar para la próxima que la hechice cuando este en el lugar indicado.

Después de llevarla a su propia habitación la recostó sobre el sofá y meditaba si llevar a cabo el plan para impedir se casaran.

-Todo sea por mantener el equilibro y abrirle los ojos al torpe de Thor -cerraba los ojos conjurando un hechizo que le hizo cambiar de apariencia a una réplica exacta de la chica- no sé cómo puede usar esos harapos, debería aprender a vestirse con elegancia -se veía y no le agradaba lo que veía- no sé qué vio Thor en ti niñita.

Después de largos minutos Loki con la apariencia de aquella chica se acercaba al gran salón encontrando a Thor quien platicaba con su madre.

-¡Jane! Acércate quiero presentarte a mi madre -le indicaba que se acercara pero Loki quería alejarse de ahí, seguro Frigga lo descubriría ella le había enseñado todo lo que sabía acerca de la magia- Anda, ven -se acercaba para tomar su mano con calidez, aquello hizo que Loki sintiera un pequeño cosquilleo, que era aquello? Thor jamás lo había tomado de la mano de aquella forma y siendo honestos se sentía tan bien- Jane te presento a mi madre, Frigga.

-Es un placer querida -decía la mujer quien clavaba la mirada en el sintiéndose en verdad incomodo- espero disfrutes tu estancia en Asgard -le sonreía cálidamente como solo esa mujer podía hacerlo. Thor, ¿qué te parece si llevas a la joven Jane a recorrer el palacio? Quizá le agrade.

-Cierto, y quizá te presente a mi hermano. Ven Jane te mostrare los hermoso jardines con los que contamos.

La joven asentía y le seguía sin decir palabra alguna, sujetaba su mano con delicadeza. No había notado que las manos de Thor fueran así de ásperas pero a la vez le trataban con cariño y aquello le estaba molestando, ¿porque recibía aquel tipo de atenciones? Ella no las merecía.

•×Continuaraו