CAPITULO 9

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TANIT.

En cuanto salí del hospital decidí ir a algún lugar para despejarme. No quería dejar sola a mí mamá pero tampoco iba a discutir con ella.
Me encuentro sentada en una banca del parque, dándole vueltas en mí mano al ¿broche? No sé ni qué es, pero de lo que si me he dado cuenta es que cambia de imagen y no sé cómo. Decido caminar un poco, el día ya se ha puesto nublado y me gusta, a quien no le gusta!
Dirijo mí mirada hacia el suelo y me paralizó. Las piedras del camino estan de colores justo como la vez pasada. Miro por todo el camino, detrás y adelante de mí y está igual. Cierro los ojos con fuerza por unos segundos y los vuelvo a abrir, sigue igual. No puede ser, doy la vuelta y siento un escalofrío recorrer mí cuerpo, y justo como pensé hay estaba el, el mismo sujeto pero a diferencia de las otras veces no me asusto simplemente estoy ahí.
El empieza a caminar a mí dirección y mí pulso acelera.

Bueno puedes correr Tanit sabes.

Doy la vuelta para caminar o correr y me tropiezo con alguien.
Que puta suerte tengo.
Levanto la mirada y es un muchacho.

—Lo siento no me fijé— dice, yo no logro gesticular una palabra, el mira detrás de mí y hago lo mismo. No hay nadie, vuelve la mirada hacia mí, me dedica una sonrisa—Bueno tengo que seguir mí camino ¿Estás bien?— pregunta

—Si...sii estoy bien emmm disculpa también lo siento— si soy una estúpida lo sé.

—No te preocupes—sonrie y luego se va, es muy guapo y alto, el tipo de chicos que te encuentras una vez en la calle te enamoras y no vuelves a ver.

Me quedo parada como pendeja y se viene una pregunta en mí cabeza ¿A dónde se fue? Como no estoy para averiguar eso, salgo del parque y me dirijo al hospital. Tendría que ver si mí madre necesita algo e ir a la casa a bañarme.

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Ya le habían dado salida a mí madre. En todo el transcurso a casa ninguna dijo una sola palabra y para mí estaba bien. Al llegar a casa ella se dirigió a su habitación y yo a la mía, me di un baño cambie de ropa y baje a buscar algo para comer.
En lo que estaba preparando algo me dispuse a pensar
Las piedras, me había olvidado totalmente de eso ni siquiera vi si estaban así cuando me fui.
Subí a mí habitación me acomode en la cama para dormir, en lo que estoy tomando el sueño suena mí celular lo tomo y miro la pantalla. "número desconocido".
Pienso en contestar. Al final termino haciéndolo, no seré yo quién hable primero así que me quedo en silencio.

—Buenas.....— escucho del otro lado, es una voz masculina—Buenas—dice un poco más fuerte.
—Buenas noches—contesto.
—Tanit ¿cierto?—pregunta—bueno eso ya lo sé—dice irónicamente y yo en realidad no sé que decir— iré al grano, sé que no me conoces pero yo sí y necesito hablar contigo por lo tanto nos vemos mañana en el parque de la central a las 4 de la tarde obviamente.

—Y crees que te diré que si así nada más?—le pregunto—no sé quién eres ni qué eres, podrías ser un estafador aunque no lo confirmarás pero igual lo pensaré.

Escucho su risa—Clato un estafador, nena lo único que te pido es que te presentes en el lugar que te pedí, ya si no lo heces no te podré ayudar.

¿Ayudar? ¿Ayudar en que?

—Bien tengo que irme espero lo pienses y te presentes, que tenga buenas noches señorita.

No me deja decir nada y cuelga. Perfecto ahora qué hago, podría presentarme solo por la curiosidad de saber  a qué se debe esto, pero no sé quién es, aunque si fuera algo malo no elegiría un lugar donde habrá muchas personas entonces puede que vaya o no.
Ya dejaré de pensar en eso y me dedicaré a dormir eso es más importante.

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⏰ Última actualización: Sep 10, 2020 ⏰

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